Los diques del barrio más caro de la Ciudad siguen sin recolección de residuos
El gobierno porteño suspendió una licitación para otorgar a una empresa el servicio de limpieza y recolección diferenciada de residuos. A qué se debe.
En Buenos Aires, cada vez que se hace mención a aguas contaminadas, de manera inmediata se piensa en la imagen del Riachuelo. Sin embargo, en la Capital Federal existen otros focos tóxicos en lugares impensados, como pueden ser los diques de Puerto Madero, donde ya en el 2017 se detectaron fluidos cloacales que acarrean un notorio riesgo ambiental, según un estudio reciente.
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Una nota publicada en ese año en el diario La Nación daba cuenta de la elaboración de un informe realizado por el Consejo Económico y Social porteño (Cesba) con la Universidad de Palermo (UP), que analizó espejos de agua de la ciudad, entre los que incluyó la zona del Puente de la Mujer, sobre el Dique 3, donde se tomaron muestras entre octubre de 2016 y ese año.
Puerto Madero fue diseñado a fines del siglo XIX con el fin de dar solución al problema portuario y permitir la exportación de granos producidos en la región pampeana. Las obras se iniciaron en 1887 y abarcaban una superficie de 817.000 m2.
Para ello se construyeron 4 diques de 576 metros de largo y 160 metros de ancho, sobre un eje paralelo a la costa. En torno a los muelles se emplazó la infraestructura necesaria para el funcionamiento del puerto: vías férreas, caminos y los famosos “docks” de estructura de hormigón y muros ladrilleros.
Los diques 1 y 2 se abrieron en 1890. El 3, se abrió en 1891 y el 4 en 1897, lo que marcó la finalización de la obra. Para ese tiempo, Puerto Madero contaba con 17 kilómetros de muelles y casi 100 kilómetros de vías ferroviarias en los alrededores.
Con la llegada del nuevo siglo también se harían trabajos complementarios. Entre 1900 y 1905, sobre la margen oeste, se construyeron depósitos también llamados docks. Tenían entre 3 y 4 pisos y sótano.
Su estructura era de hormigón y hierro con cimientos de piedra y cobertura de ladrillos a la vista. En muchos de ellos se adosaron grúas que proveyó la firma británica Armstrong, Mitchell and Co., con sede en Newcastle. La construcción la realizó la empresa alemana Wayss & Freytag.
Proyectos sin suerte en Puerto Madero
Posteriormente, se sucedieron diferentes proyectos para la zona, sin ejecución total hasta que finalmente, en 1989 y con la cooperación del Ayuntamiento de Barcelona, se abrieron los proyectos para la recuperación de la zona portuaria degradada y se funda la Corporación Antiguo Puerto Madero S.A.
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Luego del concurso de planes, y la aprobación en 1992, comenzó la puesta en valor del sector Oeste, más cercano y accesible al Área Central, donde se ubican los tradicionales docks.
En 1996 comienza la segunda parte del plan, con las obras en el sector Este y durante toda esa década, esta parte de la zona portuaria comienza a ser revalorizada, lo cual impulsó que en 1996 sea declarada como el 47º barrio porteño.
Esto obligó a nomenclar las calles, que fueron bautizadas con los nombres de mujeres con actitud luchadora en el país, hecho que opera como herramienta de diferenciación.
La estructura territorial de este barrio se caracteriza por la existencia de una trama original pensada para un uso diferente del actual, donde las calles bordean los diques, las distancias son importantes, y la típica cuadra urbana es más bien una excepción. La disposición Norte-Sur de los diques interrumpe la comunicación Este-Oeste, quebrando la continuidad de los procesos económicos e inmobiliarios, demarcando dos zonas dentro del barrio, conocidas como Puerto Madero Oeste (los docks) y Puerto Madero Este-
La contaminación de los diques de Puerto Madero
En el caso de los cuatro diques en los que se divide la zona, el informe del Cesba y de la UP arrojó resultados que encendieron la alarma debido a que en las conclusiones del documento se advertía sobre la calidad ambiental del agua de esa zona del barrio más caro de la Ciudad de Buenos Aires.
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“Es mala, presenta potencial riesgo biotóxico para los seres vivos y riesgo microbiológico para las personas”, advertía el trabajo además de revelar que “tiene conexión con fluidos cloacales” y recomendar “evitar todo contacto”; por ejemplo, en actividades deportivas o recreativas.
Las aguas recorren los cuatro diques que posee Puerto Madero que tienen cinco metros de profundidad, ocupan 40 de las 170 hectáreas en las que se extiende uno de los barrios porteños más modernos y exclusivos, proyectado como un centro residencial, gastronómico y empresarial y tienen la particularidad común de estar unidos por un canal de libre navegación de unos 2,5 kilómetros, utilizado para la práctica de remo y de kayak.
Calificación ambiental en Puerto Madero
El informe del 2017, es decir de hace ya siete años, elaborado por el grupo de técnicos de la Facultad de Ingeniería de la UP midió el llamado índice de calidad del agua (ICA), que combina datos a partir de exámenes químicos y microbiológicos sobre nueve parámetros, entre ellos la acidez, la temperatura, la turbiedad, la conductividad y la presencia de bacterias coliformes fecales.
