Millonario proyecto de la mayor generadora de electricidad para “guardar” energías renovables
Se trata de una solución tecnológica avanzada para conservar energía y utilizarla posteriormente que se conoce como BESS y que la compañía instalará en sus plantas locales.
Desde que en 1800, Alessandro Volta inventó la pila, se pudo comenzar a almacenar la energía para usarse en el futuro y se demostró que las baterías son un componente crucial de cualquier estrategia energética.

Especialmente, en un contexto como el actual ya que permiten estabilizar las redes eléctricas, mejorar la integración de las diferentes energías renovables y, de este modo, reducir las emisiones de carbono.
De hecho, un informe elaborado por la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) reclama multiplicar por seis la capacidad mundial de almacenamiento de energía al considerarlas fundamentales para alcanzar los objetivos climáticos y energéticos.
En este sentido, uno de los principales métodos para almacenar energía es el Battery Energy Storage System (BESS) que se presenta como una solución tecnológica avanzada para conservar energía y utilizarla posteriormente.
El mecanismo no sólo se basa en las baterías, sino que incorpora una serie de herramientas de software y hardware que permiten gestionar el suministro de electricidad, mejorar la eficiencia de las redes, evitar intermitencias y proporcionar energía de respaldo en caso de interrupciones.
Guardar para cuando falte
Un informe del grupo español Iberdrola sostiene que los sistemas BESS pueden ayudar de manera significativa en la integración de energías renovables y el fomento de la electrificación de la economía.
El documento explica que el sistema funciona almacenando electricidad en periodos de baja demanda o cuando hay un exceso de producción, y liberándola cuando la demanda es alta o cuando hay interrupciones en el suministro eléctrico.
La carga puede provenir tanto de la propia red eléctrica como de instalaciones de energía renovable y la diferencia con una batería es el software que, empleando herramientas como la Inteligencia Artificial o las soluciones basadas en datos, permite detectar cuándo es el momento de liberar la energía almacenada permitiendo así una gestión avanzada.
Este sistema de gestión también supervisa continuamente el estado de las baterías, controlando factores como la carga, la temperatura y el ciclo de vida.
De esta forma, se asegura que el funcionamiento sea seguro y eficiente y que, cuando hay alta demanda de electricidad o una interrupción en el suministro, todo funcione correctamente y pueda ser utilizada por los consumidores o redistribuida a la red eléctrica.

Sistema crucial
También se sostiene que el sistema BESS es considerado crucial para las energías renovables debido a su capacidad para mitigar la intermitencia inherente a fuentes como la solar y la eólica que no siempre producen electricidad de manera constante si se tiene en cuenta que el sol no brilla durante la noche y el viento no siempre sopla con la misma intensidad.
De todos modos, el mecanismo facilita la integración de una mayor cantidad de energía renovable en la red eléctrica sin comprometer su estabilidad debido a fluctuaciones rápidas y no planificadas en la generación de energía.
Así se contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero al maximizar el uso de energías renovables y minimizar la dependencia de fuentes de energía fósil.
El primero de Argentina
En este contexto, la principal generadora privada de energía de Argentina ha dado un paso histórico en la modernización de la red eléctrica nacional al introducir a gran escala el sistema BESS en nodos críticos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Se trata de Central Puerto, que tiene como sus principales accionistas a Guillermo Reca, la familia Miguens-Bemberg y Eduardo Escassany y maneja un diversificado portfolio de negocios que abarcan la participación en la distribución y transporte de gas natural, la venta de vapor, actividades forestales y mineras.
Además, la compañía acaba de comprar el Parque Solar Cafayate, en Salta, y que tiene una capacidad de 80 MW de potencia instalada y una generación anual de 220 GWh, equivalente al consumo de 56.400 hogares.
Este parque solar se encuentra en operación desde hace seis años, comercializa su energía bajo el contrato RenovAr 1.5 con CAMMESA.
Además, Central Puerto avanza en la construcción del Parque Eólico Alamitos, ubicado frente a al Parque Eólico La Genoveva I, a 30 kilómetros de la ciudad de Bahía Blanca.
El nuevo desarrollo contará con una potencia instalada de 111 MW y será capaz de generar 500 GWh de energía limpia al año, suficientes para abastecer a 128.200 hogares. Con una inversión de u$s140 millones, se prevé su entrada en operación hacia fines de 2027.
En el caso del sistema BESS, se trata de una iniciativa que implica una inversión de u$s130 millones específicamente para desarrollar este mecanismo de almacenamiento de energía con baterías de litio que será distribuido en dos plantas estratégicas.
Cada unidad permitirá «aplanar» la curva de demanda, almacenando energía en horas de baja exigencia para inyectarla durante los picos de consumo.
Cubrir la mayor demanda diaria
Como parte del proceso, Central Puerto operará un total de 205 MW de capacidad de almacenamiento que serán divididos entre la plana Nuevo Puerto (Puerto Madero), con 150 MW de potencia, y Central Costanera, con otros 55 MW de potencia.
Ambos sistemas están diseñados para inyectar energía a la red durante cinco horas consecutivas, cubriendo la ventana de mayor demanda diaria y utilizarán contenedores de baterías de ion-litio de última generación, capaces de responder en milisegundos ante fluctuaciones de la red.
Además de suministrar energía en picos, el BESS proporcionará estabilidad de frecuencia y respaldo ante fallas imprevistas, reduciendo la necesidad de encender turbinas de gas menos eficientes y más costosas para picos cortos.
El plan forma parte de un plan de inversión más amplio de u$s 520 millones que incluye energía eólica y solar y cuyo financiamiento cuenta con el respaldo de entidades internacionales como la Corporación Financiera Internacional (IFC) del Banco Mundial.

