Petrobras insiste en perforar cerca de la desembocadura del río Amazonas en 2024
Se trata de un área clave donde la empresa estima nuevas reservas de alrededor de 11 mil millones de barriles.
La petrolera estatal brasileña Petrobras insiste en realizar su primera perforación cerca de la desembocadura del río Amazonas en 2024. Así lo afirmó este miércoles su presidente ejecutivo, que está a la espera de la autorización de la agencia local de protección del medio ambiente para proceder.
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“Estamos a medio camino de obtener la licencia”, dijo el presidente de la empresa, Jean Paul Prates ante periodistas.
Cabe recordar que a finales de mayo de 2023, Petrobras presentó al Instituto Brasileño de Medio Ambiente (Ibama), una solicitud de reconsideración de la licencia ambiental para la prospección. Ibama, que antes había rechazado la propuesta de Petrobras para perforar un pozo en la región, debe ahora tomar una decisión sobre la apelación del gigante petrolero a principios de 2024.
Cabe destacar que Brasil registró varios avances ambientales en el primer año del tercer mandato de Luiz Inácio Lula da Silva, como una importante caída en la deforestación de la Amazonía promesa de campaña. Sin embargo, los ecologistas acusan al Gobierno de ser contradictorio por seguir apostando en aumentar y extender la producción de petróleo.
Por qué es un área clave
La cuenca de la desembocadura del Amazonas tiene una extensión de 350,000 km2, abarcando desde la bahía de Marajó, en el estado de Pará, hasta la frontera con la Guayana Francesa.
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Esta cuenca ya había sido objeto de interés en la industria petrolera en años anteriores. El primer pozo fue perforado en la región en 1970 sin éxito en la búsqueda de petróleo. A pesar de descubrimientos posteriores en años subsiguientes, las dificultades logísticas llevaron a que la cuenca fuera temporalmente descartada, sobre todo porque Petrobras, en ese momento, centraba sus esfuerzos en otras áreas de exploración.
El interés por el bloque 59 resurgió en abril de 2014 cuando BP Energy do Brasil, la empresa originalmente a cargo del proyecto, presentó una solicitud. En diciembre de 2020, los derechos de explotación petrolera en dicho bloque fueron transferidos a Petrobras.
El renovado interés de Petrobras en la región se debió al descubrimiento de petróleo en la Margen Ecuatorial de Guayana, donde se estiman nuevas reservas de alrededor de 11 mil millones de barriles.
En la actualidad, Petrobras está buscando la licencia para llevar a cabo la verificación de la presencia de petróleo en alta mar en el bloque FZA-M-59. Esto implicaría la perforación de un solo pozo durante un periodo de cinco meses. Según la empresa petrolera, “en caso de confirmarse la viabilidad comercial del petróleo en el bloque exploratorio, será necesario obtener un nuevo proceso de licenciamiento ambiental del Ibama para permitir que el Bloque FZA-M-59 se convierta en un campo productor.
