Lobby norteamericano para impulsar una mayor exploración petrolera en el mar

Las empresas de origen norteamericano salieron a respaldar la exploración off shore de hidrocarburos en la Argentina, un negocio considerado como la “nueva Vaca Muerta” del país que promete generar divisas por más de u$s20.000 millones al año.

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Las perspectivas se generaron a partir de que la empresa Equinor, en sociedad con YPF, decidieran iniciar un proceso de búsqueda de petróleo en las costas de Mar del Plata, prometiendo así que la provincia de Buenos Aires se convertirá en productora de hidrocarburos.

El objetivo no fue sencillo ya que debió intervenir la justicia para analizar varias demandas realizadas por organizaciones ambientalistas en contra del plan de ambas empresas que anticipa que solo el bloque CAN100, ubicado a 315 kilómetros de la ciudad balnearia, tiene el potencial de generar 200.000 barriles de petróleo diarios, una producción similar a la que actualmente tiene toda YPF en todo el país y casi equivalente a la que hoy tiene la formación Vaca Muerta.

En ese sentido, los inversores provenientes de Estados Unidos entienden que este desarrollo de hidrocarburos mar adentro podría cambiar el escenario energético de Argentina y abre una nueva posibilidad de exportar crudo al mundo en mayor escala.

Así lo hicieron saber en el marco de la audiencia pública celebrada a principios de diciembre para debatir sobre la “Adquisición sísmica 3d en el bloque CAN-102”.

La exposición estuvo a cargo de Alejandro Díaz, presidente de AmCham, la cámara de comercio que nuclea a 640 compañías de origen norteamericano que emplean directamente a 420.000 personas y representan 42 rubros de la actividad económica, aportando el 19,2% del PBI, el 39% de la recaudación fiscal, el 19,3% de las importaciones y el 23,4% de las exportaciones de nuestro país.

“Nuestra cámara cuenta con una larga trayectoria en la búsqueda de la construcción de consensos en materia de políticas públicas en general y energética en particular, y por lo cual nos vemos en la responsabilidad de exponer nuestra visión sobre algunos conceptos que pueden confundir a la sociedad sobre las consecuencias del desarrollo de la realización de estudios sísmicos en el océano Atlántico Norte”, aseguró el ejecutivo en su presentación.

El titular de la AmCham basó su intervención en un informe especialmente elaborado en base a experiencias locales e internacionales en el cual se sostiene que el riesgo de este tipo de actividades es casi nulo y se asegura que los beneficios sociales y económicos para las sociedades vinculadas son probados y largamente beneficiosos para contribuir a la recuperación económica de la zona.

En términos globales, y en base a datos publicados por la U.S. Energy Information Administration (2015), la producción de petróleo offshore fue responsable de casi el 30% de la producción mundial, además de que entre los principales descubrimientos de hidrocarburos convencionales en las últimas décadas, más del 90% tuvieron lugar en yacimientos off shore.

El trabajo ubica a la Argentina como “uno de los países pioneros” en América latina a la hora de emplear modalidad offshore de explotación hidrocarburífera, contando con más de 50 años de experiencia en explorar su mar continental en búsqueda de hidrocarburos, y habiendo perforado al momento más de 180 pozos en el lecho marino.

“Si nos enfocamos en las plataformas presentes actualmente en el Mar Argentino, alrededor del 18% del gas natural y el 2% del petróleo utilizado por toda la población proviene de la actividad offshore que allí se realiza, con 37 pozos operativos actualmente”, detalla el documento expuesto por Díaz en su intervención y en el cual además se destaca la falta de incidentes ambientales serios que resaltar en los últimos años.

Beneficios, más que riesgos

Ahora bien, para poder explorar en el mar y hacer uso de los recursos, el ejecutivo de la AmCham señaló como primer paso la realización de la exploración sísmica, “fundamental para obtener una imagen del subsuelo del lecho marino, evaluar el potencial del bloque y, si es de interés, avanzar con la perforación de pozos exploratorios”.

