Rascasuelos, la arquitectura subterránea que busca revolucionar las ciudades
Son edificios diseñados para construirse hacia abajo. Qué ejemplos hay en el mundo de este tipo de construcciones.
Un nuevo concepto arquitectónico está ganando terreno en las grandes ciudades: los rascasuelos, edificios que, en lugar de elevarse hacia el cielo, se extienden en múltiples niveles bajo la superficie terrestre.
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Qué son los rascasuelos
Los rascasuelos (también llamados earthscrapers) son edificios diseñados para construirse hacia abajo, es decir, bajo la superficie terrestre, en lugar de hacia arriba como los rascacielos. Son una respuesta innovadora a la creciente falta de espacio en las grandes ciudades y a la necesidad de desarrollar soluciones arquitectónicas más sostenibles y eficientes en el uso del suelo.
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Según datos de ONU-Habitat, en 2010, aproximadamente 980 millones de hogares urbanos carecían de una vivienda adecuada. En tanto, de proyecta que entre 2010 y 2030, otros 600 millones de hogares enfrentarán condiciones similares.
El diseño de los rascasuelos no solo busca optimizar el uso del espacio en entornos urbanos densamente poblados, sino también mejorar la eficiencia energética y aumentar la resistencia ante desastres naturales. Al estar bajo tierra, estas estructuras pueden aprovechar mejor la climatización natural, reduciendo el consumo de energía y las emisiones de carbono.
Qué desafíos implican los rascasuelos
Sin embargo, la construcción de rascasuelos enfrenta importantes desafíos técnicos y logísticos. La falta de luz natural y la ventilación adecuada son dos de los principales retos. Los arquitectos están explorando soluciones como el uso de espejos y fibra óptica para canalizar la luz solar al interior y sistemas avanzados de aire forzado para garantizar una ventilación constante. Además, las estructuras subterráneas deben estar protegidas contra la humedad y las filtraciones mediante materiales impermeables y sistemas de drenaje eficientes.
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La vida subterránea ya no es solo cosa de ciencia ficción. Proyectos de 'rascasuelos', parques y urbes enteras bajo tierra surgen por falta de espacio en las ciudades. Y abren también caminos para la supervivencia humana y la colonización de otros mundos. https://t.co/BNJcUQiae7 pic.twitter.com/N29czcA7aW
— Materia (@materia_ciencia) August 6, 2020
Otro desafío es la percepción psicológica de los espacios subterráneos. Para evitar la sensación de claustrofobia, los diseños incluyen espacios amplios y abiertos, iluminación artificial que simula la luz natural y materiales que generan una sensación de calidez y confort.
Dónde hay rascasuelos en el mundo
En el mundo hay dos ejemplos notables de proyectos de rascasuelos:
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- Earthscraper de Ciudad de México: este ambicioso proyecto propone una pirámide invertida de 65 niveles que se adentraría 300 metros bajo tierra en el corazón de la ciudad. Diseñado para albergar oficinas, viviendas y espacios culturales, busca preservar el patrimonio histórico de la zona al evitar construcciones en altura.
- Underground City de Pekín: conocida como la «Ciudad Subterránea», es una vasta red de túneles y espacios subterráneos construida durante la década de 1970 como refugio en caso de ataques. Aunque no fue concebida originalmente como un rascasuelos, su estructura subterránea ha sido reutilizada para fines comerciales y turísticos, demostrando el potencial de los espacios subterráneos en entornos urbanos.
Aunque el desarrollo de rascasuelos requiere de importantes inversiones y soluciones técnicas avanzadas, esta nueva forma de construir podría redefinir el horizonte de las grandes ciudades, no hacia arriba, sino hacia abajo.