Hidrógeno verde: el Gobierno lanza “operativo seducción” para atraer inversiones extranjeras
Con la convicción de que se trata de un sector que podrá impulsar el crecimiento de la economía argentina y el mayor ingreso de divisas, el Gobierno salió a promocionar el hidrógeno verde doméstico a nivel internacional.
El objetivo es sumar potenciales inversores extranjeros, con el discurso de que la Argentina se convertirá en uno de los mayores productores de hidrógeno verde del mundo en los próximos años.
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El vocero oficial de este discurso redactado en el seno de la alianza gobernante del Frente de Todos es Matías Kulfas, ministro de Desarrollo Productivo y quien viajó a Barcelona, España, para participar de la Conferencia de Hidrógeno Verde liderada por la Green Hydrogen Organization.
En ese contexto, el funcionario mantuvo encuentros con empresarios privados y funcionarios de varios gobiernos para analizar los avances en la adopción de estándares comunes de trazabilidad y certificación en hidrógeno verde y repasar los avances de las inversiones para producir y exportar desde Argentina.
La piedra fundamental de la estrategia del Gobierno para meterse en al elite global del hidrógeno verde pasa por resaltar la importancia de avanzar en el principio de la triple sustentabilidad macroeconómica, social y ambiental para el desarrollo productivo de este insumo en el país. Es decir, mostrar que la Argentina tiene la oportunidad de ser productor y proveedor a nivel mundial.
“Argentina puede ser un gran proveedor mundial de hidrógeno verde, el combustible del futuro. Esto abre un capítulo lleno de esperanzas y posibilidades para nuestras comunidades y su desarrollo”, destacó Kulfas al disertar en los encuentros “Hidrógeno verde en los mercados emergentes: maximizar el potencial y evitar obstáculos”.
El funcionario también formó parte del plenario principal, “Acción de gobierno para permitir una revolución de hidrógeno verde”, que fue liderado por la vicepresidenta tercera de España y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera Rodríguez.
En su exposición, aseguró que en el país están dadas las condiciones para la producción en escala que permitan generar estructuras de costos necesarias para viabilizar esta producción para su comercialización internacional.
“Nuestro país tiene capacidad tecnológica y productiva para llegar a 2030 produciendo cerca de 10 millones de toneladas de hidrógeno verde”, aseguró Kulfas, quien a la vez explicó que para que eso sea posible, “tenemos que estructurar una demanda internacional consistente, los mecanismos de financiamiento y de inversión directa”.
Según su visión, las autoridades nacionales creen en la importancia de desarrollar un marco de condiciones regulatorias adecuadas e impulsar capacitaciones, además de brindar incentivos al sector científico y tecnológico, y financiamiento a pequeñas y medianas empresas.
Vector energético
También hizo mención al trabajo que se está llevando adelante en conjunto con las provincias sobre la Estrategia Nacional del Hidrógeno 2022-2050 para facilitar las inversiones y promover el proyecto de ley de promoción del hidrógeno que anunció el presidente, Alberto Fernández.
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“Adoptamos una estrategia integral focalizada en la producción de hidrógeno como un nuevo vector energético de bajo impacto ambiental, que promueva la investigación, la creación de nuevas fuentes de trabajo y el desarrollo de su cadena de valor; con un régimen de promoción de 30 años para productores de bienes y servicios que alienten el crecimiento del sector”, señaló Kulfas.
Ante los más de 400 empresarios y funcionarios que participaron del encuentro, el ministro calificó a la Argentina como “una gran potencia” en términos de sus recursos renovables que simultáneamente cuenta con los dos mejores índices, solar y eólico, que hacen casi interminable el potencial renovable del país.
Y resaltó la potencialidad del sector respecto a las oportunidades para el país y el desarrollo de las comunidades, y la relevancia de sus logros para descarbonizar la estructura productiva, con un impacto muy positivo para luchar contra el cambio climático.
“Es fundamental que se transfiera tecnología a los países en desarrollo como el caso de la Argentina”, añadió a a la hora de identificar los factores que deben percibir las sociedades como beneficios concretos en términos de mayores empleos, mejoras de las infraestructuras, de salud y educación asociadas a inversiones de semejante envergadura.
“Debe existir una relación armónica con las comunidades, y un desarrollo de proveedores, que las pequeñas y medianas empresas del país puedan ser contratadas e integrarse a esta gran cadena global de valor del hidrógeno verde”, puntualizó.
Asimismo, destacó la importancia de trabajar en el principio de la triple sustentabilidad, macroeconómica, social y ambiental para el desarrollo productivo del hidrógeno verde.
