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Alerta sanitaria

Advierten que los sorbetes ecológicos de cartón son tóxicos, ¿cuál es la explicación?

Así lo confirma un estudio publicada en la revista Food Additives and Contaminants, que ha asociado este elemento a una serie de problemas para la salud humana.

Un estudio publicado en la revista Food Additives and Contaminants reveló que los sorbetes ecológicos de cartón son tóxicos, ya que contienen sustancias perfluoroalquiladas (PFAS) que no son buenas para la salud humana.

El uso de estos sorbetes podría traer patologías relacionadas a una menor respuesta a las vacunas, peso al nacer, enfermedades tiroideas, aumento de los niveles de colesterol, daños hepáticos, cáncer de riñón y testicular.

Esta alerta sanitaria está basada en uno de los pocos análisis que se ha llevado a cabo en el mundo sobre este tipo de artículos, como son las “pajitas de papel” de uso cotidiano en casas y restaurantes.

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Así, desde la Universidad de Amberes (Bélgica), se ha insistido en que se deben extender estas muestras y tomar decisiones sobre la eliminación total de estas sustancias en la fabricación de productos con relación alimentaria.

Investigadores belgas analizaron 39 marcas de pajitas en busca del grupo de sustancias químicas sintéticas conocidas como poli y perfluoroalquiladas (PFAS). Tras los análisis se detectaron estos compuestos utilizados en papel y bambú. 

Este material se utiliza en la fabricación de productos cotidianos, desde ropa de exterior hasta sartenes antiadherentes, resistentes al agua, el calor y las manchas. Sin embargo, son potencialmente nocivos para las personas, la fauna y el medio ambiente.

¿Qué son estas sustancias?

Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS, por sus siglas en inglés) son un grupo de agentes químicos que incluye PFOA, PFOS, GenX, y muchos otros agentes químicos. 

Las PFAS se han fabricado y utilizado en una variedad de industrias en todo el mundo, como en Estados Unidos desde la década de 1940. De estos agentes químicos, el PFOA y el PFOS han sido los más producidos y estudiados. Ambos son sumamente persistentes en el medio ambiente y en el cuerpo humano.

Las PFAS pueden encontrarse en:

Alimentos, envasados de materiales que contienen esta sustancia, procesados con equipo que utilizó PFAS, o cultivados en tierra o con agua contaminados con PFAS; productos domésticos comerciales, como telas repelentes de manchas y agua, productos antiadherentes (como Teflon), compuestos para pulir, ceras, pinturas, productos de limpieza y espumas para combatir incendios (una importante fuente de contaminación del agua subterránea en los aeropuertos y bases militares donde se realiza el entrenamiento para combatir incendios); lugares de trabajo, como plantas de producción o industrias (por ej., cromados, fabricación de productos electrónicos o recuperación de petróleo).

Se descomponen muy lentamente con el tiempo y pueden persistir durante miles de años en el medio ambiente, una propiedad que ha hecho que se les conozca como “sustancias químicas para siempre”.

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Fecha de publicación: 30/08, 2:14 pm