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Le preguntaron a ChatGPT cuál es el impacto ambiental de la inteligencia artificial y esta fue su respuesta

La herramienta de OpenAI contestó sobre cómo impacta en el medioambiente. El excesivo consumo energético, una de las claves.

La tecnología tiene un impacto en el medioambiente y el uso de la inteligencia artificial (IA) no se queda atrás. Como parte del sistema, esta ChatGPT un prototipo de chatbot de inteligencia artificial desarrollado en 2022 por OpenAI que se especializa en el diálogo.

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Al preguntarle a la herramienta cuál es el impacto ambiental de la inteligencia artificial, especificó que “abarca diferentes aspectos y áreas de preocupación”.
Por un lado, el consumo energético, las emisiones de CO2, la producción de hardware, la aplicación de transporte, son algunos de los puntos que remarcó a la hora de hablar sobre este tema.

ChatGPT y el impacto ambiental de la inteligencia artificial.

“Es importante destacar que, aunque la IA puede tener un impacto ambiental significativo, también puede ser una herramienta poderosa para abordar problemas ambientales y contribuir a soluciones sostenibles. Por ejemplo, se puede utilizar para optimizar la gestión de la energía, el monitoreo de la biodiversidad, la conservación de recursos, entre otros”, aclaró.

Por ejemplo, algunos estudios señalan que ChatGPT necesitó 700 mil litros de agua, el equivalente de agua para refrigerar un reactor nuclear, con el fin de entrenar a su herramienta.

Cómo impacta ChatGPT en el ambiente

El impacto ambiental relacionado con el uso de ChatGPT, como modelo de inteligencia artificial de lenguaje, detalla que reúnen las siguientes características:

  1. Consumo energético: La utilización de modelos de IA como ChatGPT requiere un consumo significativo de energía durante la fase de entrenamiento del modelo. Los modelos de lenguaje como GPT-3 son extremadamente grandes y complejos, lo que implica la utilización de potentes unidades de procesamiento gráfico (GPU) y grandes cantidades de energía eléctrica para su entrenamiento inicial.
  2. Infraestructura de servidores: Para ejecutar una instancia en línea de ChatGPT, se necesitan potentes servidores y centros de datos. Estos centros de datos deben estar disponibles y funcionando las 24 horas del día, los 7 días de la semana para atender las solicitudes de los usuarios en tiempo real, lo que también requiere un consumo continuo de energía.
  3. Refrigeración y enfriamiento: Los centros de datos que alojan los servidores de ChatGPT necesitan sistemas de refrigeración y enfriamiento eficientes para mantener la temperatura adecuada de los equipos. Estos sistemas adicionales también contribuyen al consumo de energía.
La utilización de sistemas como ChatGPT consumen grandes cantidades de energía.

4. Huella de carbono de la nube: La infraestructura en la nube utilizada para alojar y desplegar servicios como ChatGPT también tiene un impacto ambiental. Las empresas de tecnología que ofrecen servicios de IA suelen tener centros de datos distribuidos en diferentes ubicaciones, lo que puede generar emisiones de CO2 debido al transporte de datos entre servidores y centros de datos.

  1. Actualización y reentrenamiento: Los modelos de IA como ChatGPT deben actualizarse y, en ocasiones, reentrenarse con nuevos datos para mejorar su desempeño y mantener su relevancia. Esto también conlleva un consumo adicional de energía y recursos computacionales.

“Además, algunos enfoques prometedores, como el cómputo cuántico y el aprendizaje federado, también buscan abordar los problemas de eficiencia y consumo energético en la IA. Como periodista, sería relevante investigar cómo los proveedores de servicios de IA están abordando estos problemas y cómo están implementando medidas para reducir el impacto ambiental de sus servicios”, concluyeron.

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Fecha de publicación: 20/07, 1:52 pm