Coca-Cola buscará convertir el CO2 en azúcar y contribuir con el medioambiente
El embotellador remarcó que el objetivo es que tras la fase de investigación en laboratorio pueda desarrollarse un proyecto piloto.
Coca-Cola Europacific Partners (CCEP) se embarcó en un proyecto que de lograrlo será muy importante el impacto que tendrá en el medioambiente: buscará transformar el CO2 en azúcar, y así podrá eliminarlo de la atmósfera y reutilizarlo, informó un comunicado de la compañía.
En concreto, CCEP Ventures, la plataforma de inversión en innovación de CCEP, se unió a Peidong Yang Research Group, que trabaja en la Universidad de California, en Berkeley, para desarrollar métodos que permitan convertir a nivel industrial el CO2 en azúcar.
El embotellador remarcó que el objetivo es que tras la fase de investigación en laboratorio pueda desarrollarse un proyecto piloto. La inversión inicial en este programa será de 750.000 dólares.
La compañía anticipó que el plan de dicha tecnología es permitir reducir algunos de los factores que más contribuyen al CO2 en las cadenas de suministro, al tiempo que ahorrar costos de materiales, transporte y logística. Además, los consumidores podrán disfrutar del consumo de la bebida, sin aumentar los residuos y las emisiones.
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“En CCEP, queremos crecer de manera sostenible, produciendo las bebidas que desea la gente, mientras ayudamos a construir un futuro mejor para nuestro negocio, las comunidades y el planeta”, comenta el director de CCEP Ventures, Craig Twyford.
Y agrega: “CCEP Ventures nos ayuda a encontrar soluciones para los desafíos a los que se enfrenta la industria y proporciona fondos para hacer realidad estas tecnologías fundamentales. Estamos entusiasmados de participar en este Proyecto que podría liderar a la industria en el desarrollo de una tecnología de transformación capaz de convertir el CO2 en bienes utilizables más complejos”.
De esta forma, esta tecnología se trata de que, a través de una captura de aire directa y eficiente, el CO2 pueda emplearse para carbonatar las bebidas, generar combustible y envasar, además de para convertirlo en azúcar de una manera más sostenible.
El embotellador precisó que, “esto no hará que Coca-Cola renuncie a sus compromisos, por lo que seguirá reduciendo la cantidad de azúcar en sus bebidas”.
Actualmente, la compañía está inmersa en un plan trienal -anunciado en 2020- en el que tiene previsto invertir 250 millones de euros para descarbonizar su negocio, lo que incluye la fabricación de envases sostenibles.