Así son las casas bioclimáticas que se estrenan en una provincia argentina
Se trata de una estrategia de viviendas sustentables pionera en el país, adaptadas al entorno y cuyo desempeño será evaluado por el Conicet.
En Junín se entregaron 16 viviendas del barrio Aguaribay, un proyecto innovador orientado a la eficiencia energética. La iniciativa forma parte del Proyecto GEF – Eficiencia Energética y Energías Renovables en la Vivienda Social Argentina, con financiamiento inicial del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Se trata de casas bioclimáticas que integran energías renovables y criterios de eficiencia energética, lo que posiciona a Mendoza como una de las provincias pioneras en concretar esta experiencia piloto. En un acto cargado de emoción, los adjudicatarios recibieron las llaves y la documentación de sus nuevos hogares.
El gobernador Alfredo Cornejo resaltó el valor sustentable de las unidades: “Estas viviendas no sólo cumplen con el objetivo de darle techo a una familia, sino que además son un modelo de lo que queremos para el futuro: hogares más eficientes, que cuiden la energía, el ambiente y también el bolsillo de los mendocinos”, afirmó.
Casas sustentables en Mendoza
El mandatario estuvo acompañado por el intendente de Junín, Mario Abed; la subsecretaria de Infraestructura y Desarrollo Territorial, Marité Badui; el presidente del IPV, Gustavo Cantero; el presidente de la Cámara de Diputados, Andrés Lombardi; junto a autoridades provinciales, municipales y las familias beneficiarias.
Badui explicó que “estas 16 viviendas tienen un diseño especial para la eficiencia energética y la adaptación al clima de la zona. Los muros están construidos con aislaciones térmicas, cuentan con calefón solar y se orientan de acuerdo con el clima. Además se van a monitorear junto al Conicet para evaluar su desempeño real en ahorro energético”.
En la misma línea, Cantero destacó que Mendoza es pionera en este tipo de programas: “Se decidió poner los fondos para terminarlas porque, de lo contrario, hoy no estaríamos entregando. Estas casas tienen prestaciones distintas en cada unidad, justamente para que el Conicet pueda medir y evaluar cuál es el mejor diseño en la práctica”.
El titular del IPV agregó que la provincia busca transformar el modo en que se conciben las construcciones: “La idea es avanzar hacia el etiquetado de viviendas según su eficiencia energética, igual que los electrodomésticos. Esto es lo que viene: cuidar el medio ambiente y también los recursos de las familias, que cada vez enfrentan servicios más caros”.
Sobre las unidades habitacionales
Las casas fueron construidas por la empresa Cebeco SA con una inversión total de $687,7 millones, de los cuales $42,9 millones fueron aportados por la provincia para finalizar la obra tras el recorte de fondos nacionales.
Cada unidad tiene 62 metros cuadrados cubiertos, distribuidos en dos dormitorios, baño completo, cocina-comedor y patio trasero. Además, están equipadas con cocina instalada, calefón solar, calefón instantáneo modulante, ventilación cruzada, envolvente térmica y carpintería con doble vidrio hermético. Según el prototipo, algunas incorporan también estufas de tiro balanceado, equipos de aire acondicionado frío-calor y paneles fotovoltaicos para la generación de energía limpia.
En materia de infraestructura, el barrio cuenta con redes de agua, cloaca y electricidad ejecutadas por el Municipio de Junín, mientras que el IPV se encargó de la red de gas.