Las empresas deben darle importancia al cambio climático y las innovaciones tecnológicas son la clave
Por Jon Chorley, Jefe de Sustentabilidad de Oracle.
Cuando se publicó el informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU a mediados de 2021, el mensaje fue claro: el cambio climático causado por el hombre debido a la acumulación de contaminación por gases de efecto invernadero en la atmósfera global se está acelerando y todavía no estamos avanzando lo suficiente para detenerlo. Si bien nada es esencialmente nuevo en todo esto, la claridad del mensaje fue una llamada de atención para muchos y, con suerte, otro paso en la construcción de consenso para abordar este tema crítico.
Lo que es nuevo en este informe es la capacidad mejorada de los científicos para atribuir la frecuencia y gravedad de los eventos relacionados con el clima a la tendencia subyacente del cambio climático. Esta capacidad mejorada para conectar los puntos de sequías, incendios forestales, inundaciones o tormentas severas con las actividades humanas que alimentan el cambio climático tiene el potencial de convertir lo que para muchos es un problema abstracto y remoto en algo con un impacto personal y una preocupación más inmediata.
La base de nuestro mundo moderno es que cada uno de nosotros tiene a nuestra disposición el equivalente energético a unas 600 personas; energía que impulsa las máquinas que usamos para mejorar nuestras vidas. Desde hace más de 250 años, la mayor parte de esa energía ha provenido de combustibles fósiles. Aunque nos ha funcionado bien, ahora vence la factura que viene en forma de emisiones de carbono y el cambio climático que desencadena.
Nuestra economía basada en combustibles fósiles es parte de un problema más amplio: dependemos de un sistema económico que no es sostenible. Con demasiada frecuencia, los procesos o modelos comerciales se basan en recursos que probablemente se agoten o en operaciones que causan daños difíciles de mitigar, y esa mitigación no se incluye en el modelo o proceso comercial.
//Mirá también: Cambio climático: qué es la COP27 y dónde se llevará a cabo el evento mundial
A medida que nos enfocamos en abordar el cambio climático, también debemos considerar mover todos los procesos hacia modelos más sostenibles. Cambiar un sistema que ha funcionado tan bien durante tanto tiempo para tantos no será fácil y no habrá una sola respuesta. Requerirá un cambio de comportamiento, un cambio de políticas y regulaciones, un cambio de modelo de negocio y un cambio tecnológico, todos trabajando juntos para crear un enfoque nuevo y menos dañino para el medio ambiente.
En la actualidad, algunos gobiernos y la mayoría de las empresas están desarrollando nuevas políticas y cambios para abordar la sostenibilidad y el cambio climático, como establecer objetivos para la transición a la energía renovable y la eliminación de las emisiones netas de carbono de sus operaciones e incluso el uso de sus productos y servicios. Estos objetivos a menudo se describen como “objetivos basados en la ciencia”, lo que significa que son las reducciones necesarias para limitar los aumentos de la temperatura global a 1,5 ° C.
Empresas grandes y pequeñas, están respondiendo a los desafíos y los ven como oportunidades para aplicar tecnologías innovadoras, incluida la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, para medir y administrar operaciones a niveles nunca antes posibles.
La tecnología y las operaciones sostenibles
En varias partes del mundo hay empresas que vienen trabajando en pos de contribuir con el medioambiente. Como por ejemplo es el caso de Circulor, una compañía de software nativa de la ciudad de Londres que utiliza tecnologías blockchain, IA e IoT para proporcionar visibilidad en cadenas de suministro, ayudando a que las empresas puedan obtener materiales de manera responsable, mejorar su desempeño ambiental, social y de gobernanza, reducir las emisiones y gestionar los riesgos de la cadena de suministro.
En los Estados Unidos, los edificios residenciales utilizan más del 20% de la energía total consumida. National Grid, una empresa de servicios públicos de gas y electricidad multinacional británica con sede en Londres, proporciona energía a más de 20 millones de clientes en el país y está trabajando para reducir la demanda de energía de los consumidores como parte de su objetivo de lograr emisiones netas cero para 2050. Con ese fin, utilizan Oracle Utilities Opower para proporcionar a sus clientes formas personalizadas de reducir el consumo de energía que se basan en la ciencia del comportamiento avanzada y las tecnologías de inteligencia artificial.
En el frente agrícola, investigaciones recientes han encontrado una forma potencial de reducir las emisiones de metano que es decididamente de baja tecnología. Investigadores de la Universidad de California en Davis, descubrieron que agregar algas marinas a la dieta del ganado redujo la liberación de metano de las vacas hasta en un 82 por ciento. Quizás en el futuro, las imágenes satelitales de las granjas de ganado podrían mostrar una imagen mucho mejor de las emisiones.
Una llamada de atención para todos
Independientemente de la industria, está claro que el cambio climático simplemente no puede hacerse pasar por un problema de otra compañía o sector. Afectará a todas las empresas en diversos frentes: sus clientes, sus empleados, sus proveedores, sus fábricas y sus instalaciones.
Para algunos, el riesgo será existencial: quebrarán si no cambian fundamentalmente. Pero creo que para la mayoría las innovaciones tecnológicas, como las anteriores, les ayudarán a mejorar sus operaciones.
