Un meteorito cayó contra una casa y hallaron que es más antiguo que la Tierra
Del tamaño de un tomate cherry, atravesó el techo y esparció polvo cósmico por la habitación.
Un meteorito que atravesó la atmósfera e impactó contra una vivienda en McDonough, al sureste de Atlanta, resultó ser más antiguo que la propia Tierra. Según un análisis de la Universidad de Georgia, su formación data de hace 4.560 millones de años, superando en antigüedad a nuestro planeta.
Bautizado como Meteorito de McDonough, el objeto provocó una brillante bola de fuego visible en varios estados del sureste estadounidense antes de perforar el techo de la casa, atravesar conductos y parte del piso, fragmentándose en el impacto.
El geólogo planetario Robert Scott Harris y su equipo analizaron 23 de los 50 gramos recuperados, concluyendo que se trata de una condrita ordinaria tipo L, un material rocoso con bajo contenido metálico formado en presencia de oxígeno, mucho antes de que existiera la Tierra.
Origen y fuerza del impacto del meteorito
Los investigadores atribuyen su procedencia a una colisión ocurrida hace 470 millones de años en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter. Parte de los fragmentos quedaron orbitando hasta coincidir con la trayectoria terrestre millones de años después.
Con un tamaño similar al de un tomate cherry, el meteorito impactó a más de un kilómetro por segundo, generando un abollón en el suelo y dispersando polvo cósmico por la habitación. Días después, el propietario aún encuentra restos microscópicos. Harris explicó que la energía liberada fue suficiente para pulverizar parte del material y que la velocidad equivalía a recorrer diez campos de fútbol en un segundo, demostrando el potencial destructivo de objetos incluso tan pequeños.
El experto destacó que estudiar meteoritos es clave para prevenir impactos de mayor magnitud. Este es el vigesimoséptimo meteorito recuperado en Georgia y el sexto cuya caída ha sido presenciada.
Por último, las muestras se conservarán en la Universidad de Georgia para futuras investigaciones sobre el sistema solar primitivo, mientras que otros fragmentos se exhibirán en el Tellus Science Museum de Cartersville.