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Alarmante: el 40% de los alimentos producidos en el mundo termina en la basura

Así lo advirtió un informe del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). La pandemia, ¿acrecentó la problemática?

Un 40% de los alimentos producidos para la población global no son consumidos sino que terminan en la basura.

Así lo determinó un informe del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y la cadena de supermercados Tesco. En total, 2.500 millones de toneladas de alimentos son desperdiciados cada año en el planeta.

La producción de comida utiliza grandes cantidades de tierra, agua y energía, lo que provoca una contribución a los gases de efecto invernadero equivalente a casi el doble de las emisiones anuales de todos los automóviles en EEUU y Europa, subraya en el informe.

En total, el estudio estima que cada año se desperdician 2.500 millones de toneladas de alimentos, de los que 1.200 millones se pierden ya en el campo y más de 900 millones en los establecimientos de venta o en los domicilios.

“Este informe muestra que el problema es probablemente más grande de lo que nos imaginábamos”, sostuvo a la agencia de noticias EFE, Pete Pearson, jefe de la Iniciativa mundial sobre pérdida y desperdicio de alimentos de WWF. Previamente, la organización ambientalista había estimado que la pérdida de alimentos era de aproximadamente la mitad (1.300 millones de toneladas).

En total, 2.500 millones de toneladas de alimentos son desperdiciados cada año en el planeta.

¿Qué pasó con la pandemia?

Según Pearson, la pandemia empeoró la tendencia ya que causó “interrupciones masivas en las cadenas de suministro, forzando cancelaciones de contratos, cierres de restaurantes y dejando grandes cantidades de alimentos perecederos desperdiciados o dejados en las granjas que luego fueron inservibles”.

Unos 4,4 millones de kilómetros cuadrados de terreno y 760 kilómetros cúbicos de agua se utilizan para producir los 1.200 millones de toneladas de comida que se desperdician en el campo, antes, durante y después de la cosecha, o se desvían a otros usos como la alimentación animal o los biocombustibles.

El informe confirmó que los países de ingresos altos y medios de Europa, América del Norte y Asia industrializada contribuyen con el 58% de las pérdidas en las cosechas mundiales, a pesar de tener una mayor mecanización y mejores sistemas en las granjas.

Pese a que en el medio agrícola es donde se concentran las cifras más altas de desperdicio de comida, las políticas de los gobiernos se concentran más en la última cadena de suministro, la venta y el consumo, criticó el informe, que intenta centrar la atención en la gravedad del problema en vendedores y consumidores.

El informe concluyó que para lograr una reducción significativa, los gobiernos nacionales y los mercados deben tomar medidas para apoyar a los agricultores de todo el mundo y comprometerse a reducir a la mitad el desperdicio de alimentos en todas las etapas de la cadena de suministro.

Fecha de publicación: 26/07, 4:00 pm