Un municipio impulsa la bioconstrucción para zonas sin gas: cuáles son los beneficios
El proyecto sustentable busca aprovechar las ventajas para sitios donde no llega la red y tampoco las garrafas.
El municipio de Zapala, en Neuquén, lanzó un proyecto de bioconstrucción para zonas sin gas. Buscan aprovechar las ventajas para sitios donde no llega la red y tampoco las garrafas.
El operativo para formar albañiles bioconstructores pretende la capacitación en una técnica sustentable y amigable con el medioambiente, además de los beneficios que generará para las distintas comunidades.
“En la zona rural pero también en la zona urbana donde se están construyendo redes pero la conexión puede tardar en llegar”, dijo Juan Pablo Young, secretario de Ambiente de la municipalidad de Zapala, sobre la necesidad del proyecto.
La bioconstrucción busca dar respuesta a la necesidad de calefacción o cocción mediante la difusión de técnicas para hacer hornos o estufas utilizando arcilla y elementos que son fáciles de encontrar en la zona centro de la provincia.
Se pretende que con la organización de talleres para difundir técnicas de construcción sustentable “haya más gente capacitada para hacer hornos no solo para su vivienda, sino también como un oficio para obtener ingresos económicos”, aclaró Juan Pablo Young, el secretario de Ambiente y Desarrollo de Zapala.
El taller de bioconstrucción estará a cargo del tallerista Ariel Uribe y constará de tres jornadas de cuatro horas cada una.
Beneficios de la bioconstrucción
- El gusto de la comida permanece intacto debido a que el horno de barrio no permite la mezcla de gases.
- Los alimentos no se contaminan porque la cámara de cocción y la de combustión están separadas.
- Se realiza un uso más eficiente de la energía y se puede utilizar durante todo el día.
El funcionario aclaró que había una necesidad urgente ya que los cupos del taller se completaron rápidamente, debido a que el límite era de 15 personas.
Ante esta situación, ya se puso en marcha la segunda etapa que será sobre la construcción de estufas de bajo consumo para calefacción. Se trata de sistemas alternativos de calefacción y la difusión se hará con una dinámica similar a la de los hornos, con una parte teórica y una práctica.
Hay una tercera etapa que tiene en cuenta la construcción de muros tendiente a la bioconstrucción de viviendas “para lo que vamos a dar herramientas de bioconstrucción sustentables para que la gente pueda hacer una construcción propia o bien adquiera conocimientos para poder obtener un ingreso económico”, agregó.
Para la capacitación se utilizan talleristas locales y Young indicó que se abrió la inscripción sin requisitos previos e inclusive sin experiencia en construcción, “por eso hacemos las clases teóricas, la práctica y el final del proyecto”, informó.
Todo el material que se usa como materia prima para hacer los hornos o estufas “son materiales que hay en la zona, los adobes se preparan con arcilla y arena que están presentes en la localidad” y se le agregan yuyos y excremento de animales para que cure una vez que se calienta.
“Fue una apuesta y nos dimos cuenta que prendió, gustó y merece replicarse en el tiempo, la convocatoria fue excelente, el resultado fue bueno y nos anima a ver que por acá hay un camino de trabajo”, concluyó Young, en diálogo con Río Negro.