Lo presentaron, anduvo dos horas y chocó: ¿qué pasó con el colectivo “inteligente”?
En el día de su presentación, el vehículo que no pasa de los 20 kilómetros por hora, frenó y la conductora que iba atrás impactó con el colectivo autónomo.
Luego de su presentación al mundo, el primer autobús público sin conductor de España sufrió ayer, el mismo día de su lanzamiento, un pequeño percance cuando apenas llevaba dos horas circulando por las calles del campus de la Universidad Autónoma de Madrid.
En el día de su presentación a la prensa, el vehículo, que no pasa de los 20 kilómetros por hora, ha frenado, y la conductora del coche que iba detrás no ha podido maniobrar a tiempo para evitar el impacto contra él.
Un susto
No obstante, todo quedó en un simple susto. “Ni la conductora del coche ni nadie del autobús han resultado lastimados, y solo una pequeña muesca en el parachoques trasero del autobús ha quedado del pequeño percance”, explicó a Efe fuentes del Consorcio Regional de Transportes.
Tras comprobar el asistente a la conducción que viajaba en el autobús que no había lesionados y que el vehículo estaba bien, el autobús ha seguido prestando servicio sin más contratiempos.
Es cien por cien eléctrico y circula a 20 kilómetros por hora, por el momento con un asistente a la conducción, pero con la previsión de que en unos meses pueda recorrer de manera totalmente autónoma los 3,7 kilómetros del itinerario circular que une la estación de Cercanías de Cantoblanco con distintas instalaciones del campus.
Durante los meses de enero y febrero, este modelo, el EZ10, funcionó a modo de prueba en el campus universitario, donde la velocidad está limitada a 30 km/h.
Aunque el fin último del proyecto es la investigación de esta nueva forma de movilidad, las 12 plazas del autobús sin conductor, reducidas a siete por la limitación de aforos debido a la pandemia, están disponibles de 7.45 de la mañana a cuatro de la tarde.
No obstante, la lluvia de este martes en Madrid y el hecho de que las clases sean semipresenciales han hecho que el estreno del autobús se haya hecho con un campus bastante vacío de alumnos.
Una “maravilla tecnológica”
“El funcionamiento parece muy complejo, pero es muy sencillo: inicialmente hemos mapeado todo el circuito, por lo que el vehículo tiene identificada toda la geografía del recorrido, para circular por la vía por la que tiene que ir”, explica Miguel Ángel Alonso, director general de Mantenimiento e Ingeniería de Alsa, operadora del autobús.
Con “la última tecnología en el mercado para la conducción autónoma, sistemas GPS, sensores de todos los alcances posibles, sensores de movimiento y una computadora interna basada en la inteligencia artificial que utiliza algoritmos de ‘deep learning’ para poder saber en cualquier momento lo que tiene que hacer”, por lo que el EZ10 es “una maravilla de la tecnología” según Soledad Pérez Galdós, coordinadora de Infraestructuras e Innovación del Consorcio Regional de Transportes.
En los próximos meses operará en un nivel de autonomía 4, con la asistencia de un conductor de Alsa en su interior para devolverlo a la posición de circulación si algún obstáculo dificulta su camino y para “identificar las condiciones del entorno más ideales para en un futuro dejarlo en un funcionamiento de nivel 5”, de completa autonomía, indica el director general de Mantenimiento e Ingeniería de Alsa.
En comparación con un vehículo con conductor, ese colectivo “se anticipa mucho” a los obstáculos de la vía gracias a los lídar y radares que lleva acoplados, lo que permite “que la circulación sea totalmente homogénea y tranquila durante todo el recorrido”, apunta Alonso.
Modelos como el de la Universidad Autónoma podrían ser de aplicación en un futuro en otras universidades, en hospitales, en servicios de movilidad de última milla o en cascos históricos en los que no está recomendado que haya muchos vehículos, en los que se puede habilitar para hacer los trayectos más habituales de los turistas, señala Pérez Galdós según una nota del sitio El Confidencial.