Nuevos puestos que pide el mercado: qué hace un “líder de sustentabilidad”, por qué es tan buscado y cuánto gana
Pasó de ser una tendencia a convertirse en casi una obligación para satisfacer una cuestión cada vez más requerida, no sólo por los gobiernos, sino por los propios consumidores.
Para no quedar detrás de sus competidores, el 21% de las compañías argentinas incrementará su inversión en sostenibilidad en los próximos meses. Además, seis de cada 10 ejecutivos de América Latina consideran que esta agenda es rentable.
Las cifras pertenecen al estudio La Sostenibilidad en la Agenda de los Líderes de Latinoamérica, patrocinado por SAP y realizado por CIO Research, al que accedió iProUP.
Los números justifican el interés creciente de las empresas en un nuevo puesto que cada día se expande más y ocupa mayor espacio y relevancia dentro de las estructuras de las empresas: el gerente de sustentabilidad.
Sustentabilidad, como concepto, tiene que ver con cómo hacen las empresas para crecer de manera responsable, mejorando la calidad de vida, pensando en no afectar negativamente a la sociedad y cuidando los recursos, tanto humanos como ambientales.
De hecho, el 51% de los directivos argentinos señala que sus compañías cuentan con estrategias de sostenibilidad, lo que las ubica por encima del promedio de la región (45%).
Relevancia
Se trata de una temática que atraviesa a toda la organización y ha dejado de ser un “programa” para transformarse en una forma de enfocar el negocio. Por ejemplo, de modo parejo y transversal a todas las organizaciones consultadas, la figura del reporte de sostenibilidad se presenta como un instrumento de valor:
- El 45% de las empresas argentinas confirma contar con uno anual
- El 38% reconoce a la agenda sustentable como un indicador clave de desempeño (KPI) del negocio
- El 13% está trabajando en su creación
En este contexto, los gerentes o líderes de sustentabilidad trascienden su dependencia de otras áreas (antes se ubicaban dentro de direcciones como Institucionales o Recursos Humanos) y ganan protagonismo. Su presencia es clave: destaca cómo las acciones tomadas por la firma son completamente transversales a todas las áreas y al propio negocio.
“El tema registró un fuerte auge en la prepandemia, cuando el concepto de Responsabilidad Social Empresaria (RSE) empezó a migrar hacia el de Sustentabilidad“, señala a iProUP Federico Carrera, Managing Partner de High Flow – DNA Group.
Según el ejecutivo, “las compañías que tenían ese departamento creado empezaron a integrar los objetivos de desarrollo sostenible dentro de sus modelos de negocio, por exigencia de los accionistas, y RSE pasó a un segundo plano. Las empresas grandes y las productivas son las que más demandan estos roles, llegando a tener grandes equipos”.
Carrera remarca que “con la pandemia su rol se volvió más visible porque tuvieron que meterse más en el negocio y velar por el corto plazo, no tanto por el medio y largo”.
Este puesto en una multinacional puede tener un sueldo promedio de $230.000 brutos. “En una Pyme o un startup son posiciones menos tradicionales”, aclara el directivo de DNA Group.
Por su parte, Laura Scarano, gerente de Selección en Bayton, afirma que “si bien es muy amplia la brecha de salarios por este tipo de puestos dependiendo la industria y la organización, están entre los líderes que más ganan por su demanda y poca oferta en el mercado”.
La experta subraya que “es un perfil que hoy se consigue, pero si la demanda sigue la curva que se ve desde el año pasado puede ser que a mediano plazo se dé una lucha para reclutar este tipo de talento“.
“Algo positivo es que este líder nace de la fusión de varias disciplinas por lo cual también es una ventaja para formarlos. En este sentido, muchas compañías toman jóvenes profesionales para que vayan creciendo en su experiencia junto con la compañía”, observa Scarano.
Amplia búsqueda
Un punto importante es que en muchas organizaciones este nuevo rol se está cubriendo con personas que se han capacitado en otras áreas. Por lo que puede ser un puesto atractivo para profesionales que buscan reconvertirse.
“Talento hay y parte de lo que se ve actualmente es que muchos jóvenes buscan formarse en el tema. Incluso, hay una mayor oferta desde las universidades, que ya cuentan con programas de grado, posgrado y hasta maestrías. El futuro de esta disciplina es muy grande y recién empieza”, revela a iProUP Juan Paulo Díaz Alcantara, Gerente EH&S Cluster Sur y Ecuador en Lumen.
