España: el cambio climático disparó las indemnizaciones en el sector agrario
En el mes de junio, las nevadas elevaron las indemnizaciones a 800 millones de euros frente a unas primas de riesgos de 638.
En España, las empresas aseguradoras del sector agrario asocian el cambio climático a las grandes indemnizaciones dadas desde comienzo de año, en particular por la borrasca Filomena.
Según los datos provisionales manejados por las compañías aseguradoras integradas en Agroseguro, la siniestralidad se elevó a la cifra récord de 800 millones de euros frente los más de 600 millones de los años 2019 y 2020 y los 740 de 2018. El importe de las primas de riesgo en 2021 fue de 638 millones, lo que supone la necesidad de acudir a los fondos del Consorcio de Compensación.
En enero, el sector agrario sufrió el fenómeno de la borrasca Filomena con fuertísimas heladas sobre casi 400 mil hectáreas en las producciones de frutas, cítricos, uvas, hortalizas, almendras y olivar, que dejaron una pérdida de 339 millones de euros.
En los meses siguientes continuaron las heladas en zonas de frutas y viñedos desde Castilla La Mancha a Rioja, Duero y Galicia, España, a las que se añadieron los pedriscos tempranos. Al 31 de mayo, la siniestralidad ascendió ya a 711 millones, a los que se suman otros 72 millones de euros por pedrisco solo en el mes de junio y todavía con parte de la cosecha en la mitad norte sin segar.
Según los datos manejados por Agroseguro, el progresivo cambio climático tuvo importantes efectos negativos sobre el campo. En relación con periodos anteriores, en la actualidad fenómenos como los pedriscos se producen antes de lo que era habitual y tienen una mayor duración.
Con el cambio climático llegaron con más frecuencia otros fenómenos tormentosos como las gotas frías, cambios muy bruscos de temperaturas o que, a la vez, se puedan registrar en paralelo fuertes heladas en la zona norte y centro de la península y pedriscos en levante o en el sur.
Reclaman que las aseguradoras no paguen por el cambio climático
De cara al futuro, desde las empresas aseguradoras, se reclama un debate sobre este instrumento básico para garantizar la rentabilidad de las explotaciones que debería contar con más apoyos públicos y aumentar las garantías de los agricultores.
Además, consideran que deberían eliminar las penalizaciones en las primas cuando la siniestralidad en una explotación no responda a una mala práctica del agricultor, sino a los riesgos propios de una zona por factores externos.