La implementación de BESS por parte de Central Puerto es considerada como un hecho disruptivo para el sistema energético nacional por tres razones:
- Eficiencia de Red: alivia la saturación de las líneas de transmisión en el AMBA sin necesidad de construir nuevas y costosas líneas de alta tensión de largo alcance.
- Sostenibilidad: facilita la integración de energías renovables intermitentes (solar y eólica), ya que las baterías compensan la variabilidad de estas fuentes.
- Reducción de Costos: al haber ofertado precios un 40% por debajo del valor de referencia, Central Puerto presiona a la baja el costo de despacho del sistema, beneficiando la tarifa final mediante mayor eficiencia.
Plan mayor
Pero además del sistema BESS, la empresa también usará fondos que le aportará la CFI para respaldar otra inversión considerada emblemática como es la adquisición de las acciones del llamado vehículo de propósito especial (SPV) que tiene la nueva concesión de 30 años para la central hidroeléctrica Piedra del Águila en Neuquén, como parte de la iniciativa de Argentina para reprivatizar activos hidroeléctricos estratégicos.
En este caso, el plan se basa en un un préstamo senior a nueve años de hasta u$s300 millones que se conformará por un crédito A de u$s50 millones y otros u$s250 millones movilizados a través de créditos B y/o créditos paralelos.
Parte de esos fondos se usarán para la instalación del sistema BESS de 150 MW que se ubicará junto a la Central Térmica Nuevo Puerto de CEPU que tiene una capacidad instalada de 1.440 MW.
El proceso incluye una presa de gravedad de hormigón con una altura máxima de 170 metros y una central eléctrica equipada con cuatro unidades generadoras de 360 MW cada una.
La instalación también abarca tomas y tuberías forzadas, un aliviadero, desagües de fondo e infraestructura operativa asociada, como caminos de acceso, un puente y sistemas de suministro de energía eléctrica.
Desde el inicio de su operación comercial, la planta ha producido históricamente un promedio de 4.439 GWh al año mientras que el BESS de Nuevo Puerto tendrá una capacidad inicial de almacenamiento de energía de 750 MWh, lo que le permitirá entregar 150 MW de energía durante cinco horas continuas.
Con aval del Banco Mundial
Para avalar el proyecto, la CFI realizó revisiones concretas de la información técnica y ambiental y social (A&S) aportada por CEPU; visitas a las centrales realizadas en septiembre pasado; entrevistas con la gerencia y los empleados de la compañía, y una revisión de la información pública disponible.
Entre la documentación revisada se incluyen las políticas y procedimientos de CEPU, el Manual del Sistema Integrado de Gestión (MIMS), la Evaluación de Impacto Ambiental del BESS, la Auditoría Ambiental de la CHP, las estadísticas y procedimientos de salud y seguridad ocupacional, los registros y documentos de recursos humanos, y los datos de monitoreo ambiental.
El sistema entrará en funcionamiento a fines de 2026 y es catalogado por la CFI como un proyecto de Categoría B según la Política de Medio Ambiente y Sostenibilidad Social del organismo. “Con base en la información revisada por la CFI, el proyecto propuesto tendrá impactos ambientales y sociales adversos limitados que son pocos, específicos del sitio, en gran medida reversibles y fácilmente abordables a través de las medidas de mitigación existentes y las buenas prácticas industriales internacionales (GIIP)” se detalla en un documento elaborado por el ente del Banco Mundial.
En este sentido, se aclara que los riesgos y problemas ambientales y sociales clave incluyen la implementación efectiva de los procedimientos de las normas ESHS corporativas para la operación y el mantenimiento de las HPP y la construcción y operación de BESS; la planificación de emergencias es la gestión de la respuesta; condiciones laborales y de salud y seguridad ocupacional, incluso para los contratistas; riesgos de la cadena de suministro y L&FS relacionados con BESS.















