Empresas privadas presentan un plan de transformación del transporte para Buenos Aires
El proyecto consiste en capitalizar la capacidad ociosa de movilidad entre el conurbano y los distintos barrios de Capital Federal.
La pandemia de COVID-19 ha dejado en claro que la cuestión de la movilidad urbana es un tema sensible para el control de la enfermedad y el sostenimiento de la economía. Las empresas lo saben y el sector público también.
En la Ciudad de Buenos Aires, además de los más de 3 millones de habitantes que viven en ella, cada día se suman varios millones más de personas que se trasladan en transporte público desde y hacia el conurbano para acudir a sus empleos y desarrollar su actividad económica.
“Frenar el transporte reduce los contagios, pero atenta contra la economía. Poner el foco únicamente en la economía, deja en jaque la salud de los argentinos aumentando la probabilidad de contagios, por lo que necesitamos una solución integral con una mirada sistémica” explica Gabriel Weinstein, socio y Director de Innovación de Olivia.
Fue en ese encuentro que surgió un proyecto para contribuir con Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para lograr al mismo tiempo que haya circulación de personas con el distanciamiento social necesario, reactivar la actividad económica e incluir a sectores productivos vinculados al transporte que habían quedado relegados por el confinamiento sanitario establecido a fines de marzo.
Organizado en diferentes etapas de implementación, una escalonada sobre la otra, el proyecto implica que en tan sólo cuatro semanas se podrían sumar unidades de transporte escolar y buses para turismo al sistema de transporte público. Con ellos se podría dar más capacidad al sistema manteniendo el distanciamiento social necesario y generaría empleo en dos sectores altamente afectados.
La iniciativa también comprende la incorporación de un sistema online para que el pasajero logre asignarse un asiento libre en este nuevo sistema de transporte público mixto, aprovechando tecnologías desarrolladas para carsharing y carpooling.
“De esta manera la gente puede tomar su transporte sin tener que quedar expuesto en la calle y aguardar en el domicilio desde el cual parte, manteniendo la distancia social necesaria”, explica Weinstein.
Los expertos explican que el proyecto también implicaría que el usuario pueda ver el movimiento de la unidad en tiempo real desde su celular e ir reservando su asiento en el momento.
“Hemos entrado en una nueva normalidad social. Innovar y gestionar el cambio social que esto conlleva resulta fundamental y requiere del apoyo de todos. Esta iniciativa es un reflejo de la aplicación pragmática y real del sentido más profundo de la responsabilidad social empresaria”, señala Ezequiel Kieczkier, Socio y Director de Olivia.