Qué pueden hacer las personas para mitigar el cambio climático, según el IPCC
Un informe publicado por el IPCC estructuró algunas medidas que pueden realizar los consumidores y se enfoca en “evitar-cambiar-mejorar”.
Hace pocos meses se presentó la tercera y última parte del Sexto Informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU.
En informes previos, se planteaban medidas tecnológicamente más accesibles y recortes más progresivos. Sin embargo, ahora la urgencia exige limitar el calentamiento global a 1,5 ℃ y esto hace que los expertos planteen la necesidad de intervenir con políticas ya. Además, una novedad es que se incorpora un análisis sobre las decisiones que tomas las personas como consumidores.
En este sentido, el informe enumera algunas medidas siguiendo el enfoque “evitar-cambiar-mejorar”, que originalmente se aplicó al transporte sostenible, pero que ahora se emplea de forma más general al comportamiento de los consumidores.
El panel de expertos estima que se podría alcanzar un 5% de mejoras de forma muy rápida solo con cambios en nuestros hábitos (principalmente en los países desarrollados). Además, las medidas también se centran en el uso de infraestructuras y la adopción de nuevas tecnologías que permitan dichas modificaciones.
Entre los cambios de comportamiento, en la categoría “evitar”, encontramos la no utilización del coche y la reducción de un vuelo de larga distancia al año como los dos elementos con mayor potencial mitigador a nivel individual, seguidos a distancia por el aumento del trabajo remoto, un menor uso y mayor reciclaje de envases y la reducción del desperdicio alimentario.
//Mirá también: Turismo sostenible: dónde viajamos y cómo pagamos en la Argentina
Como “cambios”, se incluyen un mayor uso del transporte público, la reducción del consumo de carne, una mayor movilidad activa (bicicleta y caminar) y la sustitución del avión, cuando sea posible, por el tren.
Dentro de las “mejoras”, las medidas estrella son el vehículo eléctrico movido cada vez más por energías renovables, que también deberían proporcionar la electricidad de nuestros hogares, y las mejoras en el aislamiento y formas de calentar nuestros hogares.
Por ejemplo, en términos individuales, cambiar el auto por uno eléctrico (o aún mejor, caminar y usar la bicicleta), podría reducir 2 toneladas de CO2 equivalente al año por persona.
//Mirá también: En imágenes: estas casas son sustentables y permiten hacer turismo más eco-friendly
En total, podría llegarse a un ahorro de 9 toneladas de CO2 equivalente con las medidas indicadas. Pero esto sería para consumidores con alto gasto en países desarrollados.
Para la población mundial en su conjunto, la medida más relevante sería el cambio en la dieta, puesto que la mayoría no vuela, su gasto es muy reducido y sus emisiones están muy por debajo de la media mundial de 7,8 toneladas.