Hallaron una cápsula del tiempo de hace 200 años, ¿cómo se fabrican y se preservan?

En Estados Unidos, abrieron una cápsula del tiempo de más de 200 años de antigüedad y se llevaron una sorpresa. La caja de plomo había sido descubierta en mayo de este año, pero no tenía nada relevante.

Con una emoción exultante, en West Point, se abrió la caja de plomo que había sido encontrada en una restauración de un monumento en honor al héroe de la Guerra Revolucionaria Thaddeus Kosciuszko. Sin embargo, el resultado no fue el que se esperaba.

En la Academia Militar se esperaba ver reliquias militares o documentos históricos. En cambio, dejaron escapar un soplo de desilusión después de que los expertos abrieran la parte superior y apuntaran una cámara hacia el interior para mostrar solo una capa de sedimento en el fondo. Pero, una de las preguntas que surge es cómo se fabrican y se preservan para que no sucedan estas cosas.

Cabe destacar que las cápsulas del tiempo son contenedores diseñados para almacenar objetos, documentos u otros elementos con la intención de que sean descubiertos en el futuro. Pueden tener propósitos históricos, culturales o simplemente como una forma de conectarse con generaciones futuras. 

Fabricación de las cápsulas del tiempo

1. Elección del material: el material utilizado para fabricar la cápsula del tiempo es crucial para su durabilidad. Se suelen utilizar metales resistentes a la corrosión, como acero inoxidable o aleaciones especiales.

2. Diseño y construcción: la cápsula se diseña considerando el tamaño y la forma de los objetos que se van a almacenar. Por lo general, son herméticas para evitar la entrada de humedad y otros elementos que podrían dañar su contenido.

3. Sellado hermético: se utiliza soldadura o técnicas de sellado especializadas para asegurar que la cápsula sea completamente hermética y proteja su contenido del paso del tiempo y las condiciones ambientales.

4. Aislamiento: en algunos casos, se puede incluir algún tipo de material aislante en el interior de la cápsula para ayudar a controlar la humedad y la temperatura, lo que puede ser crucial para la preservación de objetos delicados.

Preservación de las cápsulas del tiempo

1. Entorno controlado: si es posible, las cápsulas del tiempo se almacenan en lugares controlados, como museos, bibliotecas o archivos, donde se pueden mantener las condiciones adecuadas de humedad, temperatura y luz para preservar los objetos en su interior.

2. Protección contra la corrosión: los materiales utilizados en la fabricación de la cápsula deben ser resistentes a la corrosión y al deterioro con el tiempo. Sin embargo, con el tiempo, la corrosión aún puede ser un problema. Se pueden aplicar recubrimientos protectores o tecnologías anticorrosión para prolongar la vida útil de la cápsula.

3. Documentación detallada: es importante incluir documentación detallada sobre el contenido de la cápsula, el contexto histórico y las instrucciones para su apertura. Esto asegura que las generaciones futuras comprendan el propósito y el significado de la cápsula.

4. Mantenimiento y reubicación: si es necesario, las cápsulas del tiempo deben ser revisadas periódicamente para asegurarse de que no estén sufriendo daños. En algunos casos, las cápsulas pueden ser reubicadas si se considera que su ubicación actual ya no es adecuada para su preservación.

En general, la fabricación y preservación de cápsulas del tiempo requieren de un enfoque cuidadoso y consideración de factores tecnológicos, ambientales e históricos para asegurar que el contenido se mantenga intacto y significativo para las generaciones futuras.