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Francia puso en la agenda política de Europa la soberanía alimentaria: se abren dudas para los países agroexportadores

Francia tiene planes de restringir importaciones de alimentos a Europa si provinenen de países con reglas más laxas que las impuestas por la Unión Europea. Sobre todo, en lo relacionado al trabajo infantil, la deforestación y el uso de productos químicos.

Cualquiera de estos temas, son dramas sociales relacionados con países subdesarrollados a los que se les suben los estándares para impedir, de alguna manera, que puedan entrar sus commodities.

El presidente Macron lidera una cruzada en defensa del sector agrícola de su país en vistas a que París asuma la presidencia del Consejo de la Unión Europea, en 2022. Y de su propia aspiración a seguir en el poder.

Europa apunta a una transición verde y Francia se enfrenta elecciones el año que viene, y todo suma. Por eso, Macron argumenta que es esencial nivelar los requerimientos del comercio para garantizar que los alimentos de Europa no se vean afectados por importaciones baratas producidas con estándares de calidad más bajos.

Esto podría significar un enfrentamiento en la Organización Mundial del Comercio (OMC), donde los grandes países exportadores de productos agrícolas impugnen la legalidad del esquema que pretende Francia.

No podemos pedir a nuestros agricultores que hagan más esfuerzos y, al día siguiente, que importen productos provenientes de regiones que no siguen las mismas reglas”, dijo Macron en el “Gran Encuentro de la Soberanía Alimentaria”, un megaevento realizado la semana pasada.

De esta manera, puso en la agenda política una estrategia para la soberanía alimentaria.

Francia pide elevar los estándares a los países exportadores para comercializar e Europa

La reforma de la política agrícola

Macron busca complacer al golpeado sector agrícola de su país antes de presentarse a su reelección el año próximo. Su plan se centra en que si Europa cumple con ciertos estándares, éstos deberían reflejarse en los socios comerciales.

Las estrategias europea “de la granja a la mesa” y Green Deal para sistemas alimentarios más ecológicos significan que los agricultores de todo el continente tengan una reducción del 50 por ciento en el riesgo y el uso de pesticidas. Y otras medidas como el bienestar de los animales o el medio ambiente.

Las ambiciones de Francia en la soberanía alimentaria se producen cuando el Parlamento Europeo tiene tensas negociaciones para garantizar que la reforma de la Política Agrícola Común.

El plan de subvenciones agrícolas de la UE por 270.000 millones de euros, pueda acercar a la UE a este objetivo de comercio justo.

“El Parlamento ha sido muy ambicioso al exigir que todos los productos que entran en la UE respeten nuestros estándares, y en particular nuestros estándares medioambientales”, dijo Anne Sander, eurodiputada francesa.

En términos comerciales, las reglas relacionadas con los estándares del producto final, y la seguridad alimentaria, lo más complicado son con las reglas sobre los métodos de procesamiento y producción.

En defensa propia

“Tenemos, en Sudamérica, países que están deforestando, que no tienen las mismas limitaciones que nosotros en productos fitosanitarios, que no tienen los mismos requisitos laborales que nosotros”, dijo Macron respecto del acuerdo UE-Mercosur, que sigue siendo en el limbo después de haber cedido a la presión del lobby agrícola.

Macron y sus aliados han planteado la batalla contra el comercio agroalimentario desigual como una cuestión de seguridad e identidad nacional y enfatizaron que Francia estaba lista para luchar contra este “dumping ambiental y social” directamente desde Bruselas, sede del Parlamento Europeo.

Fuente: Político

Fecha de publicación: 28/05, 4:38 pm