Una aerolínea finalizó el primer vuelo con un 50% de combustible sostenible

Volotea, la aerolínea especializada en conectar pequeñas y medianas ciudades europeas, logró un hito significativo en la descarbonización del sector aéreo al completar su primer vuelo con un 50% de combustible de aviación sostenible (SAF) suministrado por Repsol. Esta iniciativa, que tuvo lugar en la nueva ruta entre Madrid y la Región de Murcia, representa un paso clave en los esfuerzos de la compañía por integrar combustibles de aviación sostenibles en la operación de su flota desde 2022, en colaboración con diversos proveedores.

El acuerdo entre Volotea y Repsol, celebrado durante la Gala de Soles Guía Repsol 2024 en Cartagena (Región de Murcia), establece que este vuelo con un 50% de SAF es el máximo permitido por las certificaciones actuales.

Los SAF tienen el potencial de reducir hasta un 80% las emisiones de CO₂ a lo largo de su ciclo de vida, según estudios de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA). La normativa ReFuelEU Aviation establece que para 2030, las aerolíneas deben incorporar al menos un 6% de SAF en los vuelos, y para 2050, este porcentaje debe alcanzar el 70%. Actualmente, la capacidad máxima de producción de SAF en la Unión Europea se estima en alrededor de 0,24 millones de toneladas, solo el 10% de la cantidad requerida para 2030.

Volotea también está explorando otras opciones para la producción de SAF a partir de materias primas circulares, y está comprometida con iniciativas de energía alternativa como el hidrógeno verde y la electrificación de su flota terrestre. Además, la aerolínea está en proceso de renovar un acuerdo con Airbus que, desde septiembre de 2022, le permitió operar vuelos en la ruta Hamburgo-Toulouse con un 34% de SAF.

Gloria Carreras, directora de ESG de Volotea, afirmó: “El hito que hoy hemos alcanzado de la mano de Repsol, así como las sólidas alianzas en el sector, subrayan nuestro compromiso de impulsar la investigación y el desarrollo de tecnologías limpias y eficientes en la industria de la aviación. El SAF es considerado la principal opción para reducir de manera inmediata las emisiones de dióxido de carbono, pero requiere de una fuerte inversión, una regulación fiable y un apoyo continuo del sector público y privado”.