Producción sostenible: desafío y oportunidad para las PyMEs

Hace pocos días atrás finalizó en Egipto la conferencia climática de la ONU, COP27, que busca el compromiso de los países para cumplir con el Acuerdo de París en vistas a emprender un esfuerzo común para combatir el cambio climático e implementar una agenda de sostenibilidad. 

En ese marco, a nivel global se presentó una nueva oportunidad para fortalecer el sector de las pequeñas y medianas empresas (PyMES). Los negocios deberán acompañar la transición hacia la carbono neutralidad, con liderazgo, consistencia y medidas concretas. Para aprovechar esta tendencia, el desafío consiste en comprender que son protagonistas cruciales y destacadas de la transformación hacia la sostenibilidad. Desempeñan un papel fundamental en la motorización de la economía del país con una enorme flexibilidad de adaptación a los cambios y un potencial para generar empleos. 

Semejante tarea requiere que los dirigentes empresarios implementen soluciones en el corto y mediano plazo tendientes a desarrollar y afianzar sus proyectos como verdaderas PyMES “verdes” y resilientes. Entonces, la meta es doble: por un lado, contribuir al cuidado del ambiente y combatir el cambio climático y, por otro lado, propulsarse a través del crecimiento sostenible en un contexto en el que se apremia expandir la productividad más que nunca. Bien lo sabemos en la provincia de Buenos Aires, donde se desarrolla el mayor volumen de actividad industrial del país.

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Para transitar esa senda es determinante que el gobierno, la sociedad civil y el sector privado empresarial avancen en clave de diálogo y sinergia plena. Es ese el camino que nos marca la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas a través de su Agenda 2030 haciendo hincapié en la necesidad de formalizar alianzas inclusivas entre los diversos actores.

A estas articulaciones las define como aquellas que “se construyen sobre la base de principios y valores, una visión compartida y objetivos comunes que otorgan prioridad a las personas y al planeta, y son necesarias a nivel mundial, regional, nacional y local”. En efecto, es la implicancia que se les atribuye dentro del del programa de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que la Asamblea busca implementar a escala planetaria.

En esa línea, en 2020 comenzamos a trabajar desde la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (UIPBA) en la difusión de los ODS. La finalidad es integrar los preceptos de ese proyecto global al funcionamiento en la vida real de las PyMES bonaerenses. Por eso suscribimos un acta de compromiso junto con el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales (CNCPS), que es el organismo que gestiona la aplicación de la Agenda 2030 en nuestro país.

De esta manera, conseguimos poner en marcha un valioso espacio de colaboración recíproca. También, implementamos iniciativas para favorecer el cuidado ambiental, la innovación productiva, la creación de puestos laborales, la inserción y crecimiento de las mujeres en el ámbito industrial y la implementación de la economía circular, entre otros propósitos. Es la dirección en que apunta el ODS 17, uno de los cinco que seleccionamos para llevar a cabo nuestra actividad como representantes y referentes del sector industrial.

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Adicionalmente, identificamos al ODS 13 como prioritario para la gremial empresaria, orientado a la adopción de medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos, un requisito de relevancia para la supervivencia y desarrollo de las empresas en esta era. 

Con ese compromiso, activamos diferentes proyectos destinados a promover la capacitación ambiental, aumentar la eficiencia energética y el abastecimiento de energía de fuentes renovables, la identificación y gestión de los riesgos climáticos, entre otros. Es que el cambio climático es una realidad concreta que genera efectos negativos significativos que afectarán cada vez más la dinámica ordinaria de los negocios. Un riesgo emergente y, por tanto, un nuevo desafío estratégico para la gestión empresarial de nuestro tiempo.

Desde otra perspectiva, el cambio climático también puede significar una oportunidad para presentar productos y servicios que aumenten la resiliencia y reduzcan los impactos de este fenómeno creciente. En definitiva, que presenten soluciones efectivas a los problemas generados por el cambio climático en línea con los compromisos asumidos en el Acuerdo de París cuya instrumentación se está debatiendo durante estos días en Sharm El-Sheik en la COP27.

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Los lineamientos referidos a la estrategia de sostenibilidad de la UIPBA, así como aquellos que se desprenden de la aplicación de los demás ODS seleccionados para el Programa 2021-2023, se definieron junto con distintos actores del sector en una serie de encuentros orientados a visibilizar las oportunidades que la iniciativa puede otorgarles a las PyMES de nuestra provincia.

Durante estas actividades, profundizamos sobre puntos clave, como el papel central que cumplen las articulaciones público-privadas, así como la importancia de las PyMES en la matriz productiva del país, donde ejercen un papel preponderante de cara al crecimiento económico, la generación de puestos de trabajo de calidad y las posibilidades de innovación para lograr el deseado desarrollo sostenible.

Además, en consonancia con la propuesta del ODS 17, se presentaron diversas herramientas institucionales, tanto del ámbito público como desde la representación gremial empresarial, a fines de integrar el Programa a su dinámica productiva y organizativa, con el debido acompañamiento, asesoramiento y capacitaciones brindados de nuestra parte.

Sobre la base del ODS 12, consensuamos un recorrido destinado a garantizar las modalidades de consumos y producciones sostenibles, con foco principalmente en la economía circular y la disminución de la generación de residuos, entre otros ejes. 

A la par, corresponderá promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación, siempre, con el respaldo a la investigación y el desarrollo, en concordancia con lo estipulado en el ODS 9, que también seleccionamos con el convencimiento de que el Programa permitirá consolidar el futuro sostenible de las PyMES de la provincia de Buenos Aires.

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Entre las múltiples acciones que la UIPBA lleva adelante en esta agenda, se destaca la creación del Centro Tecnológico de Economía Circular Industrial (CTECI) que aporta un espacio de investigación, intercambio y vinculación industrial de excelencia con todas las partes interesadas. La economía circular plantea una evolución del modelo económico tradicional, basado en la extracción, producción, uso y generación de residuos proponiendo  por el contrario una alternativa para crecer y competir reduciendo la dependencia del uso de materias primas, maximizando la eficiencia en el reaprovechamiento de materiales secundarios y regenerando los sistemas naturales.

Las ventajas de la economía circular son enormes desde lo ambiental, así como desde lo económico, productivo, tecnológico y social. Puede ser -también- una oportunidad para potenciar proyectos de innovación y generar nuevos puestos de trabajo. La economía circular es una alternativa novedosa, superadora y sostenible que redundará en una optimización de la productividad de la industria local y en una mejora ambiental de nuestra sociedad. Por todo eso, la economía circular constituye -también- una de las medidas de mitigación previstas en el Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático.

Es fundamental el trabajo de las organizaciones para lograr industrias que contribuyan a la consolidación del desarrollo sostenible de nuestro país. La transición productiva hacia la carbono neutralidad conlleva un gran reto, más aún en nuestro país que plantea múltiples desafíos adicionales. Que llegue a buen puerto implica la responsabilidad de todos. El cambio cultural y el fortalecimiento institucional resultan, pues, inexcusables para lograr la necesaria transformación en favor de las personas, el ambiente y la prosperidad.