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Producción orgánica

Qué es Yerba Mate CAÁ, el modelo sustentable que apuesta a conservar la selva junto al sector yerbatero

Aves Argentinas, desde su Proyecto Bosque Atlántico, presenta la iniciativa para sumar al sector yerbatero al desafío de la conservación de las selvas y campos.

La industria argentina produce algo más de 300 millones de kilogramos de yerba mate elaborada, que se consumen en el país y se exportan fundamentalmente al Mercosur, Chile, Siria y otros países del hemisferio Norte.

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En tanto, el consumo de yerba mate alcanza los 6,4 kg/año/habitante, lo que supera en más de 7 veces al resto de las infusiones en nuestro país.

El consumo de yerba mate alcanza los 6,4 kg/año/habitante, lo que supera en más de 7 veces al resto de las infusiones en nuestro país.

Para promover la conservación de la selva junto al sector yerbatero, a partir de la creación de un Sello de Verificación, se puso en marcha Yerba Mate CAÁ (Cultivo Amigo de las Aves).

¿De qué se trata? La iniciativa identifica el producto comercial, buscando que se convierta en una herramienta de cambio y sume a la protección de uno de los ambientes más amenazados del planeta, como es el Bosque Atlántico. El proyecto cuenta con el apoyo de Aves Argentinas.

Más conservación de la yerba mate

“Querida Misiones, hermosa”, así titulaba desde su chacra en Santo Pipó el legendario Alberto Roth, las cartas que publicaba en el tradicional diario misionero, El Territorio. Pionero en la defensa de la selva, oriundo de Suiza, bregaba por las buenas prácticas agrícolas como la conservación del suelo, la yerba bajo monte y el rozado sin quemar”, rememora Andrés Bosso, a cargo del programa NEA de Aves Argentinas. Es desde esta centenaria organización que se intenta seguir su huella con acciones replicables que permitan conservar más y mejor las selvas y campos de la provincia de Misiones.

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La yerba mate o ka’a en idioma guaraní (Ilex paraguariensis) es una especie arbórea nativa que forma parte del dosel intermedio del Bosque Atlántico en la Argentina, Paraguay y Brasil. (Crédito: Aves Argentinas)

Con un equipo de trabajo en territorio, en alianza con instituciones públicas y privadas, Aves Argentinas se encuentra creando, fortaleciendo y restaurando áreas protegidas, activando proyectos con especies de aves amenazadas, produciendo información de calidad, capacitando recursos humanos y promoviendo el desarrollo de las comunidades donde trabaja. Todo ello, con el fin de conservar la biodiversidad con áreas protegidas, educación ambiental, y ordenamiento territorial, pero también desde las góndolas, a través de un consumo responsable. Allí apunta el proyecto Yerba CAÁ.

La yerba mate tradicional

La yerba mate es uno de los cultivos más “venerados” del país, y parte del folklore nacional argentino. “A diferencia de otros, no tuvo ni tiene detractores, salvo por las condiciones en que vivían los “mensúes” o mensualeros a principios del siglo XX”, comenta Bosso. “Además, tiene un altísimo impacto positivo en la economía local, con una superficie de unas 210 mil hectáreas en la zona productora (Misiones y Nordeste de Corrientes), coincidente con una de las regiones de mayor biodiversidad del país”, agrega.

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La yerba mate o ka’a en idioma guaraní (Ilex paraguariensis) es una especie arbórea nativa que forma parte del dosel intermedio del Bosque Atlántico en la Argentina, Paraguay y Brasil. Crece en estado silvestre, de sus manchones naturales se cosechaba originalmente. Forma parte del sotobosque o del estrato medio y puede alcanzar entre 8 y 15 metros de altura.

La yerba mate es uno de los cultivos más “venerados” del país, y parte del folklore nacional argentino. (Crédito: Aves Argentinas)

El titular del proyecto NEA de Aves Argentinas detalla que “sin embargo, en su cultivo industrial, igualmente debería mantener remanentes en fajas ecológicas y bosques protectores. Pero mayormente no ocurre y “hacemos que se comporte” como cualquier otro cultivo, con un poder de transformación total, aunque sea una especie nativa, lo que conlleva a la disminución de la cobertura vegetal natural. Perdemos selva, para siempre”. Igualmente, aclara que al tratarse de una especie nativa, brinda un escenario de posibilidades reales de convivencia con el ambiente de selva. “Un aliado para la conservación a nivel predial, con potencial para incidir a escala de paisaje. Y eso es lo que estamos explorando”.

