SpaceX marcó un “hito” en la ingeniería espacial con el megacohete Starship

SpaceX logró este domingo un avance clave en la carrera espacial: la empresa recuperó exitosamente el propulsor de su megacohete Starship tras un vuelo de prueba de casi nueve minutos, considerado un hito en la ingeniería espacial. El objetivo de esta maniobra es crucial para la reutilización del lanzador, lo que permitiría reducir costos y acelerar los lanzamientos futuros.

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El propulsor, bautizado Super Heavy, fue atrapado por brazos mecánicos apodados “los palillos”, instalados en la torre de lanzamiento de Texas. Estos brazos se cerraron sobre el cohete y lo inmovilizaron antes de que pudiera tocar el suelo, según mostró un video difundido por la compañía. Mientras tanto, la parte superior del Starship amerizó en el océano Índico, tal como estaba previsto.

“Este es un día para los libros de historia de ingeniería”, celebró un portavoz de SpaceX durante la transmisión en vivo del evento. Elon Musk, fundador de la compañía, compartió en redes: “La torre atrapó el cohete”, y destacó que se habían cumplido los dos principales objetivos del vuelo de prueba.

La NASA, que sigue de cerca los avances de SpaceX, felicitó a la empresa por el éxito de la maniobra. La agencia espacial estadounidense cuenta con el programa Starship para llevar a sus astronautas a la Luna, mientras que Musk tiene como visión a largo plazo utilizar este cohete para la colonización de Marte.

Con sus 120 metros de altura en total, el Starship es el cohete más grande y potente del mundo, compuesto por la fase Super Heavy de 70 metros, sobre la cual se coloca la nave del Starship.

¿Controversias con megacohete Starship en relación al medioambiente?

A pesar de los logros, SpaceX no escapa de las polémicas. La compañía ha criticado abiertamente la lentitud del organismo regulador de la aviación estadounidense (FAA) por los largos tiempos que toma aprobar los lanzamientos, argumentando que se necesita más tiempo para completar el papeleo que para construir los cohetes.

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Además, la empresa enfrenta acusaciones de daño ambiental. Las operaciones en su plataforma de lanzamiento han provocado críticas de asociaciones ecologistas, quienes advierten sobre el impacto en especies animales protegidas cerca de la base de Texas. Los lanzamientos de Starship requieren el vertido de grandes cantidades de agua para mitigar las ondas acústicas y vibraciones, un sistema introducido luego de que el primer vuelo de prueba en abril de 2023 destruyera parte de la plataforma.

A pesar de estas controversias, SpaceX sigue desarrollando el Starship a ritmo acelerado, con vuelos de prueba diseñados para resolver problemas en situaciones reales, manteniendo su objetivo de hacer realidad una nueva era de viajes espaciales.