Nueva guía de OIT busca involucrar a las empresas a promover una conducta empresarial responsable en la región

El desarrollo tecnológico, el cambio climático, los movimientos demográficos y la globalización son algunas de las megatendencias que están transformando las relaciones entre los diferentes actores sociales. Todo esto, enmarcado en un contexto de desconfianza global, en especial en lo que respecta a órganos públicos y a las empresas.

Un Informe de la CEPAL advierte que “la desconfianza ciudadana crece y está llevando a una desconexión entre sociedad e instituciones públicas, poniendo así en riesgo la cohesión social y debilitando el contrato social”.

Es este el contexto en el cual hoy las empresas desarrollan sus actividades.  Las empresas están conscientes de que son actores sociales con un enorme potencial de impactar la calidad de vida y el bienestar de las personas; contribuyendo a un desarrollo sostenible, a la paz y a la justicia social.

América Latina ha venido teniendo un crecimiento económico en los últimos años que no se correlaciona con el desempeño de sus indicadores sociales y ambientales. Hacia 2019, más de 62 millones de personas en la región seguían viviendo en condiciones de pobreza extrema, según la CEPAL, cifras que se han profundizado con la pandemia del COVID-19.

Asimismo, los costos del cambio climático se estiman que ascienden entre el 1.5% y el 5% del PIB de la región.

En materia de desarrollo sostenible, son 20 de 33 países de América Latina los que cuentan con mecanismos nacionales para coordinar la implementación de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Sin embargo, de estos países solo 11 cuentan con un marco nacional de indicadores para monitorear el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).  Por otra parte, los resultados del Índice ODS 2019, indican que únicamente 24 países tienen disponible al menos 80% de los indicadores, con puntajes bastantes más bajos que el promedio mundial.

En este marco, los lineamientos e instrumentos internacionales en materias de conducta empresarial responsable (CER) ponen la atención en que las empresas desarrollen un enfoque preventivo, que permita asegurar el respeto a los derechos humanos, las personas, las comunidades, los trabajadores y al ambiente. Por ende, comprender el significado del vínculo entre los Derechos Humanos y el quehacer empresarial es esencial para la proyección de la empresa en el siglo XXI.

En este sentido, y con el objetivo de apoyar prácticas de conducta empresarial responsable en América Latina y el Caribe, la OIT, a través del `Proyecto CERALC, lanzó una Guía interactiva en la cual se puedan encontrar principios y recomendaciones concretas sobre cómo empezar a gestionar la dimensión laboral de la CER.

“El enfoque preventivo que presentamos es un llamado a todas las empresas, sin importar su tamaño o sector económico, a dar sus primeros pasos en esta materia. Lo presentamos de manera simple y práctica en este documento y guía de implementación; indicó Nicolás Torres, Coordinador OIT del Proyecto CERALC para el Cono Sur.

La guía proporciona un recorrido por las principales iniciativas internacionales voluntarias como los ODS (Agenda 2030), los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos Humanos, las Guías Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales, así como también a la Declaración Tripartita de Principios de la OIT sobre Empresas Multinacionales y Política Social (Declaración EMN).

Además, vincula la CER en el mundo del trabajo y ofrece líneas de actuación para abordar tanto los temas de cumplimiento laboral, así como la adopción de políticas e implementación de programas que trascienden los requisitos legales para el trato de las personas trabajadoras.

Se abordan doce temas; de los cuales, los primeros nueve responden a la normativa de trabajo internacional y los últimos tres responden a las mejores prácticas internacionales en otras materias.

Cada uno de los temas incluye una introducción, un listado de las referencias a las normas internacionales de OIT, las posibles situaciones de vulneración de derechos más comunes, y finalmente se presenta un listado de las referencias que se pueden usar para documentar las buenas prácticas de la empresa.

Para visitar el portal: Dimensión Laboral de la CER: Una guía para empleadores, ingrese a: http://guiacerempleadores.org/completa/inicio/