Hacia la Yerba CAÁ: Cultivo Amigo de las Aves

Aves Argentinas promueve que este producto tan identitario de Misiones y norte de Corrientes, se convierta en una herramienta de cambio y sume a la protección de uno de los ambientes más amenazados del planeta: el Bosque Atlántico.

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Para esto se desarrolló un protocolo de producción y conservación, respaldado por un Sello de Verificación, que identifica el producto comercial. Esto está dirigido a productores primarios y empresas yerbateras de la provincia de Misiones y Corrientes que producen y comercializan yerba mate orgánica ya certificada o en proceso de serlo.

El protocolo, en la práctica, es sencillo: los productores y elaboradores que quieran contar con el Sello de Verificación CAÁ en sus paquetes, y la activa promoción asociada, deben garantizar la conservación de una superficie de selva en relación a sus hectáreas de cultivo orgánico. Esto es en una proporción de un mínimo de 2 hectáreas de selva x 1 hectárea de cultivo, en el caso de cultivos a cielo abierto, o de un mínimo de 1 hectárea de selva x 1 hectárea, en cultivos de yerba bajo monte. Esas hectáreas de selva son identificadas, mapeadas, relevadas y monitoreadas. Sobre ellas, algunos productores crean reservas naturales privadas.

Se realizó un protocolo de producción y conservación, respaldado por un Sello de Verificación, que identifica el producto comercial. (Crédito: Aves Argentinas)

Cómo es el Sello CAÁ

El Sello CAÁ cuenta con un protocolo armado y un plan de negocios presentado a productores orgánicos, cooperativas y empresas yerbateras, y ya hay varios convenios firmados.

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Gustavo Barutta de la consultora BSA para Aves Argentinas comenta que la intención es apoyar a los productores, pero al mismo tiempo, contagiar a los consumidores de yerba orgánica para ir un poco más allá y apuntar a que ese producto, además de desarrollarse en un marco de buenas prácticas agrícolas, ayude a conservar la selva misionera. “Estamos convencidos de que lo apreciarán y demandarán esa diferencia”, afirma.

De alguna manera Yerba CAÁ levanta la bandera de los “Bird Friendly” (Amigable con las Aves) que está en boga en varios países. El Lic. Sergio Tarnoski, también de BSA y para Aves Argentinas, afirma: “Según nuestra investigación de mercado, que incluye la exploración de certi­ficaciones orgánicas y otras como las de productos bird friendly como el café bajo sombra, ya instalados en países de consumo potencial de yerba mate CAÁ como Estados Unidos, Reino Unido o Alemania, el Premium Price de estos se ubica entre un 338% respecto a los cafés tradicionales y 162% respecto al café simplemente orgánico”.

Desde Aves Argentinas explicaron que se encargan de verificar y acreditar, con la entrega de documentación para el productor primario y empresas, las condiciones de incorporación del sello CAÁ en los envases de los productos. El proyecto abre las puertas a que puedan suscribirse tanto empresas elaboradoras de yerba mate orgánica -para su consumo tradicional u otros como mate cocido o bebidas-, como productores de la hoja verde y otros actores posteriores en la cadena de valor.

Existe en la actualidad un mercado potencial de 37 productores orgánicos, sobre un universo de 12 mil productores de yerba mate en la región. La adopción del Sello CAÁ por parte de marcas de yerba mate orgánica, apunta a aprovechar la tendencia global de una creciente demanda de alimentos saludables, que además sean producidos con el menor impacto -certificado- en los ecosistemas de origen.

“Nuestra intención es que se sume la mayor cantidad de productores a nuestro sistema de acreditación de servicios ambientales, porque será una forma de aumentar la cantidad de hectáreas de conservación, y que entre todos podamos escalar este modelo que, además de ofrecer una yerba más saludable, promueve de manera directa la protección de la biodiversidad. Ese es nuestro principal negocio”, afirma Andrés Bosso.

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Fecha de publicación: 01/09, 2:22 pm