Cuál es el plan de la mayor productora de energías renovables para el 2030

Tanto en la Argentina como en el resto del mundo, las energías renovables se han convertido en la “niña mimada” a la hora de generar estrategias de competitividad creciente para confirmar su relevancia en el camino de la transición energética, hacia una matriz limpia y neutra en emisiones.

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A nivel local, la potencia instalada creció en la última década, habiendo incrementado de 497 MW en 2012 a 5.062 MW en 2022 (aproximadamente, un 12% de la matriz energética del país), incremento que se explica por la implementación del programa RenovAr, del anterior gobierno de Alberto Fernández.

Un plan que estableció rondas de licitaciones para la contratación de proyectos de generación de energía renovable a gran escala y estableció un marco regulatorio que fomentó la inversión y el crecimiento del sector de energías renovables y que contó con el apoyo del Banco Mundial, que brindó apoyo financiero y asesoramiento técnico en su implementación.

Además, el programa RenovAr fue fundamental para asentar la base del Mercado a Término de Energía Renovable (MATER), en el cual los agentes generadores suscriben contratos de compra-venta de energía (PPAs – Power Purchase Agreements), con grandes usuarios industriales que buscan descarbonizar sus operaciones y adquirir energía más competitiva.

A pesar del cambio de gobierno y de la llegada de una administración amante del libre mercado y rencorosa con la presencia del Estado en el control y regulación de ciertos sectores, los contratos de este programa ofrecen estabilidad y predictibilidad, tanto para los generadores de energía renovable como para los usuarios industriales.

Es más, el Informe Anual publicado por CAMMESA, a fines del año pasado (el último conocido hasta ahora) revela que la demanda de energía eléctrica totalizó 138.760 GWh, un 3,6% por encima de los valores de 2021 que estuvo relacionado al incremento de la demanda residencial en un 3,9% y un 1,8% de grandes usuarios industriales y comerciales.

Dentro de las energías renovables, la generación solar fue la que experimentó un mayor aumento (33,4%), explicado por la incorporación de +25 MW de esta tecnología y culminó con una participación mayoritaria de la energía eólica, seguida por la tecnología solar y la hidráulica en tercer lugar.

Mirada a largo plazo

Está claro que, en la actualidad el negocio de las energías renovables lo lidera Genneia, una compañía que es propiedad en su mayor parte del fondo Argentum Investments, con el 43.6%; seguido por Fintech Energy, con el 25%; Jorge Pablo Brito, con el 8.33%; Delfín Jorge Ezequiel Carballo, con otro porcentaje similar y el Fideicomiso en Garantía Herederos JHB, también con un 8.33%.

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El grupo líder es, a su vez, propiedad del fondo de inversión estadounidense PointState Capital LP, que en el país también posee el 100 % del capital social de Hoteles Sheraton Argentina S.A., con el cual se quedó tras pagar u$s105 millones a Marriott Internationals.

Para el caso de las energías renovables, los ejecutivos de Argentum junto al board de Genennia han establecido un ambicioso objetivo a seis años como es el de proveer para 2030, energía 100% renovable al SADI, el sistema interconectado nacional, en el cual hoy llegan al 18%.

Cambiar la matriz

La estrategia de negocio y los objetivos de la compañía −a corto y mediano plazo− procuran profundizar su matriz renovable y continuar con un paulatino proceso de desconexión de sus activos térmicos en línea con su objetivo de transformar su matriz energética hacia un modelo renovable. En ese marco, la compañía trabaja en la desconexión del SADI y en el cierre definitivo de centros convencionales.

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El proyecto de desinversión de activos, liderado por la Gerencia de Desinversión de Activos, involucra a, prácticamente, todas las áreas de la compañía y se divide en tres fases:

• FASE 1: se trata de la etapa en la que se realiza el desmontaje completo de las turbinas y los equipos auxiliares. Al finalizar la desinstalación de todos los componentes, se los deja listos para ser transportados.
• FASE 2: interviene activamente el Área de Medio Ambiente para asegurarse de dejar el predio en las mejores condiciones posibles, preservando el lugar y afectando (al mínimo) el entorno de la comunidad.
• FASE 3: se completa el cierre de todos los permisos y compromisos legales asociados a la empresa.

