El Gobierno porteño licita la recolección de 17 millones de kilos diarios de basura

La Ciudad de Buenos Aires impulsa la creación de más de una docena de nuevas empresas de recolección de basura que se dedicarán de manera exclusiva a los residuos sólidos urbanos generados por los porteños.

Para esto, el gobierno porteño dividirá el sistema en las comunas para que grupo de cooperativas se haga cargo de la recuperación de materiales reciclables y reutilizables con el objetivo de evitar que sigan siendo enterrados en basurales.

Las compañías se sumarán a los sistemas urbanos de recolección tradicionales que, en el ámbito del AMBA, operan en cinco zonas y recolectan 17 millones de kilos diarios de basura que desechan los 16 millones de personas que viven o trabajan en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires (GBA).

Una foto de la que también participan 2.500 camiones de recolección diarios que el gobierno que conduce Horacio Rodríguez Larreta quiere sumarle nuevos “players” con la implementación de medidas orientadas a preservar la salud de la población y del ambiente a partir de la disminución progresiva de residuos a generar y disponer.

Según este proceso, hace falta concebir un sistema de gestión integral que permita la recuperación de materiales reciclables y reutilizables y deje sin efecto, como disposición final, el entierro indiscriminado de los residuos revalorizables en los rellenos sanitarios, teniendo en cuenta además el impacto favorable que genera la actividad de recuperación y reciclado en su aspecto ambiental, social y económico.

Con este marco y a través de la Resolución N.º 452 publicada en el Boletín Oficial del gobierno porteño, se acaba de lanzar un concurso público nacional para desarrollar en las 15 comunas el denominado “Sistema Público de Recolección Diferenciada, Selección, Acondicionamiento y Comercialización de la Fracción Secos de los Residuos Sólidos Urbanos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.

El plan, a cargo de la Subsecretaría de Higiene Urbana del Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana, pretende incorporar a los recuperadores de residuos reciclables al servicio de recolección de higiene urbana vigente.

Basura Cero

Las autoridades lanzaron una convocatoria a las cooperativas de recuperadores ambientales constituidas conforme a la Ley Nacional Nº 20.337 para que presenten propuestas de operación en el ámbito de la Ciudad.

Fuentes oficiales explicaron que los ejes del sistema están orientados a cumplir con el conjunto de pautas, principios, obligaciones y responsabilidades establecidos por la Ley N° 1.854 de Gestión integral de Residuos Sólidos Urbanos.

La iniciativa se basa en los principios de manejo sustentable de residuos y en las acciones de disposición inicial selectiva, recolección diferenciada, transporte, tratamiento, reciclado y minimización de la generación de este tipo de basura reciclable.

Para eso, la resolución contiene el pliego de bases y condiciones que regirá el concurso público para seleccionar las cooperativas que tendrán a cargo la concesión de este nuevo sistema de recolección diferenciada y comercialización de los residuos secos en las diferentes Comunas de la Ciudad.

La apertura de los sobres se llevará a cabo el 29 de junio próximo a las 12 horas en Avenida Martín García N° 346, Planta Baja, de la Capital Federal. Ese día, los integrantes de la Comisión Evaluadora de Ofertas deberán elegir entre las ofertas acercadas por los recuperadores ambientales

De acuerdo a los considerandos del pliego, el servicio debe ser prestado con la calidad requerida para alcanzar la eficiencia en la ejecución, control de calidad y aseguramiento de la prestación.

“El propósito de esta política es que la gestión de las cooperativas continúe desarrollándose de modo que permita la recuperación de materiales reciclables y reutilizables y priorice la asignación de zonas de trabajo, la regularización de la actividad y el control de situaciones de informalidad, insalubridad, minoridad, entre otros”, destaca el llamado a licitación. 

El documento destaca el principio de Basura Cero con el que la administración porteña plantea continuar con el proceso de reducción progresiva de la disposición final de residuos sólidos urbanos a través de la adopción de medidas que permitan reducir la generación de este tipo de basura, su separación selectiva, recuperación y reciclado.

Obligaciones y negocio

El mecanismo plantea transformar estos residuos en recursos o materia prima que se pueda incorporar nuevamente al circuito productivo.

En este sentido, la convocatoria oficial exige a las cooperativas interesadas hacerse cargo de las siguientes prestaciones:

1) Servicio de recolección domiciliaria del material, su acopio transitorio en un medio de transporte y el traslado a un Centro Verde.

2) Recolección en los Puntos Verdes del residuo, su acopio transitorio en un medio de transporte y el traslado de los materiales a un Centro Verde.

3) Servicio de recepción del material proveniente de campanas y/o contenedores verdes operados por el GCBA, acopiados transitoriamente y procesados en un Centro Verde.

5) Acopio, separación y procesamiento para la comercialización de los residuos sólidos urbanos en los Centros Verdes.

