Qué relación hay entre el cambio climático y la propagación del Covid, según especialistas
El aumento de los niveles de dióxido de carbono en la atmósfera y en los espacios interiores podría ser uno de los factores principales.
El último estudio sugiere que el cambio climático y el mantenimiento de ventanas cerradas podrían estar contribuyendo a la propagación de virus en el aire, incluido el que causa la COVID-19.
Los investigadores han encontrado que el aumento de los niveles de dióxido de carbono tanto en la atmósfera como en los espacios interiores juega un papel crucial en la prolongación de la viabilidad de las variantes de COVID que viajan en diminutas gotas en el aire.
Según el investigador principal, Allen Haddrell, investigador asociado sénior en ciencia de aerosoles en la Facultad de Química de la Universidad de Bristol, en el Reino Unido, este estudio representa un avance significativo en la comprensión de cómo y por qué el SARS-CoV-2 y otros virus se propagan por el aire que respiramos. Además, destaca la importancia de identificar medidas para detener esta propagación.
En experimentos de laboratorio, los científicos descubrieron que el aumento de las concentraciones de dióxido de carbono en el aire puede prolongar la viabilidad de los virus transmitidos por el aire.
Según los investigadores, mientras que el aire exterior típico contiene alrededor de 400 partes por millón (ppm) de CO2, elevar esta concentración a solo 800 ppm resultó en un aumento en la supervivencia de los virus transportados por el aire. Estos hallazgos fueron publicados el 25 de abril en Nature Communications.
Además, cuando la concentración de CO2 en el aire interior alcanzaba aproximadamente 3,000 ppm, similar a lo que se encuentra en una habitación llena de gente, los virus permanecían infecciosos en un nivel diez veces mayor después de 40 minutos, según los investigadores. Esta observación proporciona una perspectiva importante sobre por qué pueden ocurrir eventos de superpropagación en ciertas condiciones, destacó Haddrell en un comunicado de prensa de la universidad.
Los virus pierden su contagiosidad debido a la menor acidez de las gotitas exhaladas, dijo Haddrell. Pero el CO2 se comporta como un ácido cuando interactúa con las gotas, lo que permite que los virus vivan más tiempo mientras están en el aire. ”Muestra que abrir una ventana puede ser más poderoso de lo que se pensaba originalmente, especialmente en habitaciones abarrotadas y mal ventiladas, ya que el aire fresco tendrá una concentración más baja de CO2, lo que hará que el virus se inactive mucho más rápido”, dijo Haddrell.
Los resultados también muestran cómo los objetivos de cambio climático que buscan limitar los niveles de CO2 en la atmósfera de la Tierra también podrían ayudar a reducir la propagación de virus en el aire, agregó Haddrell.
La ciencia climática reciente ha proyectado que la concentración de CO2 en la atmósfera alcanzará más de 700 ppm para finales de siglo, señalaron los investigadores. ”Por lo tanto, estos hallazgos tienen implicaciones más amplias no solo en nuestra comprensión de la transmisión de los virus respiratorios, sino también en cómo los cambios en nuestro entorno pueden exacerbar la probabilidad de futuras pandemias”, dijo Haddrell.
”Los datos de nuestro estudio sugieren que el aumento de los niveles de CO2 en la atmósfera puede coincidir con un aumento en la transmisibilidad de otros virus respiratorios al extender el tiempo que permanecen infecciosos en el aire”, concluyó Haddrell.
Fuente: Infobae