Con una perspectiva de circularidad, y con el objetivo de minimizar gastos y optimizar recursos, se procura que todos los componentes de las centrales puedan ser comercializados, subastados o, en algunos casos, donados. A cambio, el nuevo paradigma inversor de Genneia será marcado también por tres objetivos o ejes. El primero es el almacenamiento de energía en baterías (BESS -Battery Energy Storage System), evaluación de tecnologías actuales y en desarrollo, armado de un vendor’s list y comparación de costos y desempeño.

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“Las aplicaciones podrán ser tanto para sistemas on-grid como para sistemas off-grid (especialmente, para minería de litio y otros sistemas aislados)”, agrega el informe.
El segundo es la Inteligencia artificial (IA) aplicada a la eficiencia de la operación y para la predicción de fallas, a partir de datos operativos y monitoreo de condición técnica de los componentes principales, y para optimizar la red de transmisión eléctrica (gestión dinámica de redes o DLR-Dynamic Line Response).
Y el tercer eje será la identificación de nichos de oportunidad para producción de hidrógeno verde, cadena de valor y evaluación de proyectos piloto.

El desarrollo de hidrógeno verde, como combustible limpio, es otra pieza fundamental de Genneia en la apuesta global por descarbonizar a la economía.
A diferencia de otros países, la Argentina cuenta con inmejorables condiciones naturales para su desarrollo y producción, por lo cual el producto presenta una doble oportunidad, tanto para el crecimiento de nuestro país como para la lucha contra el cambio climático.

Genneia es parte de H2ar –Consorcio para el Desarrollo de la Economía del Hidrógeno en Argentina-, coordinado por Y-TEC, la compañía de tecnología de YPF y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET).
La Cámara Eólica Argentina también está adherida a este consorcio, lo que reafirma su interés en el desarrollo del hidrógeno verde.

Nueva fase expansiva

Apalancados sobre un mercado interesado en proyectos sostenibles, los ejecutivos de Genneia delinearon un plan de inversión, que llevó a la empresa a ampliar su capacidad instalada de energía renovable a más de 1 GW.

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La nueva fase de expansión contempla el desarrollo del Parque Solar Sierras de Ullum1 , Parque Eólico La Elbita y Parque Solar Tocota III, los cuales requieren una inversión que superará los u$350 millones; además, contribuirán al desarrollo de una economía más verde, más federal y con impacto en la generación de puestos de trabajo sostenibles.

De igual modo, cada nuevo proyecto de generación renovable incorpora, desde sus comienzos, los criterios y las reglas del buen arte de la industria eólica, para que el parque pueda ser, finalmente, construido y operado de forma sostenible, segura y eficiente durante toda su vida útil, en un horizonte temporal de 20 a 30 años.
Una vez definido el emplazamiento (macrositing), se pone especial foco en las condiciones climáticas del sitio y de la región; condiciones del terreno y medidas de seguridad y tecnología.

La generación de energía renovable representó el 93% del total generado en 2022, lo que demuestra el compromiso de conversión de su matriz energética mediante una gestión sustentable y transparente del negocio.

Fundada en 2013 y líder actual del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), con un market share de generación renovable del 18%, según datos de la Secretaría de Energía de la Nación, en la capacidad instalada eólica y solar, alcanzando el 23% de la capacidad instalada de energía eólica y el 7,5% de la solar, la empresa profundizará sus planes.

Con el desarrollo de sus parques eólicos Rawson, Trelew, Madryn, Chubut Norte, Villalonga, Pomona y Vientos de Necochea, cuenta con una potencia de 784 MW en energía eólica; y alcanza los 944 MW de energía renovable al considerar sus parques solares Ullum (82MW) y Sierras de Ullum (78 MW), ubicados en la provincia de San Juan.

Además, se encuentra iniciando la construcción del Parque Eólico La Elbita en Tandil (162 MW) y el Parque Solar Tocota III en San Juan (60 MW) lo que permitirá alcanzar 1GW de capacidad instalada.

Redoblar la apuesta

Según Bernardo Andrews, CEO de Genneia, en la última década la empresa aumentó su capacidad instalada en 3,5 veces y transformando su matriz de generación hacia lo renovable.

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“Este logro refleja nuestro compromiso con el desarrollo sostenible, la lucha contra el cambio climático y la transición hacia una matriz energética limpia y neutra en emisiones”, agrega.

Da cuenta también de que en el 2022, logró generar el 18% de la energía eléctrica renovable de Argentina, a través de sus parques eólicos y solares, gracias a lo cual ha podido evitar la emisión de más de 1,66 millones de toneladas de CO2e, contribuyendo, así, a la reducción de gases de efecto invernadero y al cuidado del medio ambiente.