Para Kuflas, se trata de un insumo que jugará un rol clave para lograr una balanza comercial superavitaria, sana y consistente; creadora de fuentes de trabajo y oportunidades para la región; integradora del tejido productivo y clave para un desarrollo deseable y sostenido.
Electromovilidad y ley de hidrógeno
En el mismo evento, el funcionario hizo mención al desarrollo de la electromovilidad como paso que acompaña la apuesta del Gobierno por el hidrógeno verde.
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En ese sentido, explicó a los presentes en el encuentro que está trabajando en un proyecto de ley que incentiva la fabricación de vehículos de cero contaminación y la demanda, a través de bonificaciones para reducir los costos de producción.
La iniciativa también promueve el desarrollo de esquemas de apoyo a industrias en las que el hidrógeno podría representar un vector de cambio a futuro y el aprovechamiento de las capacidades existentes en generación renovable nacional.
Además, el ministro anticipó la invitación al próximo Congreso Internacional del Hidrógeno Verde, “un hito de importancia en el proceso de desarrollo del sector en Argentina”, que se realizará el año próximo en la ciudad de Bariloche.
Con ese objetivo, se reunió con la vicepresidenta tercera de España y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera Rodríguez.
También mantuvo encuentro trilateral con el ex primer ministro de Australia y CEO de Gh2, Malcom Turnbull, y la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, para aunar esfuerzos para la adopción de estándares comunes de trazabilidad y certificación en Hidrógeno Verde.
Kulfas recibió además al presidente de Fortescue Future Industries, Andrew Forrest, con quien repasó el avance de las inversiones para producir y exportar hidrógeno verde desde Argentina.
El encuentro no fue uno más si se tiene en cuenta que el año pasado la empresa australiana hizo el anuncio de inversión internacional más importante para el país en lo que va del siglo, con una cifra que alcanza los u$s8.400 millones para la producción de hidrógeno verde a partir de energía eólica.
El proyecto, que es 100% exportador, va a generar por lo menos 15.000 puestos de trabajo directos y 50.000 empleos indirectos.
Pero al margen de destacar el potencial del llamado Proyecto “Pampas”, en Río Negro, el empresario remarcó la importancia de que se sancione la Ley de Hidrógeno para brinder un marco regulatorio al desarrollo de esta incipiente industria.
Para Forrest, una norma de ese tipo permitirá la definición de lineamientos para el desarrollo de esta nueva y generará las condiciones para colaborar con las ambiciones de descarbonización de la Argentina, la región y el mundo.
El pedido del ejecutivo australiano llega en momentos en los cuales el proyecto de su compañía se encuentra en una etapa de prefactibilidad que definirá su viabilidad a partir de la ejecución de los estudios de impacto ambiental y social en el marco de la Ley Provincial N° 3266, cuyo objetivo es resguardar los recursos naturales dentro de un esquema de desarrollo sustentable.
Transición energética
Otro de los encuentros que mantuvo Kuflas durante su viaje a Barcelona fue con autoridades y empresarios de la Confederación Foment del Treball Nacional que representa a industrias y empresas de Barcelona.
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Durante la reunión, el ministro explicó que en el marco del Plan Argentina Productiva 2030 también se avanza en el desarrollo de la economía verde para una transición ambiental justa.
Es decir, para reducir el impacto ambiental de la producción pero simultáneamente generando nuevos sectores productivos y puestos de trabajo.
“Un eje claro en esto es tener como vector de desarrollo a todas las industrias limpias porque el mundo se plantea seriamente la problemática del cambio climático y pensamos que esto hay que resolverlo con hechos concretos”, sostuvo.
En este sentido, explicó que el país pretende encarar acciones que permitan afrontar el problema del calentamiento global mediante una transición hacia energías renovables y la electromovilidad.
En ese encuentro, las compañías argentinas Infosis, Exactian Consulting, DEVP, Easycommerce Tech, Veritran, G&L Group, Unitech, lempert, Incluit, SDBL, Cloudspace, TGV, Clarika, Entornos Virtuales, Zentricx, Grupo Núcleo, Mambo y la española Imhoit, participaron de un networking con empresas locales.
El plenario también sirvió para promocionar las políticas oficiales para la Economía del Conocimiento que, según datos del Ministerio de Desarrollo Productivo, estuvo entre las ramas de mayor crecimiento en materia de empleo, con una suba del 14%, equivalente a 30.000 nuevos puestos formales.
Kulfas comentó que la industria del software es hoy uno de los principales sectores dentro de los servicios basados en el conocimiento, con el 46% del empleo total, y un gran dinamismo en los últimos años.
Agregó que estos servicios son el tercer complejo exportador del país, con más de u$s6.400 millones exportados en el 2021, lo que representó la primera suba interanual desde el 2017.