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Curiosidad

Qué beneficios ambientales tienen los vinos orgánicos y regenerativos

Estos productos priorizan la sostenibilidad ambiental y la reducción de impactos negativos en la salud. Qué tiene que tener un vino para ser orgánico.

Un vino orgánico es un producto vinícola que se produce siguiendo prácticas agrícolas y de vinificación que priorizan la sostenibilidad ambiental y la reducción de impactos negativos en la salud.

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¿Qué características encierra un vino orgánico? Por un lado, el cultivo de uvas sin agroquímicos, así se evita el uso de pesticidas, herbicidas y fertilizantes sintéticos y en su lugar, se emplean métodos naturales y orgánicos para el control de plagas y el enriquecimiento del suelo.

La elaboración de estos vinos encierran procesos naturales donde se minimiza el uso de aditivos y productos químicos, como sulfitos y clarificantes, que son comunes en la producción convencional. Así, se busca preservar las características naturales de la uva y el vino.

En tanto, las bodegas que producen estos vinos cuenta con una certificación Orgánica, que muchas veces se puede observar en la etiqueta. Además, respetan la Biodiversidad, es decir, promueven la diversidad de cultivos y la protección de la biodiversidad, creando un equilibrio más saludable en el ecosistema circundante.

Vinos orgánicos y regenerativos, beneficios para la salud y el medioambiente

Algunos de los beneficios para la salud que encierra este tipo de producción es que cuentan con menos residuos químicos que pueden ser perjudiciales. Lo mismo con el tema de los sulfitos: al tener poca cantidad, puede ser beneficioso para las personas sensibles a estos compuestos y reducir la probabilidad de dolores de cabeza y alergias relacionadas con el vino.

Algunos de los beneficios para la salud que encierra este tipo de producción es que cuentan con menos residuos químicos que pueden ser perjudiciales.

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Sobre los beneficios ambientales, podemos enumerar:

  1. Agricultura sostenible: los vinos orgánicos se cultivan siguiendo prácticas agrícolas sostenibles que reducen la erosión del suelo, preservan la biodiversidad y fomentan la salud del ecosistema.
  2. Menor contaminación del agua y el suelo: al no utilizar productos químicos sintéticos, la producción de vino orgánico reduce la contaminación del agua y del suelo, protegiendo así los recursos naturales.
  3. Fomento de la agricultura regenerativa: los vinos regenerativos van más allá al promover prácticas que ayudan a restaurar y mejorar la salud del suelo y el entorno en general, contribuyendo a un ecosistema más equilibrado y resiliente.

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Fecha de publicación: 28/09, 8:59 pm