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En Hawái

El increíble descubrimiento de la NASA: capturó un enorme lago dentro de un volcán

La Agencia Espacial mostró imágenes fascinantes de un fenómeno natural extraordinario. Los detalles.

La Agencia Espacial NASA reveló imágenes fascinantes de un fenómeno natural extraordinario: la formación de un vasto lago dentro del cráter del volcán Kilauea, ubicado en la Isla Grande de Hawái en el Pacífico Norte. Este fenómeno comenzó a desarrollarse en julio de 2019 y desde entonces ha crecido de manera constante, asombrando a científicos y al público por igual.

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Las imágenes satelitales capturadas por la NASA en 2020 muestran claramente la evolución del Halema’uma’u, el cráter que fue testigo de esta impresionante transformación. Antes de la formación del lago, el cráter albergaba un lago de lava que se drenó por completo tras un colapso parcial del piso de la caldera. Posteriormente, el agua comenzó a acumularse en su lugar, creando un lago de dimensiones extraordinarias.

Las imágenes satelitales capturadas por la NASA en 2020 muestran claramente la evolución del Halema’uma’u,

Este nuevo lago dentro del Kilauea tiene aproximadamente las dimensiones de cinco canchas de fútbol juntas y alcanza una profundidad de unos 30 metros. Su coloración marrón oxidado se debe a complejas reacciones químicas inducidas por la actividad volcánica y los materiales circundantes.

Cómo surgió el lago en el volcán

El fenómeno se originó tras una serie de eventos sísmicos y erupciones que afectaron el volcán en los últimos años. En palabras de Don Swanson, vulcanólogo del Observatorio del Volcán Hawaiano, “Sabemos que el piso del cráter cayó un poco más de 70 metros debajo de la capa freática en 2018. Cada vez que perforas un agujero por debajo del nivel de la capa freática, el agua eventualmente entrará y llenará ese agujero”, explicó.

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El fenómeno se originó tras una serie de eventos sísmicos y erupciones que afectaron el volcán en los últimos años.

Además del descubrimiento del lago, investigaciones recientes han revelado que las erupciones del Kilauea inyectaron enormes cantidades de lava fundida en las aguas cercanas, estimulando el crecimiento de fitoplancton. Este aumento en los nutrientes desencadenó una explosión de vida marina, incluyendo microbios detectables por satélite en las aguas circundantes.

Un estudio publicado en la revista Science reveló que la columna verde de fitoplancton alrededor del volcán contenía una combinación óptima de nutrientes, como nitrato, ácido silícico, hierro y fosfato, promoviendo el desarrollo de la vida en un entorno volcánico único.

Estos descubrimientos demuestran la capacidad única de la naturaleza para adaptarse y florecer incluso en entornos extremos como los generados por la actividad volcánica. La NASA continuará monitoreando de cerca este fenómeno para comprender mejor su evolución y sus posibles implicaciones científicas y ambientales.

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Fecha de publicación: 06/05, 4:56 pm