Según estudios, el hielo en la Antártida se está comportando de una manera distinta nunca antes visto
Desde el mínimo de hielo antártico de 2016, los científicos están investigando a qué se deben estos cambios y cómo será el futuro.
En los últimos años, el hielo marino antártico, que sostiene la enorme masa helada del continente, se debilitó o, en algunos casos, desapareció en ciertos sectores. Durante el verano antártico, el Sol no se oculta, pero las temperaturas deben mantenerse de manera que el hielo costero conserve un volumen adecuado.
En las últimas décadas, se observó que este soporte desapareció completamente en algunas áreas o se redujo tanto que su capacidad de contención es mucho menor. De hecho, los glaciares se están derritiendo en el océano más rápido de lo que se pensaba, según un estudio.
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Ella Gilbert, climatóloga polar del British Antarctic Survey, explica a Live Science que el hielo antártico “es una parte vital de nuestro sistema climático”. Aunque la Antártida parezca lejana, su estabilidad es crucial para el sistema climático global y el comportamiento de los océanos. Hasta hace poco, el hielo marino antártico fluctuaba entre mínimos estivales relativamente estables y máximos invernales. Sin embargo, después de un mínimo récord en 2016, las cosas comenzaron a cambiar.
Cuáles fueron los dos mínimos registrados en la Antártida
Después del mínimo registrado en 2016, se produjo dos mínimos récord, incluido el más bajo de la historia en febrero de 2023, con solo 1.91 millones de kilómetros cuadrados. En marzo del año pasado, los científicos esperaban una recuperación de la capa de hielo, pero esto no ocurrió. En cambio, el hielo antártico experimentó seis meses consecutivos de mínimos históricos, en un año en que las temperaturas superficiales del mar a nivel global alcanzaron niveles sin precedentes.
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En el punto álgido del invierno, en julio de 2023, la Antártida tenía un déficit de hielo mayor que el tamaño de Europa Occidental. “Todos pensábamos que el mínimo era lo peor que podía pasar; era 2023, no 2070”, comentó a Live Science Ariaan Purich, investigador del clima antártico en la Universidad Monash de Australia. “Así que cuando llegó el invierno, no podíamos creerlo”, agregó.
Ahora, en 2024, la extensión del hielo marino antártico alcanzó otro mínimo casi récord, con solo 1.985 millones de kilómetros cuadrados el 20 de febrero. Los investigadores observan un profundo “cambio de régimen” en la Antártida y están tratando de comprender qué sucederá a continuación. Cuando el verano se convierte en invierno en la Antártida, el hielo marino se expande desde su mínimo de alrededor de 3 millones de kilómetros cuadrados hasta 18 millones de kilómetros cuadrados, cubriendo el 4 % de la superficie de la Tierra.
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Cuál es el proceso que se esconde detrás del hielo antártico
Los especialistas en clima polar explican que la mayor parte del hielo marino se forma en invierno, durante las semanas de la noche polar, sobre zonas de aguas abiertas en la plataforma de hielo flotante que rodea el continente. Las polinias, o agujeros de agua marina, dentro de esta plataforma se congelan al ser salpicados por la nieve, construyendo la capa de hielo pieza a pieza.
El mosaico de hielo costero tiene varias funciones, según Live Science. Primero, este cinturón de hielo marino mantiene el agua de mar caliente alejada del cada vez más vulnerable hielo terrestre del continente, protegiendo así sus glaciares colgantes. Además, la superficie del hielo marino refleja parte de la energía solar hacia el espacio, en un proceso conocido como efecto albedo.
Otro proceso crucial ocurre en estas plataformas flotantes. Si se pierde o se debilita, tendrá implicancias a un nivel mayor. Estas plataformas también juegan un papel clave en el ecosistema antártico, ya que proporcionan un hábitat para criaturas como los pingüinos y el krill. El krill se alimenta de algas fotosintéticas que crecen alrededor de las plataformas, y sus excrementos retienen dióxido de carbono, que luego se hunde al fondo del océano.