Más inversión: líderes del G7 se comprometen a luchar contra el cambio climático
Durante la cumbre que se llevó a cabo en Inglaterra, los jefes de Estado respaldan nuevos objetivos medioambientales. De qué se tratan.
En última jornada de la Cumbre del G7 en Inglaterra, los líderes mundiales que integran el bloque, se comprometieron a respaldar nuevos objetivos medioambientales y de reducción de emisiones para frenar el cambio climático.
Tras casi dos años sin reunirse por la pandemia, los jefes de Estado y de gobierno de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y el Reino Unido acordaron proteger el 30% de la tierra y los océanos para el final de esta década.
Este “Pacto por la Naturaleza”, destinado a detener y revertir la pérdida de biodiversidad, también se comprometieron a reducir casi a la mitad sus emisiones de carbono para 2030.
Además, tendrán la obligación de utilizar únicamente, “lo antes posible”, el llamado carbón limpio para la producción de energía, el fin de las ayudas gubernamentales a los combustibles fósiles en el extranjero y la eliminación progresiva de vehículos de gasolina y diésel.
Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, celebró los resultados de la cumbre sobre el cambio climático como un “fuerte compromiso”, a pesar de que los países ricos industrializados no pudieron “no han podido determinar aún sus planes hasta ese punto”.
“Pero creo que el compromiso de la protección del clima, el objetivo de 1,5 grados objetivo, y el Acuerdo de París por parte de todos los países del G7: Eso es un fuerte compromiso en sí mismo”, agregó.
Más inversión
El G7 también acordó aumentar sus contribuciones financieras y cumplir con una promesa de gasto de 100.000 millones de dólares al año para ayudar a los países más pobres e instaron a los países desarrollados para que se unan al esfuerzo.
A través de un comunicado las siete mayores economías avanzadas del mundo, sostuvieron: “Reafirmamos el objetivo colectivo de los países desarrollados de movilizar conjuntamente 100.000 millones de dólares al año de fuentes públicas y privadas hasta 2025, en el contexto de acciones de mitigación significativas y la transparencia en su aplicación”.
Ola de protestas
Mientras que se llevaba a cabo la cumbre, cientos de surfistas se lanzaron el sábado al agua en la playa de Gyllyngvase, en el condado inglés de Cornualles, para exigir a los líderes del G7 que tomen medidas para proteger el océano en el marco de la cumbre que se desarrolla en esa zona turística.
El grupo de campaña Surfers Against Sewage (Surfistas contra las aguas residuales) fue el encargado de organizar la protesta en la que casi 1.000 personas se lanzaron al agua con tablas de surf y kayaks mientras que otros manifestantes prendieron fuego a una maqueta de un barco vikingo cerca del hotel donde se alojaban los delegados del G7, en un intento por destacar “la muerte de los océanos”, según consignaron los medios locales.
A su vez, integrantes de la organización humanitaria Oxfam inició las protestas del día, sentados en la playa en Falmouth disfrazados de líderes mundiales pidiendo que el G7 se comprometa a reducir aún más las emisiones de gases contaminantes y proporcione ayuda a los más afectados por el cambio climático.