Un fenómeno astronómico de extrema rareza sorprendió a la comunidad científica: por segunda vez en la historia moderna se hicieron visibles dos novas sin necesidad de telescopios. Se trata de V462 Lupi y V572 Velorum, ambas ubicadas en el hemisferio sur. Para quienes estén en el hemisferio Sur, aún se pueden ver las dos novas en el cielo Dos novas al mismo tiempo La nova V462 Lupi fue detectada el pasado 12 de junio y alcanzó su máximo brillo el día 21. Aunque su resplandor comenzó a disminuir, todavía puede verse a simple vista bajo cielos despejados y oscuros. Pocos días después, la nova V572 Velorum también se iluminó, alcanzando una magnitud de 4,8 el 27 de junio, lo que la volvió visible en zonas alejadas de la contaminación lumínica. Ambas estrellas se encuentran en latitudes australes, con declinaciones de –40° y –53°, por lo que su observación está limitada a regiones del hemisferio sur. Actualmente, sus magnitudes rondan el umbral de visibilidad humana (cerca de 6,0), por lo que es necesario contar con buena vista y condiciones óptimas para apreciarlas sin instrumentos. El portal especializado Spaceweather.com calificó el evento como “extremadamente raro”. Según el astrónomo Stephen O’Meara, inicialmente no existían registros de algo similar, aunque luego recordó un caso en 2018, con características parecidas pero de menor duración y brillo. El poder oculto de las novas A pesar de su nombre, una nova no es una estrella nueva, sino el resultado de una explosión nuclear en la superficie de una enana blanca. Este tipo de estrella colapsada acumula material de una compañera cercana y, al alcanzar la presión y temperatura críticas, se desencadena una fusión que libera enormes cantidades de energía, iluminando su entorno por semanas. Uno de los detalles que los observadores pueden notar es el cambio de color de ambas novas: inicialmente azulado, se va tornando rojizo a medida que se enfrían tras la explosión. Este sutil fenómeno será visible durante los próximos días. Lamentablemente para los habitantes del hemisferio norte, la posibilidad de observar dos novas simultáneamente sin equipo especializado es un privilegio exclusivo del sur del planeta. Ambas se encuentran cerca de los extremos de la Cruz del Sur, una de las constelaciones más emblemáticas para los astrónomos aficionados de esa región.
