Protesta ambiental alrededor del Jardín Botánico por el espacio “Secret Garden”

Un grupo de ambientalistas, defensores del patrimonio urbano y vecinas y vecinos de la ciudad de Buenos Aires participaron de un abrazo simbólico al Jardín Botánico “Carlos Thays”, en protesta del “Secret Garden”.

La protesta se hizo en contra del uso privado de un espacio público que fue declarado monumento histórico nacional en 1996 y refugio climático este año por el Gobierno porteño.

Distintos manifestantes se convocaron en la entrada principal del Botánico y corearon el lema “Parque sí, circo no”, con el fin de mostrar que el espectáculo inmersivo y lumínico Secret Garden tiene un impacto negativo en la flora y la fauna, además que banaliza los objetivos del parque Thays.

Allí, hubo representantes de las agrupaciones Basta de Demoler, Fundación Ciudad, Red de Defensoras del Ambiente y el Buen Vivir, Vecinos por la Ecología, Fundación Aluisa, Palermo Resiste, Casco Histórico Protege y Basta de Mutilar Nuestros Árboles, entre otras. 

Primero, se hizo el abrazo simbólico en las rejas del paseo, sobre la avenida Santa Fe. Luego, denunciaron el “impacto negativo” que tiene el show de luces y sonido en el patrimonio artístico y arquitectónico del Botánico, que tiene (entre otros tesoros) más de treinta obras de arte, un edificio central en estilo inglés, un herbario y cinco invernaderos art nouveau.

Además, se criticó el monto que las producías pagan a la Ciudad ($3.215.000) por el alquiler durante todo el mes de julio. Cabe destacar que el dinero recaudado será administrado por el Tesoro de CABA.

Como respuesta a esta protesta, tanto los productores de Secret Garden como funcionarios de la Secretaría de Ambiente indicaron que “se valora y respeta de manera irrenunciable el patrimonio que representa el Jardín Botánico Carlos Thays para la ciudad de Buenos Aires”.