Una veintena de ambientalistas peruanos protestaron en la sede de Repsol, luego del aniversario del derrame de crudo que una refinería operada por esta empresa ocasionó sobre las costas peruanas. Estos remarcaron que fue un “ecocidio” del cual la petrolera sigue sin hacerse cargo. Los activistas, coordinados por Ecologistas en Acción, Asociación Entrepueblos, el Colectivo de Peruanxs en Madrid, el Colectivo Kunturkanki, Fridays for Future Madrid, Greenpeace y el Observatorio de Multinacionales en América Latina, han llevado a cabo una acción artística para manifestar su rechazo hacia la “impunidad” de Repsol. Los manifestantes le exigen a la empresa que se responsabilice de los daños del desastre ecológico que puede durar «entre seis y diez años”. Vestidos con monos blancos y botas, varias decenas de personas desplegaron frente a la sede de la multinacional en Madrid una alfombra negra que simulaba petróleo, así como una red con peces manchados por crudo, un barril y varias pancartas. Entre los principales mensajes de los activistas aparecían lemas como “Repsol hazte cargo”, y recordaban a las «más de 50.000 personas afectadas» y las cerca de 11.000 hectáreas contaminadas. //Mirá también: Según cálculos, las grandes petroleras duplicaron sus ganancias durante 2022 y batieron récords Cabe recordar que el pasado 15 de enero se derramaron 11.900 barriles de crudo en la refinería de La Pampilla, operada por Repsol, y desde Ecologistas en Acción aseguran que la empresa “ha invertido más dinero en campañas de publicidad para limpiar su imagen en Perú que en las indemnizaciones” para compensar por los impactos económicos. “Estamos ante una empresa ecocida que ha provocado el mayor vertido de petróleo en la reciente historia de Perú”, aclaró Tom Kucharz, de Ecologistas en Acción, quien agregó que “un año después de ese ecocidio, Repsol no ha cumplido con sus obligaciones”. //Mirá también: Un tribunal de Estados Unidos falló a favor de YPF en una demanda ambiental millonaria Por ejemplo, señala que “15 días después del vertido, Repsol tenía que elaborar un inventario de todo lo que había ocurrido, algo que nunca hizo y, por lo tanto, ha incumplido las legislaciones nacionales de Perú y las normas internacionales de protección del medioambiente”. Además, Kucharz lamentó la crisis política que vive Perú lo que “ha favorecido la impunidad de Repsol”, pues “al principio sí hubo disposición del Gobierno peruano de presentar una querella penal”, pero “a fecha de hoy no se está tramitando”. Así, los activistas han coreado reivindicaciones como “Reparación y justicia” o “Repsol, limpia tu mierda”. “Este tipo de vertidos provocados por Repsol contraviene todos los objetivos de frenar la pérdida de biodiversidad de proteger los ecosistemas marinos, de luchar también contra el cambio climático y por supuesto contraviene los objetivos de desarrollo sostenible porque hay una población de 50.000 personas, por lo menos, que se ven afectados en su derecho a la educación, al trabajo, a los servicios públicos, y a un medioambiente limpio”, concluyó Kucharz. Fuente: EFE