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En la nota de La Nación se explicaba además que la información se promedia matemáticamente y se obtiene un único valor numérico, al que se puede considerar la calificación ambiental del curso o el espejo de agua. El índice va de 0 a 100; cuanto más alto sea, mejor es la calidad.
En el caso de los diques de Puerto Madero, el ICA hallado fue de 49, muy por debajo del nivel ideal teniendo en cuenta por ejemplo que en la laguna del Parque Centenario alcanzó un favorable 70 y en el lago Regatas de Palermo, 60. Por el contrario, en el Riachuelo, a la altura del paseo Caminito, la puntuación fue de 33, la peor de todas las monitoreadas.
El estudio sostenía que las muestras de agua fueron sometidas a “ensayos físicos, químicos y microbiológicos”, pero también se sumaron pruebas adicionales, como la medición de cromo y arsénico, para ampliar la información sobre la calidad del agua analizada.
“En el caso de Puerto Madero fue enorme la cantidad de microorganismos de coliformes totales y fecales constatados en las muestras recogidas”, detallaba el paper.
Del mismo modo, se evidenció un nivel de 110.000 número más probable (NMP) cada 100 mililitros de coliformes totales, cuando el límite recomendado para aguas recreativas es de 1000.
En el caso de los fecales, el valor fue 9300 NMP/100 ml, frente al nivel cero sugerido nacional e internacionalmente en espejos de agua dentro de centros urbanos.
Por esos motivos, expertos consultados en aquellos años advertían que los niveles hallados en Puerto Madero eran elevados y encendían una luz de alarma que no habría que dejarlo pasar, porque también se mostraba un llamado de atención a la supervivencia de ese cuerpo de agua.
La decisión del Gobierno porteño de “limpiar”
Este año, el gobierno porteño tomó la decisión de elaborar pliegos y convocar a una licitación para otorgar a una empresa el “Servicio de Limpieza y Recolección Diferenciada de Residuos en los espejos de agua de los Diques I, II, III y IV de Puerto Madero y tareas complementarias”.
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El llamado quedó a cargo de la Dirección General de Limpieza, dependiente de la Subsecretaría de Higiene de este Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana, al amparo de lo establecido en los artículos 32 y 33 primer párrafo de la Ley Nº 2.095 y sus posteriores modificaciones de compras y contrataciones.
Así fue como se aprobó el Pliego Único de Bases y Condiciones Generales que, se ha confeccionado el Pliego de Bases y Condiciones Particulares y de Especificaciones Técnicas que deben regir este concurso licitatorio.
El presupuesto otorgado al servicio por las autoridades del gobierno que lidera Franco Macri es de algo más de $2.2027 millones para una contratación de 48 meses consecutivos e ininterrumpidos, conforme lo indicado en el artículo 5 del pliego.
De esa forma, se publicó en el Boletín Oficial del 4 de junio pasado la Resolución N.º 460 que aprobó el “Pliego de Bases y Condiciones Particulares (PLIEG-2024- 20807730-GCABA-DGLIM) y el “Pliego de Especificaciones Técnicas (PLIEG-2024- 21457599-DGLIM) para la contratación del “Servicio de Limpieza y Recolección Diferenciada de Residuos en los espejos de agua de los Diques I, II, III y IV de Puerto Madero y tareas complementarias”.
El artículo 2° quedó reservado para el llamado al concurso cuya apertura se debía llevar a cabo este miércoles 19 de junio a las 12 horas, al amparo de lo establecido en los artículos 32 y 33 primer párrafo de la Ley Nº 2.095 de compras y contrataciones”.
Por qué se suspendió la recolección de residuos en Puerto Madero
Sin embargo, en el Boletín Oficial porteño de este martes 18 de junio, se suspende el proceso, según lo establecido por la Resolución N.º 515 que recuerda la tramitación de la licitación pública de Etapa Única N° 7162-0333-LPU24, para la contratación del “Servicio de Limpieza y Recolección Diferenciada de Residuos en los espejos de agua de los Diques I, II, III y IV de Puerto Madero y tareas complementarias”.
Se hace referencia también a que el objetivo de la convocatoria era el de “la realización de tareas de limpieza y recolección de residuos sólidos y semisólidos en los espejos de agua de Puerto Madero y espacios circundantes, debiendo operarse en forma ordenada con el menor grado de molestia posible y respetando en todos los procedimientos las características históricas, ambientales, sociales y patrimoniales de Puerto Madero, minimizando ruidos y movimientos innecesarios de equipamiento y personal”.
Pero también aclara que, debido a razones de oportunidad, mérito y conveniencia, “resulta conveniente otorgar mayor tiempo para la elaboración y presentación de las correspondientes ofertas”, lo cual traducido a lo que realmente ocurrió es que o no hubo oferentes o los interesados solicitaron un incremento en el canon a cobrar por llevar adelante el servicio.
Por dichos motivos, la Ciudad estimó “necesario postergar la fecha de apertura”, que por ahora no se sabe si los pliegos o los fondos serán modificados o incrementados para obtener interés de parte de empresas que tengan intenciones de ofrecer este proceso.
Por ello y de acuerdo a lo expuesto, el Ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Miguel Baistrocchi, decidió postergar la fecha de Apertura de Ofertas de la Licitación para el 28 de junio de 2024 a las 12 horas.