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A partir de este mecanismo, las empresas norteamericanas entienden que las ventajas de la actividad off shore exceden largamente los riesgos debido a una serie de motivos:

• 1) El impacto final de la exploración o de explotaciones en plataformas offshore es bajo o nulo, mediante la aplicación de las medidas y protocolos de seguridad adecuados, mecanismos de mitigación, o Planes de Gestión Ambiental requeridos.
• 2) Cada año se realizan en el mundo cientos de campañas de prospección sísmica y lo mismo ha ocurrido en Argentina en los últimos 60 años, y sin impactos relevantes.
• 3) No hay indicios ni hechos que nos demuestren científicamente que dichos estudios tienen efecto en la fauna marina del lugar.
• 4) En nuestro país se trabaja bajo el “Protocolo para la Implementación de Monitoreo de Fauna Marina en Prospecciones Sísmicas”, un procedimiento que está entre los más estrictos del mundo, al punto que duplica el área de exclusión de fauna respecto a casi todos los protocolos (a nivel mundial suele ser de 500 metros, pero que en Argentina es de 1000 metros).
• 5) En el caso de que se avanzara con la perforación de pozos exploratorios, las operaciones previstas estarán localizadas lejos de las costas (el Bloque CAN-102, donde se propone hacer este estudio de prospección sísmica, se encuentra a más de 300 km de Mar del Plata) y por ende no afectarán el paisaje, ni la población.
• 6) No se presentan elementos fácticos para pensar que ante el potencial riesgo de un siniestro puedan estos afectar a las localidades costeras. De hecho, en México, EE. UU., Reino Unido y Brasil se extrae petróleo desde hace décadas y dichas exploraciones no han afectado en los más mínimo las actividades de turismo. En Río de Janeiro los pozos de Petrobras están frente a las costas y no por ello se encuentran afectadas las actividades pesqueras y/o turísticas.

Diversificar la matriz energética

A partir del análisis de cada una de estas premisas, la AmCham entiende que la actividad turística o pesquera de Mar del Plata no se verá afectada cuando la exploración se realizará a más de 300 km de distancia de la costa.

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“Creemos firmemente que la actividad offshore debe estar enmarcada en una estrategia a nivel nacional apuntada a mantener una matriz energética diversificada que habilite la provisión de mayores y diversas fuentes energéticas en favor del desarrollo económico, social y cultural del país”, detalla Díaz.

Para el titular de la AmCham, la Argentina se encuentra ante la oportunidad de utilizar los recursos que dispone, generando valor y colaborando a la vez con la construcción de un país más próspero y autosuficiente, sin perder de vista el proceso de transición energética en el que nos encontramos comprometidos.

Por eso entiende que ampliar oportunidades de desarrollo “es un imperativo que, como sociedad, no podemos darnos el lujo de eludir, por lo cual desde la Cámara apoyamos las oportunidades de desarrollo y crecimiento, de convertir los recursos naturales en energía, y de seguir trabajando para lograr transición energética, creación de empleo, generación de divisas, cadenas de valor, y exportaciones”.

Más inversiones con menos presiones

La presentación de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en esta audiencia pública se encuadra en la mirada que las empresas de ese país tienen con respecto al abastecimiento de energía y a la transición energética que afirman, generará inversiones y quitará presión sobre las divisas. “El offshore central para el abastecimiento de la energía necesaria para la actividad económica, con salvaguardas ambientales que se aplican en los casos”, agrega el informe vinculado al proyecto propuesto en Mar del Plata y en todo el Mar Argentino.

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Pero, además de este escenario, las compañías con sede en Estados Unidos entienden que se trata de una “excelente posibilidad” en el marco de la restricción externa y la situación de endeudamiento en la que la Argentina se encuentra.

“Iniciativas de este tipo resultan fundamentales para impulsar el desarrollo y la competitividad del país, a través de la creación de empleo, la atracción de inversiones y la generación de divisas”, remarca el documento de AmCham.

Para esta cámara empresaria, la industria de extracción y exploración de hidrocarburos es una de las actividades generadoras de una mayor demanda de bienes y servicios y un multiplicador genuino del nivel de empleabilidad, las ciudades o puertos que son centro de dichas actividades se ven largamente beneficiados, como lo muestra la experiencia internacional, mejorando sustancialmente los estándares de vidas de sus habitantes”.