La tendencia de reciclar plástico lentamente empieza a ser parte de un movimiento colectivo que busca proteger el medioambiente en Argentina. Y esto se refleja en números. En 2020 se recuperaron 282.000 toneladas de plástico, según el último índice realizado por la asociación civil sin fines de lucro especializada en plásticos y el medioambiente, Ecoplas, en conjunto con la Cámara Argentina de la Industria de Reciclados Plásticos (CAIP). Del total, 258.000 toneladas son de reciclado mecánico y 24.000 toneladas como recuperación energética en hornos de cemento, lo que presenta una tendencia creciente en el país: desde el 2003 se reciclaron casi 5 veces más plásticos. Para entender la magnitud de la cifra, desde Ecoplas ejemplifican que equivale a 235 mil autos y 1600 obeliscos. «Está surgiendo una nueva economía del plástico que es circular donde el volumen de residuos plásticos, además de no terminar en rellenos sanitarios ni el ambiente, se convierten en recursos valiosos para nuevos usos«, afirma Verónica Ramos, directora Ejecutiva de Ecoplas, en la presentación del informe a la prensa. En este sentido, desde la entidad explican que si bien se avanzó en materia de reciclado, acompañado también por las empresas que producen packings más sustentables, 4 de 10 argentinos todavía no recicla. En 2020, se recuperaron 282 mil toneladas de plástico. (Crédito: Ecoplas) Movimiento circular Para promover la cultura del reciclaje de manera colectiva, Ecoplas anunció que se asoció a la plataforma internacional Movimiento Circular. ¿El objetivo? Educar y capacitar a recuperadores urbanos, docentes y alumnos, representantes de áreas gubernamentales, empresas y a ciudadanos de todo el país para el consumo responsable y valorización de los plásticos. Cabe destacar que Movimiento Circular se creó en 2020 y es una iniciativa de alcance regional ya cuenta con el apoyo de los principales referentes de la industria en toda Latinoamérica. «La comunidad formada por personas, empresas, organizaciones sociales y entidades públicas comparten el compromiso de contribuir, a través de la educación, a la transición de la economía lineal a la circular«, apuntan desde la asociación. Y Ramos agrega: “Sabemos que la educación es el primer paso para construir un mundo diferente. Aprender sobre economía circular transforma a las personas». Políticas públicas Desde Ecoplas hacen hincapié en que se necesitan de políticas públicas para poder organizar el sistema de reciclaje de plástico. Por eso, afirman que se requiere una ley nacional de Responsabilidad Extendida del Productor, para acompañar normativas ya sancionadas como la ley Yolanda y la de Educación Ambiental. Sobre la llamada ley de Envases, desde la asociación ven «bien» la iniciativa porque «los recuperados urbanos forman parte de la cadena de valor». Se está reciclando envases en un 25% aproximadamente, según Ecoplas. En este sentido, en los últimos años Ecoplas participó activamente en distintos proyectos de ley. De hecho, el diputado Carlos Ybrahin Ponce convocó a la asociación, CAIP y al sindicato para trabajar en dos proyectos: uno es de plásticos de un solo uso y el otro de economía circular. «Tiene que ver con una mirada superadora, no prohibitiva, desde el desarrollo productivo«, detalla Ramos. También desarrollaron un plan con el Ministerio de Educación y Dirección General de Reciclado de la Ciudad para generar conciencia sobre la importancia de reutilizar y reciclar los plásticos a la vez que presentó y coordinó la “Red Economía Circular de los Plásticos” a través de mesas abiertas de trabajo. «Oportunidades hay. El plástico es un recurso que da empleo, no es un enemigo. Va a llevar tiempo, es un proceso, un gran cambio de paradigma. Lo importante es que tenemos que entender que debemos entrar en este proceso. Tenemos que cambiar«, concluye Ramos.