De cara a 2030, la compañía acaba de redoblar la apuesta con su compromiso de generar energía 100% renovable conectada al SADI, logrando la carbono neutralidad de estas operaciones.

Finanzas sostenibles

En la misma línea con su compromiso con las finanzas sostenibles, la empresa lleva colocado con éxito obligaciones negociables verdes por u$s700 millones, en el mercado local e internacional que ingresaron al Panel de Bonos Sociales, Verdes y Sustentables (SVS) de ByMA.

Del mismo modo, en su informe anual de sustentabilidad da cuenta de su crecimiento en el Mercado a Término de Energías Renovables, expandiendo su cartera de clientes, actualmente, compuesta por 24 empresas.

Además, sigue ofreciendo Certificados de Reducción de Emisiones (CER), a empresas y organizaciones interesadas en compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero.

También, aumentó su capacidad de emitir y comercializar Certificados de Energía Renovable Internacional (I-REC) a más de un millón por año.
“Nuestra estrategia de sustentabilidad se basa en un enfoque ESG (ambiental, social y de gobernanza) y busca incorporar las perspectivas y expectativas de nuestros distintos grupos de interés”, explica el CEO de Genneia, quien explica que el negocio de la compañía “se basa en generar energía en equilibrio con la naturaleza. Implementamos medidas para mejorar la protección y el manejo de la fauna voladora en nuestros sitios, realizando monitoreos específicos”.

Evolucionar para mejorar

Según sus ejecutivos, Genneia es una empresa en constante cambio, lo cual se refleja en la transformación de su matriz energética que hace 10 años tenía una capacidad instalada del 78% de activos térmicos y 22% renovables y que, luego de un proceso de desinversión de activos convencionales, con el sol y el viento como principales recursos, logró que el 70% de su capacidad corresponda a activos renovables.

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“El futuro será aún más verde: para 2030, nos comprometemos a proveer energía 100% renovable al SADI gracias a nuestros parques de generación eólica y solar que cuentan con una capacidad de 784 MW y 82 MW respectivamente y están ubicados estratégicamente, de acuerdo al factor de capacidad de estos recursos en nuestro país”, asegura un informe elaborado por el directorio de Genneia.

El paper recuerda que a fines de marzo de 2023, obtuvo la habilitación comercial del Parque Solar Sierras de Ullum, incrementando nuestra capacidad solar a 160 MW.
De forma complementaria, cuenta con dos centros de generación térmica que suman 363 MW a su capacidad instalada y que ofrecen un suministro eléctrico estable, eficiente e inmediato, lo que permite cubrir los puntos de alta demanda y los requerimientos energéticos del país.

De acuerdo al documento, la evolución de la generación renovable de Genneia, que aumentó de 34% en 2017 a 93% en 2022, acompañó los cambios en el comportamiento del mercado.

Según datos provistos por CAMMESA (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico), el porcentaje de la demanda MEM (Mercado Eléctrico Mayorista), cubierta con generación renovable, aumentó 10 veces en los últimos diez años, pasando de un 1,2% a 13,9%.

A su vez, en este período, también se registraron cambios en el tipo de energía renovable generada, que pasó de una predominancia de biocombustibles a una participación mayoritaria de eólico y solar.

Compromiso post Milei

Más allá de que dentro de siete años el presidente Javier Milei se mantenga en el poder, gracias al efecto reelección, o que otro signo político gobierne la Argentina, los planes de Genneia a mediano plazo se mantienen.

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Esto, teniendo en cuenta que, de acuerdo al documento, el mundo se ha propuesto que, para mantener el calentamiento global por debajo de 1,5 °C, respecto a los niveles preindustriales, las emisiones GEI deberán reducirse casi a la mitad para 2030 y alcanzar el cero neto hacia 2050.

En este marco, Argentina se comprometió a disminuir un 19% las emisiones, en comparación con el máximo histórico de emisiones alcanzado en 2007 para lo cual será clave el sector energético para alcanzar estos objetivos, y la industria de las energías renovables es uno de los principales actores para viabilizar un cambio hacia una matriz de generación limpia.

Según la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA), las decisiones que se tomen en esta década son claves, y posiciona a la electrificación y la eficiencia como impulsores fundamentales de la transición, junto con la energía renovable, el hidrógeno limpio y la biomasa sostenible.