Hallaron una roca en Marte que tiene marcas de posible vida microbiana
Se llama Cheyava Falls y captó la atención de los científicos de la NASA por una razón muy especial: sus marcas.
El rover Perseverance aterrizó en Marte en el cráter Jezero, una ubicación elegida por su historial geológico: en el pasado, un río desembocaba en un lago marciano en esa área. La roca se llama Cheyava Falls y captó la atención de los científicos de la NASA por sus marcas.
A pesar de que estos cuerpos de agua se secaron hace mucho tiempo, la NASA esperaba que el rover encontrara evidencias de vida pasada relacionadas con la presencia de agua líquida.
Hasta ahora, Perseverance descubrió una variedad de minerales que confirman la existencia de agua en el cráter Jezero, pero aún no se hallaron restos de posibles formas de vida.
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Hallaron una roca en Marte con posible vida microbiana
Cuando muchos habían perdido la esperanza, el rover Perseverance sorprendió de nuevo. Esta vez, descubrió una roca de un metro de diámetro, llamada “Cheyava Falls”, que captó la atención de los científicos por una razón muy especial: sus marcas.
Estas marcas, blancas y rodeadas de un halo negro, recuerdan a manchas de leopardo y presentan una estructura milimétrica. Podrían ser la clave que la NASA estuvo buscando durante años para determinar si hubo vida en Marte.
El interés radica en que en la Tierra, estas marcas se asocian con actividad microbiana fosilizada, ya que resultan de reacciones químicas que podrían haber sido el sustento de antiguos microorganismos.
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La roca se encontró en Neretva Vallis, un antiguo valle fluvial donde la geología ha sido moldeada por corrientes de agua pasadas. Se sabe que esta área estuvo bañada por agua hace miles de millones de años, y los instrumentos del rover detectaron compuestos orgánicos en la muestra.
A pesar de este hallazgo, los científicos de la NASA mantienen cautela. También se identificaron sulfatos y cristales de olivino en la roca, un mineral que se forma a partir del magma. Las marcas podrían haber sido producidas por una reacción química abiótica a temperaturas incompatibles con la vida, derivadas de los cristales de olivino y los sulfatos.
Dado que Perseverance no cuenta con las herramientas para resolver este enigma por completo, ha almacenado un fragmento de la roca en un tubo para su análisis futuro en la Tierra, si es que alguien puede recogerlo, ya que la misión ahora depende del sector privado.
Es la vigésimo segunda muestra recogida por Perseverance en Marte, y tiene el potencial de ser la más significativa si se confirma que sus marcas son el resultado de actividad microbiana antigua en el planeta rojo.
