Científicos hallaron una bola metálica en el centro de la Tierra, ¿cuál es su significado?
Si bien se pensaba que existían solo cuatro capas que formaban el planeta, los expertos llegaron a la conclusión de que hay todavía una capa más interna.
Dos científicos australianos hicieron un descubrimiento sorprendente que dejó perplejos a muchos: en el núcleo de la Tierra yace una esfera metálica. Este hallazgo desafía la comprensión previa de la estructura terrestre, que consideraba cuatro capas distintas: la corteza, el manto, el núcleo externo y el núcleo interno.
Los dos sismólogos detrás de este descubrimiento son Thanh-Son Phạm y Hrvoje Tkalčić, de la Universidad Nacional de Australia. Su estudio, publicado en Nature Communications, revela la presencia de un “núcleo interno más interno”, una esfera metálica en el corazón de nuestro planeta.
Utilizando el estudio de terremotos y el análisis de sus ondas sísmicas, los investigadores notaron una peculiar reverberación en la Tierra, medida por el tiempo que tardan en viajar a través del globo. Esta observación sugiere que cada capa tiene una densidad diferente, desafiando nuestras concepciones anteriores.
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Los comentarios de los investigadores
Pham dialogó con el Washington Post y dijo: “Claramente, el núcleo interno más interno tiene algo diferente de la capa externa. Creemos que la forma en que están empaquetados los átomos en estas dos regiones es ligeramente diferente. El gran avance de este estudio es que encontramos una nueva forma de tomar muestras del centro mismo del núcleo interno de la Tierra”.
Por otra parte, en el medio The Conversation detallaron más sobre su descubrimiento. “Comprender la historia evolutiva del núcleo interno de nuestro planeta y su conexión con el campo geomagnético es relevante para comprender la línea de tiempo de la evolución de la vida en la superficie de la Tierra. La diferencia de potencial entre la bola metálica más interna y la capa exterior del núcleo interno no está en su composición química, como ocurre con otras capas de la Tierra”, indicaron.
También añadieron: “Es probable que ambos estén hechos de una aleación de hierro y níquel con pequeñas cantidades de elementos químicos más ligeros. Además, la transición de la bola más interna a la capa exterior del núcleo interno parece más gradual que brusca. Por eso, no podemos observarla a través de los reflejos directos de las ondas sísmicas. Esto difiere de estudios anteriores que documentan límites definidos entre las otras capas dentro de la Tierra, desde la corteza hasta el manto, por ejemplo”.
