Los residuos electrónicos equivalen a al peso de 24.000 grandes aviones

Cada año, en las casas se desechan alrededor de 14 millones de toneladas de residuos electrónicos, un peso equivalente al de 24.000 grandes aviones de pasajeros, suficientes para formar una línea entre Londres y Helsinki.

Estos datos fueron revelados este jueves por el Foro de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (WEEE, por sus siglas en inglés), con sede en Bruselas, en el marco del Día Internacional de los Residuos Electrónicos.

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El informe Global E-waste Monitor 2024 subraya la alarmante cantidad de residuos electrónicos que acaban en la basura doméstica, un cuarto del total, lo que equivale a perder miles de millones de dólares en materiales valiosos como cobre, oro, plásticos y vidrio. Estos son fundamentales para la fabricación de nuevos productos electrónicos y eléctricos, pero gran parte de ellos se pierden debido a una inadecuada recolección y gestión de los dispositivos desechados.

Pascal Leroy, director general del WEEE Forum, advirtió sobre la creciente presencia de pequeños aparatos electrónicos en la vida cotidiana, desde teléfonos móviles hasta juguetes y videoconsolas. “Los componentes electrónicos están por todas partes”, afirmó, y destacó que los cigarrillos electrónicos desechados en 2022 contenían suficiente litio para alimentar 15.000 autos eléctricos.

Celulares como residuos electrónicos

El informe también revela preocupantes cifras: en Europa, los hogares acumulan unos 700 millones de celulares que ya no usan o que no funcionan, en promedio dos por hogar. Esto se debe a la preocupación por los datos personales almacenados en ellos o al deseo de recuperar parte de su valor. Además, una encuesta indicó que cada hogar europeo posee alrededor de 74 productos electrónicos, desde teléfonos hasta herramientas eléctricas, muchos de los cuales no son reciclados adecuadamente.

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El reciclaje de residuos electrónicos es clave para reducir el impacto ambiental. Según el WEEE Forum, la gestión adecuada de estos residuos reduce 93.000 millones de kilogramos de dióxido de carbono al año, equivalente a las emisiones de más de 20 millones de automóviles. Asimismo, evita la liberación de sustancias tóxicas como el plomo y el cadmio al medio ambiente.

Con el 80% de la población mundial poseyendo un teléfono móvil, las organizaciones del WEEE Forum hacen un llamado urgente para promover el reciclaje responsable, instando a los consumidores a garantizar la correcta recolección de dispositivos en desuso y minimizar la creciente escasez de recursos naturales.