6) Ejecución de campañas de educación y concientización ambiental dentro de la zona adjudicada.

Como contrapartida, las concesionarias tendrán la exclusividad para la prestación de los servicios en las comunas adjudicadas y podrán  comercializar por su  cuenta los residuos reciclados.

De todos modos, deberán presentar ante las autoridades un informe sobre el material recolectado, acondicionado y comercializado dentro de los 10 días hábiles posteriores a la finalización de cada mes calendario.

El plazo contractual de cada concesión será de cuatro años, contados desde la formalización del contrato aunque la Ciudad podrá revisarlo a los dos años, pudiendo rescindirlo “por culpa de la concesionaria en caso de considerarla deficiente”. En ese caso, la zona deberá ser nuevamente concursada en un plazo no superior a 90 días.

Para la elección de las cooperativas se tendrá en cuenta la ponderación de la documentación presentada y otros factores técnicos y administrativos.

Además, el análisis se hará partiendo de la zona mayor a la menor en puntaje y se evaluarán los antecedentes de los oferentes; el plan de trabajo y de inclusión social. 

Los pliegos también especifican los materiales susceptibles de ser recuperados tales como vidrio; bolsas y films plásticos; envases de tetrabricks para leche larga vida y vino; telas; latas y botellas PET usadas para producir envases de gaseosas, agua, aceite comestible. 

También se podrán recolectar, reciclar y  comercializar envases plásticos; de lavandina, champú, crema de enjuagues, detergentes líquidos; bolsitas de vegetales, pan lactal, papel higiénico, azúcar, arroz, bolsas boutique y de supermercados; baldes, palanganas, sillas y mesas de jardín, tapas de mayonesa, cajones, baldes de helado, picos y culotes de sifón.

A esto se le sumarán papeles de diario y otro tipo de papeles; envases de corrugado; tapitas de gaseosa;  embalaje de alimentos, flores, textiles, cigarrillos, cosméticos; bandejas de comida, sushi, caños de agua; poliestireno de alto impacto no expandido; platos y vasos descartables, hueveras plásticas, bandejas desechables utilizadas en alimentación.

En el caso de los metales, los recuperadores podrán quedarse con latitas y aerosoles de desodorantes, gaseosas, aerosoles en general.  Con productos hechos en base a hierro, que se funde en hornos especiales y se lo extrae de manera pura para ser reutilizado. En los centros verdes el hierro ingresa como metales de construcción, autopartes, electrodomésticos y similares, latas de conservas, aerosoles.

El servicio de recolección domiciliaria será prestado en todo el ámbito de la Ciudad pero las autoridades se reservan el derecho de excluirlo en ciertos lugares  cuyo volumen de generación de material potencialmente reciclable resulte susceptible de ser recolectado en campanas o contenedores verdes, o que por su volumen sea clasificado como un generador especial y se justifique su recolección directamente con el sistema de logística o camión.

En todos los casos y siempre según los pliegos, las cooperativas deberán respetar los horarios establecidos que podrán ser diurnos o nocturnos y que no podrán ser suspendidos por feriados o inclemencias climáticas, “procediendo a recolectar el material, evitando la caída de residuos en su recorrido y asegurando su operación en perfectas condiciones de higiene y de limpieza”.

También tendrán que recolectar residuos secos que se encuentren en la vía pública para ser dispuestos en bolsones y asignar a al personal polígonos de operación circunscriptos a la zona adjudicada.

“Se deberá considerar el rendimiento óptimo que maximice la productividad en función de la ruta y el turno en tanto que la cantidad de cuadras asignadas deberá determinarse en función de las características de cada zona y sector, teniendo en particular consideración el tipo de uso del suelo y la cantidad de habitantes”, detalla el pliego.

También obliga a las concesionarias a disponer los materiales recolectados dentro de un bolsón tipo “big bag”, que tendrá su identificación a través de un método o elemento a definir por las autoridades. 

Con respecto al transporte y traslado del material, al finalizar cada jornada de servicio, los bolsones serán recolectados por el servicio de logística de cada concesionario a través de vehículos provistos por el gobierno porteño conducidos por choferes de la concesionaria, además de dos operarios de logística que desarrollarán la tarea de ascenso y descenso de bolsones.

Los vehículos deberán ser fácilmente maniobrable y de poco porte, no podrán interferir, o hacerlo lo menos posible, con la circulación normal del tránsito, finalizado lo cual tendrán que dirigirse al Centro Verde para descargar el material.

Según el pliego, “la concesionaria deberá prever la metodología adecuada para evitar la saturación de las vías de tránsito con la presencia de camiones de recolección o transporte de personal”.

Tendrán además la obligación de proveer el servicio de recolección de los residuos secos reciclables recibidos en los puntos verdes que se encuentren dentro de su zona de prestación en espacios públicos y privados.

Estos centros serán administrados por las concesionarias según las zonas que les fuera adjudicada.