Natura propone cultivar la planta de palma sin deforestar el planeta: ¿de qué se trata?
Tras 12 años de investigación, la multinacional brasileña de cosméticos y productos de higiene personal descubrió cómo hacerlo.
Natura, la Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria (Embrapa) y la Cooperativa Agrícola Mixta de Tomé-Açu desarrollaron un proyecto donde comprobaron que la planta de palma es más productiva y sustentable cuando es producida en sistemas agroforestales en comparación con el sistema tradicional de monocultivo.
Así lo anunció la empresa brasileña de productos de belleza y cuidado personal a través de un comunicado. Conscientes de que la producción de la planta de palma se asocia históricamente al monocultivo, responsable de la deforestación de selvas tropicales, la pérdida de la biodiversidad, la contaminación por la emisión de gases de efecto invernadero y la contaminación del suelo por el uso de agrotóxicos, explicaron que decidieron emprender la investigación de más de 12 años en el norte de Brasil.
Cabe mencionar que el aceite de palma es el más usado en el mundo, y junto con sus derivados, un componente clave en la industria cosmética debido a sus funciones como agente estructurante, emoliente y tensoactivo.
Los resultados
Natura comprobó que es posible cultivar el aceite de palma de manera más sustentable. En contra de la creencia de que no se podría cultivar junto con otras especies, el sistemas agroforestales de palma (SAF Dendê ) “demostró tener buena productividad para mitigar los efectos del cambio climático”.
“El SAF Dendê también es rentable para el agricultor dado que permite la cosecha en simultáneo de diferentes especies además de la palma”, puntualizaron.
“El desarrollo sustentable no debe ser una alternativa, sino una solución cada vez más amplia y constante en toda nuestra cadena productiva”, afirmó Roseli Mello, Head Global de I&D de Natura.
Y agregó: “En nuestra visión para 2050, tenemos grandes ambiciones para generar impacto positivo, lo que implica un incansable trabajo de emprendedurismo e innovación. El SAF Dendê es la prueba de que innovar es esencial para ello”.
El proyecto
La iniciativa comenzó en 2008 con la plantación de 18 hectáreas de unidades demostrativas en el estado brasileño de Pará, en donde se intentó recrear el ambiente original de crecimiento de la palma: la selva.
Por eso, desde la empresa explicaron que las plantaciones se realizaron junto con otras plantas como mandioca, banana, pimienta, cacao, y maderas, entre otras. “Cuenta al momento con más de 60 hectáreas de plantaciones, y recibió una inversión de US$4,7 millones por parte de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), al momento en que integró el equipo el Centro Internacional de Investigación Agroforestal (ICRAF)”, detallaron.
Los racimos producidos por las áreas estudiadas en el proyecto ya vienen siendo incorporados a la cadena de palma de la región, de la cual Natura forma parte.
“Se está escalando el modelo de forma progresiva y ambiciosa para que supla toda la demanda de Natura y, a la vez, sirva de referencia como una solución sustentable para la cadena productiva de palma en otras regiones”, concluyó Roseli Mello.