Según el ejecutivo, “más allá de la formación de base, es fundamental entender la sustentabilidad más que nada desde la sostenibilidad, como un concepto más amplio que incluye lo social y lo económico. Comprender la relación entre el Estado, las empresas, las organizaciones sociales, entre otros temas”.
“Esto permite conocer y tomar mayor conciencia sobre la gestión de riesgos relativos a la agenda de la sostenibilidad en las organizaciones, porque es una cuestión que no se puede ver únicamente desde el ámbito privado, sino que tiene que ser transversal a todos los sectores”, añade Díaz Alcantara.
María Vanesa Marignan, gerente de Banca Responsable y Sostenibilidad en Santander Argentina, confía a iProUP: “Lo importante es el interés genuino por impulsar las acciones de triple impacto (social, económico y ambiental), lo que se complementa con experiencia laboral vinculada a sustentabilidad o los negocios responsables“.
Algunas empresas han sido de avanzada en esto de marcar camino en la sustentabilidad. Una de ellas es el Banco Galicia, que ya en 2005 creó el puesto. Es por esto que el área ya tenía gran relevancia dentro de la estructura de la firma.
“Este contexto tan particular, hizo que la líder de la gerencia participara de la mesa de toma de decisiones permanentes con el Gerente General”, revela a iProUP María Vanesa Marignan, gerente de Banca Responsable y Sostenibilidad en Santander Argentina.
“La pandemia profundizó este vínculo y a convertir al líder de sustentabilidad en un actor clave que comenzó a participar en espacios de comité de crisis, siendo consultado permanente. E incluso se brindó un mayor presupuesto a la gerencia para poder lidiar con la emergencia y excepcionalidad que el contexto presenta”, añade la ejecutiva
Para Marignan, “el perfil de un profesional de la sustentabilidad, en un contexto de transformación digital continua, requiere de una combinación de habilidades blandas y analíticas para tomar decisiones en función de datos y así lograr un mix que jerarquice el rol”.
Otra líder del área es Valentina Rodríguez, gerente de Sustentabilidad y Asuntos Públicos de ManpowerGroup, quien conoce ampliamente qué tipo de competencias se demandan para poder desarrollarse en el puesto.
“Están vinculadas a la comunicación, empatía, resiliencia y una mirada de corto, mediano y largo plazo para hacer frente a los desafíos sociales y ambientales definidos para la organización”, afirma la ejecutiva. Y destaca “la flexibilidad y capacidad de escucha para, entre otras cosas, integrar las expectativas de los grupos de interés y sus demandas de transparencia que se vuelven imprescindibles“.
“Por otro lado, se requiere un cabal entendimiento del negocio y de la industria en la que se esté trabajando, ya que es fundamental delinear su estrategia asociada al core“, explica Rodríguez.
Además, la líder de la consultora de recursos humanos refiere a la versatilidad de la posición y asegura que “se trata de un puesto que no está necesariamente asociado a una carrera en particular“.
“De hecho, por lo que conocemos, no hay un denominador común. Es decir, hay líderes en sustentabilidad que son comunicadores sociales, sociólogos y politólogos, como así también economistas y licenciados en administración de empresas. Lo que se torna fundamental es atender a las competencias que requiere el puesto”, explica.
Un punto a favor que tienen quienes aspiren a desarrollarse en esta posición es que hoy todas las compañías de porte deben contar con un especialista.
“Industrias de diferentes áreas han visto la sostenibilidad como una estrategia de negocio, ya que la gestión sostenible tiene muchas ventajas asociadas a garantizar la permanencia y éxito de las organizaciones en el tiempo”, advierten a iProUP desde Bridgeston Argentina.
La compañía agrega que “la empresa será más eficiente y eficaz, fortalecerá la relación con sus públicos de interés, y percibirá beneficios directos en su operación como el uso más eficiente de los recursos, disminución de su impacto ambiental, mejora de la calidad de sus productos y servicios, etcétera”.
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“Las sociedades exigen a las empresas una licencia social y está muy bien que así sea. Los clientes eligen por el compromiso que tiene una empresa con la sociedad, ya no solamente por tener buenos productos y servicios. Creemos que el crecimiento de la comunidad es necesario para el crecimiento del negocio“, concluye la gerente de Santander.
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