Investigadores perforaron la corteza terrestre por primera vez y esto fue lo que encontraron
Esta hazaña sin precedentes marca un hito en la exploración del interior del planeta y promete revelar valiosos conocimientos.
A través de la investigación Joides, del Programa Internacional de Descubrimiento de los Océanos (IODP), un equipo de especialistas lograron perforar la corteza terrestre, alcanzando el manto de la Tierra.
Esta hazaña sin precedentes marca un hito en la exploración del interior del planeta y promete revelar valiosos conocimientos sobre su estructura y composición.
Gracias a una fosa marina que proporciona acceso directo al manto terrestre, situada en una profundidad que va desde los 35 kilómetros hasta los 2.360 kilómetros, los científicos extrajeron trozos de un material oscuro en forma de tubos o cápsulas.
Estos fragmentos, que presentaban una temperatura superior a los 200 grados Celsius, fueron recuperados desde las profundidades de la fosa Atlántica, en el océano Atlántico norte, entre América y Europa.
A diferencia de los intentos anteriores realizados por China y Rusia, que se enfocaron en perforar desde el suelo firme, el equipo del Joides optó por un enfoque más corto y directo.
Las profundidades oceánicas albergan fosas de varios kilómetros que llegan a lugares más profundos de la Tierra, lo que facilita la tarea de los científicos al explorar las capas internas del planeta.
Cómo es el proceso de perforación
El barco Joides está equipado con una serie de tubos de perforación que se ensamblan progresivamente para ganar profundidad, mientras una broca giratoria en la parte superior realiza la perforación.
Una vez que alcanzaron los fragmentos del manto que emergen hacia la corteza, se llevó a cabo un proceso de enfriamiento para poder extraerlos a través de la tubería.
Los geólogos del IODP extrajeron muestras cilíndricas de rocas del manto, que tenían una extensión de aproximadamente un kilómetro y presentaban un color entre gris y verde.
Según los análisis preliminares realizados a bordo del barco, los científicos creen que estas muestras consisten principalmente en peridotita, el tipo de roca más común en el manto superior. Sin embargo, también se detectó la presencia de asbesto en estas rocas, lo que requirió tomar precauciones de seguridad debido a su asociación con ciertos tipos de enfermedades, sobre todo, cáncer.