La desorbitante cifra de cargadores que necesita Europa para abastecer a los autos eléctricos
Para el 2035, las autoridades locales prevén que circularán más de 130 millones de vehículos eléctricos.
Europa tiene un plan para fomentar la electromovilidad y en la actualidad ya 3,3 millones de autos son eléctricos, mientras que para el 2035 se estima que serán 130 millones.
//Mirá también: Un gigante automotriz instalará 18 mil estaciones de recarga rápida en Europa
Este gran número de vehículos circulan por el continente europeo requiere si o si de fuente de recarga de energía. Si bien ya existen iniciativas como la del grupo Volkswagen que anunció meses atrás que va a dejar de vender autos con motor a combustión en 2035 en el viejo conteniente, nada supera al plan ambicioso de Tesla.
¿Cuántos cargadores eléctricos necesitará Europa para afrontar la demanda de autos eléctricos? Más de 65 millones adicionales a los que ya están instaldaos.
El dato surge de un informe de EY y Eurelectric. De ese total 65 millones de cargadores, se dividen en 9 millones de puntos públicos y 56 millones ubicados en entornos residenciales. En la actualidad, se calcula que en Europa hay 3,3 millones de autos eléctricos, mientras que para el 2035 se estima que serán 130 millones.
2035, la fecha clave
El plan europeo implica que para el 2035 se fabrique ningún vehículo a combustión, esto incluye los motores de gasolina, diésel, gas e incluso los híbridos.
//Mirá también: Una marca china sacará un legendario auto deportivo descapotable y eléctrico: ¿Le gana al Tesla Roadster?
Durante el 2021 un poco más del 10% de las ventas fueron protagonizadas por autos 100% eléctricos completamente eléctricos.
En tanto, en la actualidad, el continente cuenta con 374.000 puntos de recarga públicos de los cuales dos tercios de ese total se concentran en tan sólo cinco países: Países Bajos, Francia, Alemania, Italia y Reino Unido. El resto no cuentan aún con un cargador por cada 100 kilómetros de autopistas y rutas de la Unión Europea.
Según la agencia de noticias Reuters, para dar a basto con la demanda y las necesidades del propio mercado automotriz, Europa debería instalar medio millón de puntos de recarga públicos de forma anual hasta el 2030 y luego incrementar esa cifra hasta 1 millón de puestos.
ristian Ruby, secretario general de Eurelectric, aseguró en una entrevista recienta “que la construcción de infraestructura de carga pública hoy enfrenta retos masivos, debido principalmente a problemas de planificación y permisos”.
Por buen camino
Según la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), los automóviles que funcionan a partir de energías renovables, incluyendo a eléctricos, híbridos e híbridos recargables, representaron en 2021 más de un tercio de los 0 kilómetro comercializados en Europa, al alcanzar un 37,6% del total de las ventas.
//Mirá también: ¿Tenés un auto eléctrico? ChargeBox Net inauguró un corredor con puntos de carga para ir de Capital a la Costa
El año pasado, las ventas de autos eléctricos crecieron 63,1% en la Unión Europea, lo cual representó una ampliación hasta el 9,1% del mercado, contra 1,9% en 2019 y 5,4% en 2020.
¿Qué impulsó la venta? Una mezcla de aumento de la oferta por parte de los fabricantes y los subsidios públicos para la compra destinados hacia los consumidores, que totalizaron 878.432 vehículos, con países como Suecia, Irlanda o Italia duplicando las cifras. No obstante, los autos de combustión, incluyendo a los diésel y nafteros, aún representan 59,6% de los nuevos patentamientos.
Quien contamina, paga
Para avanzar con el plan de electromovilidad, la Unión Europea fue realizando una serie de acciones como revisar las normas de tarificación vial, conocida como Euroviñeta. Así, el sistema incluye el principio de que paga quien usa las infraestructuras viales y quién contamina.
//Mirá también: Un nuevo avión -sin piloto- consume la mitad de combustible y transporta más carga
El acuerdo busca abordar las emisiones de gases de efecto invernadero y otros impactos ambientales, la congestión y la financiación de la infraestructura vial.
“Este acuerdo sobre la tarificación de las carreteras, con reglas más estrictas y más amplias y un nuevo esquema para abordar las emisiones de CO2, es un elemento crucial para descarbonizar el transporte y cumplir los objetivos climáticos en línea con el Pacto Verde Europeo y el Acuerdo de París”, afirmó en un comunicado.