Francia imputa a Peugeot por ocultar la contaminación en vehículos diésel
La francesa se suma a la lista de las automotrices, como Renault y Volkswagen, que son parte del escándalo del "dieselgate".
Después de Renault y Volkswagen, la Justicia francesa imputó a Peugeot, por “fraude” al consumidor en los controles anticontaminación sobre la venta de vehículos diésel Euro 5 en Francia entre 2009 y 2015.
“Nuestras filiales están firmemente convencidas de que sus sistemas de control de emisiones cumplían todos los requisitos aplicables en ese momento y los siguen respetando hoy en día, y esperan con impaciencia la ocasión de demostrarlo”, afirmó en un comunicado, Stellantis, matriz de Peugeot.
Según la agencia de noticias AFP, la imputación de Peugeot por el cargo de “fraude que conlleva un peligro para la salud del ser humano o del animal”.
A su vez, un informe de la Dirección General de Competencia, Consumo y Represión del Fraude (DGCCRF), enviado a la justicia en febrero de 2017, mencionaba una “estrategia global destinada a fabricar motores fraudulentos, y después a comercializarlos”.
Los investigadores sostuvieron que PSA (Peugeot-Citroën) vendió entre septiembre de 2009 y septiembre de 2015 en Francia unos 1,9 millones de vehículos diésel de generación Euro5 (norma en vigor hasta 2015), “cuyo motor funciona según estrategias fraudulentas”.
Ante las infracciones observadas, la DGCCRF calculaba que la empresa incurría en una multa máxima de 5.000 millones de euros (unos 6.000 millones de dólares).
Renault y Volkswagen, imputados
La Justicia francesa también imputó a las empresas Renault y Volkswagen por “engaño” en los dispositivos de control de emisiones contaminantes de los autos diésel.
Así, Volkswagen deberá pagar 19.700 millones de euros (24.000 millones de dólares), evaluada por la DGCCRF, por “fraude sobre las cualidades sustanciales de una mercancía que conlleva un peligro para la salud del ser humano o del animal”, según consiguió AFP.
Como respuesta, el gigante alemán emitió un comunicado en el que impugna que haya “perjuicio” para los consumidores en este país.
A su vez, el expresidente director de Volkswagen, Martin Winterkorn, fue acusado de falso testimonio en Alemania ante una comisión parlamentaria de investigación sobre este escándalo de motores trucados.
Renault, por su parte, tendrá que pagar una fianza de 20 millones de euros, 18 de los cuales se destinarán al posible pago de daños y multas.
El escándalo del dieselgate, que desencadenó acciones legales en muchos países, ya le costó a Volkswagen 30.000 millones de euros (36.500 millones de dólares), en gran parte en Estados Unidos, donde el grupo alemán se declaró culpable de fraude en 2017.
A la lista, quedan varios posibles objetivos adicionales como Citroën, y Fiat-Chrysler, también perteneciente al grupo Stellantis.
