El cambio climático provoca que ya sean más de 5000 las especies amenazadas
Por ejemplo, el oso polar o el rinoceronte negro podrían extinguirse si no se hace algo que pueda evitar la amenaza a la que están sometidas por el cambio climático.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) publicó la Lista Roja de Especies Amenazadas, que indica que ya son 5200 las especies animales que se encuentran en peligro de extinción debido al cambio climático.
Este informe es el más completo a nivel mundial, ya que recoge toda la información relacionada sobre las diferentes especies animales y de plantas de la Tierra.
Teniendo en cuenta este informe, se puede decir que esta es una de las muchas consecuencias negativas que el cambio climático tiene sobre el planeta, además del calentamiento del agua de los mares y un aumento de la sequía en distintos puntos del mundo.
El oso polar y el rinoceronte negro son las dos especies que se encuentran más amenazadas. De hecho, podrían incluso llegar a desaparecer si no se ponen medidas que reviertan esta situación. En España son casi 200 las especies que se encuentran en esta lista y destacan, sobre todo, el oso pardo y el lince ibérico.
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¿Por qué el cambio climático es una amenaza para las especies animales?
El cambio climático es una amenaza significativa para las especies animales debido a los efectos adversos que provoca en los ecosistemas y en los patrones climáticos.
A medida que aumenta la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera debido a actividades humanas como la quema de combustibles fósiles y la deforestación, se produce un calentamiento global que tiene impactos profundos en el medioambiente como, por ejemplo, estos:
1. Pérdida de hábitat: a medida que las temperaturas aumentan, los hábitats naturales de muchas especies se vuelven inhóspitos o cambian drásticamente. Los polos, las regiones montañosas y las zonas costeras son particularmente vulnerables. Esto puede llevar a la pérdida de lugares de reproducción, alimentación y refugio para las especies, lo que resulta en la disminución de sus poblaciones.
2. Cambio en los patrones de migración y reproducción: muchas especies tienen ciclos de vida y patrones de migración que están sincronizados con las estaciones y las condiciones climáticas. El cambio climático puede alterar estos patrones, lo que puede resultar en desajustes entre las fuentes de alimento, los lugares de reproducción y los momentos adecuados para migrar, lo que dificulta la supervivencia y reproducción exitosa.
3. Aumento en eventos climáticos extremos: el cambio climático está relacionado con un aumento en la frecuencia y la intensidad de eventos climáticos extremos como sequías, tormentas más intensas, inundaciones y olas de calor. Estos eventos pueden tener efectos devastadores en las poblaciones animales, destruyendo hábitats, disminuyendo las fuentes de alimento y provocando una mayor mortalidad.
4. Impacto en los ecosistemas acuáticos: el calentamiento global también afecta los ecosistemas acuáticos, como océanos, ríos y lagos. El aumento de las temperaturas puede alterar los patrones de circulación oceánica y causar la acidificación de los océanos, lo que afecta a los organismos marinos, como corales y moluscos, y a las especies que dependen de ellos para sobrevivir.
5. Competencia y propagación de especies invasoras: el cambio climático puede permitir que especies invasoras se adapten a nuevas áreas y se desplacen hacia hábitats donde antes no podían sobrevivir. Esto puede llevar a la competencia con especies nativas por recursos y aumentar la presión sobre las especies locales.
6. Aumento del riesgo de extinción: en general, estos factores combinados pueden aumentar el riesgo de extinción para muchas especies animales. Aquellas especies que ya estén en peligro o tengan poblaciones pequeñas y aisladas serán especialmente vulnerables a los impactos del cambio climático.
Para abordar esta amenaza, es importante tomar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, proteger y restaurar hábitats, implementar estrategias de conservación y promover la sensibilización pública sobre la importancia de preservar la biodiversidad en un mundo afectado por el cambio climático.