Investigadores argentinos crearon un «laboratorio virtual» gratuito para entrenar la mente

El deterioro cognitivo es uno de los mayores retos que enfrentan las sociedades a medida que la población mundial envejece. Se estima que a nivel global más de 55 millones de personas viven con algún grado de demencia (esto es, alteraciones en la cognición, la memoria y el comportamiento) y se prevé que este número alcanzará los 139 millones para 2050, según proyecciones de la Federación Internacional de Asociaciones de Alzheimer y Demencia (ADI por sus siglas en inglés).

“Mantener la mente activa y desafiada resulta relevante a lo largo de toda la vida, porque así generamos redes neuronales que si no se usan, se pierden”, afirma la doctora en Neuropsicología Leticia Vivas, integrante de la Asociación Argentina de Ciencias del Comportamiento (AACC).

Para esto, Vivas, junto a un equipo del Instituto de Psicología Básica, Aplicada y Tecnología (IPSIBAT- Universidad Nacional de Mar Del Plata/Conicet), desarrolló la plataforma Labpsi, un laboratorio web interactivo, lúdico y dinámico, de acceso libre y gratuito, con actividades destinadas a la estimulación de diversas funciones cognitivas.

En la actualidad, el sitio contiene más de 100 ejercicios para ejercitar funciones cognitivas como la atención, la percepción, la memoria, el lenguaje, resolución de problemas, toma de decisiones, y la cognición social (procesos mentales que nos permiten interpretar las intenciones, emociones y comportamientos de otras personas).

Estructurado como un videojuego, el portal ofrece dos opciones: entrenamiento cognitivo para estudiantes y para la comunidad en general. En cada una de estas versiones, cuenta con consignas diferentes (ejercicios para estimular la memoria, la atención o la creatividad en la resolución de problemas), con distintos niveles de dificultad señalizados por colores: verde, amarillo, naranja y rojo. “La idea es que pueda ser usado por personas con y sin deterioro cognitivo, y también por personas mayores que no tienen problemas cognitivos y buscan ejercitar su mente”, destaca Vivas.

De la universidad a la comunidad

Al tratarse de una plataforma web de acceso gratuito, resulta útil para las personas que por diversos motivos no pueden asistir a espacios de estimulación cognitiva presencial y también sirve como complemento para continuar con la estimulación en el domicilio.

El desarrollo fue presentado por la investigadora durante la XX Reunión Nacional y el IX Encuentro Internacional de la AACC, realizada en Córdoba en septiembre, pero sus orígenes se remontan a una década atrás, cuando Vivas junto al el equipo docente de las cátedras de Teorías del Aprendizaje y Psicología Cognitiva en la Universidad de Mar del Plata comenzaron a diseñar una herramienta para que estudiantes pudieran practicar los conceptos trabajados en clase. Luego, gracias a financiamiento internacional, crearon la primera versión digital de la plataforma.

Con el impulso del financiamiento y casi como un presagio de lo que vendría con la pandemia del Covid, en el 2019 decidieron abrir el espacio virtual a la comunidad. Se sumaron ejercicios cognitivos con foco en las personas mayores, proponiéndoles desafíos para la memoria, atención, percepción y resolución de problemas, entre otros.

Para el 2020, ya en contexto de pandemia, comenzaron a recibir pedidos de ONGs que atienden a personas con deterioro cognitivo y demencia y necesitaban digitalizar sus actividades de estimulación para continuar los tratamientos.

Una herramienta construida con los usuarios

Entre el 2020 y el 2021 el equipo de investigación trabajó junto al Centro Integral de la Memoria Gama, una ONG que atiende a personas con deterioro cognitivo y demencia en Mar del Plata. Se hicieron pruebas de usabilidad midiendo el tiempo utilizado para entrar al sitio, qué errores se repetían, y con esa información se rediseñó el portal web.

“Priorizamos que sea de fácil acceso, sin necesidad de loguearse o identificarse y adaptada a los celulares. Por esta razón se está usando en muchas instituciones no sólo en Argentina sino en toda Latinoamérica”, comenta Vivas.

En 2022 el equipo obtuvo un subsidio del ex Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación dirigido a proyectos de tecnologías para la inclusión social. Esos fondos sirvieron para rediseñar la plataforma, tomando como base los aportes de las personas mayores y sus necesidades.

Para la neuropsicóloga, la interacción con profesionales de distintas áreas permitió el intercambio de miradas y experiencias, pero el contacto con los usuarios y usuarias finales fue lo más gratificante. “Es en ese momento cuando comprobamos si efectivamente nuestro trabajo resultó útil, agradable, sencillo o si tenemos cuestiones para ajustar”, señaló

El próximo paso: una app sin conexión a internet

Actualmente, el equipo de Labpsi está trabajando en mejorar la usabilidad y accesibilidad de la plataforma, y al mismo tiempo desarrollando una aplicación “liviana” que se pueda usar desde el celular sin ocupar mucha memoria, e incluso sin necesidad de conexión a internet.

Además, continúan sumando nuevos ejercicios y consignas. “Ampliamos la información sobre las funciones cognitivas que ejercita cada desafío y agregamos uno en el que se trata el tema de los factores de riesgo para la demencia”, describe Vivas.

Por otra parte, los investigadores están terminando una prueba piloto con 20 adultos mayores con deterioro cognitivo leve. Diez realizaron la actividad en forma presencial en el centro de jubilados y otras diez lo hicieron desde su domicilio.

“Descubrimos que fue un poco más difícil para quienes trabajaron desde su casa y no contaron con ayuda. Eso nos da nuevas pistas para seguir mejorando la herramienta”, destaca la investigadora.

La idea a futuro es desarrollar un modelo de negocios que permita que esta herramienta continúe siendo gratuita para los usuarios. Estos avances van en línea con el campo interdisciplinario denominado “Age-Tech” (o gerontotecnología), un enfoque que aplica la tecnología al desarrollo de productos, servicios y entornos que mejoren la salud, el bienestar y la calidad de vida de las personas mayores, promoviendo la autonomía y el envejecimiento activo.

Hábitos para prevenir el deterioro cognitivo

Aunque la edad es el factor de riesgo de demencia más conocido, la enfermedad no es una consecuencia inevitable del envejecimiento. Además, la demencia no afecta exclusivamente a las personas mayores. En un 9% de los casos, los síntomas aparecen antes de los 65 años, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Frente a la imposibilidad de detener el reloj biológico, sí es factible cambiar ciertos hábitos para reducir el riesgo de demencia. Existe creciente evidencia científica sobre 14 factores de riesgo potencialmente modificables que, de ser tenidos en cuenta, podrían prevenir o retrasar hasta el 45% de los casos de demencia.

Estos factores son: inactividad física; fumar; consumo excesivo de alcohol; contaminación del aire; lesión en la cabeza; contacto social poco frecuente; niveles bajos de educación; obesidad; hipertensión; diabetes, depresión; discapacidad auditiva; pérdida de visión no tratada y niveles elevados de LDL (colesterol “malo”).

“La demencia no tiene por qué ser parte inevitable del envejecimiento. Mantener hábitos saludables, una mente activa y conectada mediante vínculos sociales es esencial para prevenir el deterioro cognitivo”, sostiene Vivas y destaca que “la ciencia está avanzando en este sentido, y en el difícil contexto que atraviesa la investigación científica y particularmente las ciencias sociales en Argentina, es necesario sensibilizar sobre la importancia de invertir en la investigación local que aporta soluciones a los problemas de la comunidad”.