Día Mundial del Medio Ambiente: 3 proyectos innovadores que impulsa el Conicet para conservar la biodiversidad
Especialistas argentinos buscan proteger especies fundamentales para el control de plagas, la producción de alimentos y el sostenimiento de la fertilidad de los suelos.
En el Día Mundial del Medioambiente, científicos del CONICET destacan tres proyectos innovadores que buscan proteger especies clave para la salud de los ecosistemas, el control de plagas, la producción de alimentos y la fertilidad de los suelos. Estas iniciativas, que involucran a ciudadanos de todo el país, representan un avance significativo en la conservación de la biodiversidad.
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El Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (INIBIOMA, CONICET-UNCo) lidera estos proyectos, que no solo generan conocimiento científico sino que también promueven la participación comunitaria en la protección del medioambiente. La participación ciudadana en estas investigaciones permite superar las limitaciones de los estudios ecológicos tradicionales.
1) Proyecto Vaquitas
Liderado por la investigadora Victoria Werenkraut, este proyecto busca establecer un mapa de la distribución de las vaquitas de San Antonio en Argentina. Estas especies son fundamentales para el control de plagas debido a su rol depredador en los ecosistemas.
La pérdida de hábitat y la invasión de especies exóticas disminuyen su biodiversidad, pero la colaboración ciudadana en la recopilación de datos permite un monitoreo más efectivo y la formulación de estrategias de conservación.
2) “Vi Un Abejorro”
Encabezado por Carolina Morales, el proyecto “Vi Un Abejorro” se enfoca en la conservación del Bombus dahlbomii, una especie nativa en peligro de extinción. A través de la ciencia ciudadana, se actualizan los registros de distribución de esta especie, desplazada por abejorros exóticos. Este esfuerzo es crucial para la producción de alimentos y la salud del ecosistema, subrayando la importancia de los polinizadores nativos.
3) Jardines amigables con la naturaleza
Luciana Elizalde y Sergio Lambertucci lideran este proyecto que evalúa cómo aves e insectos utilizan jardines urbanos, contribuyendo a la conservación de especies y la fertilidad del suelo. Los ciudadanos registran avistamientos de especies como el pájaro carpintero gigante y el abejorro Bombus dahlbomii, lo que permite comprender mejor la función de los jardines en la conservación de la fauna y el bienestar humano.
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Estos proyectos demuestran cómo la colaboración entre científicos y ciudadanos puede generar un impacto significativo en la conservación de la biodiversidad. La ciencia ciudadana no solo permite actualizar y expandir los conocimientos ecológicos, sino que también fomenta un mayor involucramiento comunitario en la protección del medioambiente.
A su vez, los investigadores del CONICET destacan la importancia de estos esfuerzos colectivos para enfrentar los desafíos ambientales globales y locales, subrayando la necesidad de acciones concretas y diarias para preservar nuestro planeta.