PUBLICIDAD
Concientización

Día Mundial del Agua: el 26% del mundo carece de agua potable y el cambio climático agrava este bien preciado

“Se espera que estas cifras vayan en aumento debido a la aceleración del cambio climático y al crecimiento de la población”, estimaron desde la ONU.

Este miércoles 22 de marzo es el Día Mundial del Agua, una jornada promovida desde 1993 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con el objetivo de concientizar sobre la “crisis mundial que sufren 2000 millones de personas” al vivir sin acceso a agua potable

“Se espera que estas cifras vayan en aumento debido a la aceleración del cambio climático y al crecimiento de la población”, estimaron desde el organismo.

Ahora, un nuevo reporte dado a conocer el martes, en la víspera de la primera Conferencia sobre el Agua de Naciones Unidas en más de 45 años, asegura que el 26% de la población mundial no tiene acceso a agua potable y que el 46% carece de instalaciones básicas de saneamiento.

El Informe Mundial de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de Recursos Hídricos 2023 presentó un oscuro panorama sobre la enorme brecha que se necesita cubrir para cumplir con los objetivos de la ONU de garantizar el acceso de todas las personas a agua limpia y saneamiento para el año 2030.

Richard Connor, director editorial del reporte, dijo en conferencia de prensa que el costo estimado para alcanzar los objetivos es de entre 600.000 millones y un billón de dólares al año.

Pero Connor señaló que es igualmente importante forjar alianzas con inversionistas, financieros, gobiernos y comunidades de cambio climático para garantizar que se inviertan los fondos de formas que sean sostenibles para el medio ambiente y capaces de proporcionar agua a las 2.000 millones de personas que no tienen acceso, y saneamiento para 3.600 millones de personas necesitadas.

//Mirá también: Lanzan un mapa interactivo mundial sobre el agua, ¿cómo funciona?

Según el reporte, el uso del agua se ha incrementado a nivel mundial en alrededor del 1% anual durante los últimos 40 años, “y se tiene previsto que aumente en una proporción similar hasta 2050, impulsado por una combinación de crecimiento demográfico, desarrollo socioeconómico y cambios en los patrones de consumo”.

Connor señaló que el aumento actual en la demanda está ocurriendo en países en vías de desarrollo y en economías emergentes, en donde es impulsado por el crecimiento industrial y particularmente por el rápido incremento en la población de las ciudades. Es en estas zonas urbanas “en donde se está registrando un verdadero incremento en la demanda”, afirmó.

Debido a que la agricultura utiliza el 70% del agua a nivel mundial, el riego de las cosechas necesita ser más eficiente, como el riego por goteo que usan algunos países, el cual ahorra mucha agua, indicó Connor. “Eso permite que haya agua disponible para las ciudades”, comentó.

Como resultado del cambio climático, según el reporte, “la escasez estacional de agua aumentará en regiones en donde actualmente es abundante, como el centro de África, el este de Asia y partes de Sudamérica, y empeorará en zonas en donde el agua ya escasea, como en Medio Oriente y el Sahara africano”.

El agua y el cambio climático

De acuerdo con la ONU, solo el 0,5% del agua para consumo del planeta es dulce y utilizable, y el cambio climático está afectando peligrosamente a este suministro. 

“Desde patrones de precipitación impredecibles hasta la reducción de las capas de hielo, pasando por el aumento del nivel del mar, inundaciones y sequías: la mayor parte de los impactos del cambio climático se reducen al agua”, explicaron.

Y sumaron: “El cambio climático está acelerando tanto la escasez de agua como los peligros relacionados con este recurso (como inundaciones y sequías), ya que el aumento de las temperaturas altera los patrones de precipitación y todo el ciclo del agua”. 

En ese tono, a futuro “se prevé que las temperaturas más altas del agua y las inundaciones y sequías más frecuentes agraven muchas formas de contaminación del agua, desde sedimentos hasta patógenos y pesticidas”.

Una consecuencia directa de esta crisis es la agravación de los desastres naturales, especialmente aquellos relacionados con inundaciones que, desde el año 2000, han aumentado un 134% en comparación con las dos décadas anteriores. 

Fuente: con información de AP

PUBLICIDAD
Fecha de publicación: 22/03, 2:02 pm