Gobiernos y empresas, en vilo: la crisis del coronavirus obliga a replantear las prioridades

 Una recesión prolongada; alto nivel de desempleo; nuevo brote de enfermedades infecciosas y el proteccionismo, son las principales preocupaciones de los grupos empresarios más poderosos de la Argentina y del resto del mundo.

La lista de temas que, a corto plazo, incomodan a las empresas locales y extranjeras también incluye una crisis climática; turbulencias geopolíticas; creciente desigualdad; tensiones en la salud mental de las personas; brechas en la gobernanza tecnológica y sistemas de salud bajo presión continua.

Por lo menos así surge de un informe elaborado por el Foro Económico Mundial bajo el título de “Perspectivas de riesgos del Covid‑19: Un mapeo preliminar y sus implicaciones”.

El documento fue redactado a partir de las opiniones de 350 profesionales de riesgos de alto rango que fueron contactados por las consultoras Marsh & McLennan y Zurich Insurance Group, tanto en Argentina como en el resto del mundo.

A todos se les pidió que evaluaran los próximos 18 meses y clasificaran sus mayores preocupaciones en términos de probabilidad e impacto para el mundo y para los negocios.

En ese marco, surge que una de las principales preocupaciones es la falta de preparación para las repercusiones de los riesgos ambientales, sociales y tecnológicos de amplio alcance que dejará el combate contra la pandemia del coronavirus.

Según el informe, dos tercios de los encuestados identificaron a la “recesión mundial prolongada” como una de las principales preocupaciones de las empresas. La mitad hizo referencia a las quiebras, el fracaso de las industrias para recuperarse y una interrupción de las cadenas de pagos como efectos negativos cruciales.

Los ataques cibernéticos y el fraude de datos también son amenazas importantes para la mitad de los consultados, teniendo en cuenta el acelerado uso de los medios virtuales durante ese período. 

Otro grupo de empresarios hizo referencia al colapso de la infraestructura y las redes de IT como de gran preocupación, además de las turbulencias geopolíticas y las mayores restricciones sobre el movimiento de personas y bienes.

Causas y consecuencias

Al respecto, Saadia Zahidi, directora ejecutiva del Foro Económico Mundial, advierte que el coronavirus ha desencadenado una crisis económica con implicaciones de largo alcance que, además de gestionar el impacto inmediato, obliga a abordar los riesgos conocidos emergentes y crear resiliencia frente a lo desconocido”.

Y entiende que el escenario abre una oportunidad para “hacer las cosas de manera diferente y reconstruir mejores economías que sean más sostenibles, resilientes e inclusivas,”.

En tanto, Peter Giger, group Chief Risk Officer, de Zurich Insurance Group, advierte sobre la necesidad de mantener los riesgos clave en el foco como el cambio climático.

“A medida que reiniciamos nuestras economías, los cambios en las prácticas laborales y en la predisposición hacia los viajes, los desplazamientos y el consumo apuntan a nuevas formas de lograr un futuro con menos carbono y más sostenible”, estima.

Del mismo modo, John Doyle, presidente y CEO de Marsh, agrega que la pandemia tendrá efectos duraderos, ya que el elevado desempleo afecta a la confianza de los consumidores, la desigualdad y el bienestar, y pone en peligro la eficacia de los sistemas de protección social. “Las decisiones que se tomen ahora determinarán la forma en que se materialicen esos riesgos u oportunidades”, señala.

Si bien los riesgos y las preocupaciones son grandes, los ejecutivos consultados en la encuesta se muestran esperanzados en que se pueda producir una “recuperación verde” y el surgimiento de sociedades más “inclusivas e igualitarias”.

Si esto ocurre, dicen los empresarios, existe la oportunidad de incorporar una mayor igualdad social y sostenibilidad en la recuperación, abriendo una nueva era de prosperidad en el largo plazo. 

Siempre que se eviten los coletazos que este escenario puede tener en el medio ambiente, tal como se advirtió ya en el Informe de Riesgos Globales 2020, donde se calificaron a los riesgos ambientales como uno de los cinco principales riesgos globales para la próxima década.

Hora de actuar

El informe advierte que si no se termina con las divisiones sociales y no se impulsa un crecimiento económico sostenible, no habrá forma de abordar sistemáticamente amenazas como las crisis climáticas o de biodiversidad.

En ese sentido, el informe elaborado en enero pasado destaca la necesidad de detener las graves amenazas a los sistemas de clima, medio ambiente, salud pública y tecnología.

Antes de la llegada del coronavirus, el documento anticipaba para este año mayores divisiones nacionales e internacionales y desaceleración económica. 

Entre más de 750 expertos mundiales y líderes de opinión consultados sobre las mayores preocupaciones en términos de probabilidad e impacto, el 78% dijo que espera que las “confrontaciones económicas” y la “polarización política interna” aumenten este año.

Un escenario que complicaría y mucho abordar desafíos urgentes como la crisis climática, la pérdida de biodiversidad y la disminución récord de especies. Y por eso se reclama que los responsables de la formulación de políticas igualen los objetivos para proteger la Tierra con los de impulsar las economías, y que las empresas eviten los riesgos de pérdidas futuras potencialmente desastrosas ajustando a objetivos basados ​​en la ciencia.

De hecho, los cinco principales riesgos mundiales en términos de probabilidad- detectados por este documento son todos ambientales:

• Eventos climáticos extremos (por ejemplo, inundaciones, tormentas).

• Fracaso de la mitigación y adaptación al cambio climático.

• Grandes desastres naturales (Terremoto, tsunami, erupción volcánica, tormentas geomagnéticas).

• Gran pérdida de biodiversidad y colapso del ecosistema.

• Daños y desastres ambientales causados por el hombre.

 “El panorama político está polarizado, el nivel del mar está aumentando y los incendios climáticos están ardiendo. Este es el año en que los líderes mundiales deben trabajar con todos los sectores de la sociedad para reparar y revitalizar nuestros sistemas de cooperación, no solo para un beneficio a corto plazo sino para abordar nuestros riesgos profundamente arraigados“, dijo Borge Brende , Presidente del Foro Económico Mundial. .

Para las generaciones más jóvenes, el estado del planeta es aún más alarmante ya  que casi el 90% de estos encuestados cree que las “olas de calor extremas”, la “destrucción de los ecosistemas” y la “salud afectada por la contaminación” se agravarán en 2020. También creen que el impacto de los riesgos ambientales para 2030 será más catastrófico y más probable.