Quiere ser “verde”: Naranja revela los detalles de su estrategia sustentable

“En Naranja, generamos diferentes acciones transversales que nos permiten tener una gestión cada vez más sustentable de nuestro negocio. Estas acciones nos permiten crear valor económico, social y ambiental para todos nuestros públicos de interés y las generaciones futuras”, asegura Romina Ruffino, gerente de comunicación interna y cultura de Naranja, en diálogo con Economía Sustentable.

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La compañía, ya consolidada dentro de la industria financiera local y con una fuerte estrategia en potenciar su solución fintech, Naranja X, delineó  una completa estrategia que responde a convertirse en una empresa amigable con el medioambiente.

“Pensamos la gestión sustentable de nuestro negocio como un proceso permanente que requiere adaptaciones e innovaciones. Para esto, garantizamos espacios de conversación frecuentes tanto a nivel interno como con nuestros grupos de interés, con la finalidad de identificar sinergias y oportunidades de mejora”, agrega la responsable.

A nivel económico, la compañía invirtió más de $1 millón en gastos ambientales en 2019. Esto representó un incremento del 266% respecto al 2018, y se corresponde a la implementación de nuevas acciones, entre ellas las relacionadas a medición, mitigación y compensación de Huella de Carbono Institucional. Mientras que, para este año, presupuestaron un incremento del 25% respecto al año anterior. 

Así, la firma en un constante proceso de diseñar e impulsar programas específicos y espacios de capacitación para múltiples áreas, que permita sumar y fortalecer criterios de sustentabilidad en sus productos, servicios y operaciones. 

“Además, como compañía, entendemos al medio ambiente como parte del entorno de las personas, por eso constantemente buscamos garantizar la mayor eficiencia en el uso de los recursos naturales e implementar prácticas que nos permitan reducir nuestro impacto ambiental”.

Menos basura, más negocio

Recientemente, -y por séptimo año consecutivo-, la empresa publicó su reporte de sustentabilidad, con los resultados más destacados de su gestión sustentable. 

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Dentro de su estrategia se abarcan la gestión de residuos, la medición de su impacto ambiental, eficiencia energética, además del trabajo con proveedores locales y de triple impacto. 

Para el primer punto, realizaron un diagnóstico a nivel nacional, -tanto en los edificios corporativos como en más de 200 sucursales-, que permitió relevar información para identificar oportunidades de mejora y diseñar un plan nacional de gestión de residuos.

 “Este plan, está siendo trabajado por un equipo interdisciplinario y desde una perspectiva de economía circular que nos permita, por un lado, reducir la cantidad de residuos que generamos y, por el otro, la correcta disposición de aquellos que no podemos evitar”, completa Ruffino.

Con respecto a los materiales indican que el plástico para las tarjetas de crédito, papel, cartuchos de tóner y equipamiento informático (computadores e impresoras) configuran la principal preocupación en cuanto al cuidado y reducción de consumo de materiales. 

En este punto, para reducir el consumo algunas de las acciones que realizan son:

• Tóner en reducción: consumir menos tóner impacta en el gasto de hojas en todas las casas del país.
• Disminución del gramaje: utilizar hojas de menor gramaje significa un ahorro de 1.425 kg de papel.
• Todo digital: toda la documentación que se firma cuando ingresa un nuevo colaborador es electrónica.

Además, junto con ONGS y cooperativas, trabajan para reciclar la mayor cantidad de residuos posibles, tales como plástico de las tarjeas, tóner, tapitas, papel y film.  

Vinculado a la huella ambiental, la responsable de Naranja destaca que el mayor impacto se encuentra en el consumo de energía eléctrica, representando el 55% de su huella de carbono. 

En ese camino, este año, comenzaron un proceso de contratación de proveedores para que puedan incrementar anualmente el porcentaje de energías renovables. Asimismo, desde 2018 realizan acciones para la protección de bosques y biodiversidad como también de sensibilización, con el objetivo de compensar el impacto ambiental.

“La conservación de bosques es la principal estrategia que utilizamos para compensar nuestra huella de carbono. Entre 2018 y 2019, llevamos conservados 16.167 m2 de bosques nacionales” subraya.

Para lograrlo, en 2019, realizaron dos jornadas de plantación de 300 especies nativas, además del dictado de talleres de concientización sobre la importancia la conservación de bosques. 

“Sin embargo, las nuevas acciones transversales que estamos diseñando, contemplan presupuestos de nuevas gerencias que anteriormente no teníamos en cuenta”, advierte. De esta manera el incremento de este año terminará siendo mayor respecto al de 2019, e involucrará a toda la compañía. 

Compromiso 360

Con respecto al trabajo con proveedores, desde la empresa buscan fomentan el desarrollo de proveedores locales, la generación de negocios inclusivos y la comercialización de productos de triple impacto. 

“Siempre que sea posible, incentivamos la incorporación de bienes y servicios con valor social y/o ambiental, tanto para obsequiar a nuestros colaboradores como para acciones de branding y eventos”.  

En este eje, invirtieron más de $11 millones en compras a 19 proveedores sustentables. Además, el 98% de los gastos en proveedores anuales estuvieron destinados a proveedores de Argentina, aportando como compañía a la economía local. 

Por otro lado, sumaron casi 900 nuevos proveedores nacionales a los más de 4.500 activos, contando con al menos 40 proveedores por cada provincia, en su mayoría PyMEs.

“Actualmente estamos trabajando en definir nuevos criterios que nos permitan clasificar a todos nuestros proveedores en diferentes escalas de impacto. Nuestra nómina de proveedores sustentables se encuentra abierta para que cualquier empresa interesada pueda acceder a sus contactos”, agrega.

“Para 2020 planificamos trabajar en lo referido a la reducción de nuestro impacto ambiental, como también en el rediseño de los programas de vinculación con la comunidad. Sin duda, el contexto actual requirió modificar las metodologías de trabajo y cronogramas de acciones”, finaliza la vocera.

En paralelo, también sumaron un nuevo foco vinculado al fortalecimiento de la economía local y al acompañamiento de proveedores y comercios, principalmente PYMEs. Para estos públicos, desplegaron una serie de beneficios y formaciones vinculadas a los desafíos del contexto pandemia.